Excelso el nivel de Juanjo Lobato en este arranque de temporada. El prometedor inicio en el Tour Down Under se ha confirmado en la carrera de casa, en la Vuelta a Andalucía. De nuevo, el gaditano ha mostrado una superioridad que no habíamos visto en un ciclista español en este tipo de llegadas desde el mejor momento de Óscar Freire. Lobato lo ha vuelto a hacer. Esta vez en un repecho aún más duro que el de la segunda etapa pero con la misma o superior hegemonía. Degenkolb ha vuelto a terminar desesperado con el nivel de su rival, una rivalidad que se lleva de calle el español. Un remate que muestra la supremacía del ciclista de Movistar en este tipo de llegadas y apunta de gran forma hacia Milán-San Remo.
Por otro lado, en el duelo entre Froome y Contador, el madrileño no pudo atacar e intentar arrebatarle los dos segundos que le separaban. Había mucho interés entre los rematadores y los gallos de la carrera no pudieron actuar aunque terminaron dentro del top 10. Por tanto, general para Froome seguido de Contador e Intxausti.
Una jornada que se presentaba emocionante. Sin la dureza de los días anteriores pero, la escasa diferencia entre Froome y Contador, hacía del repecho final en Alhaurín, un nido de lucha y batalla. Todo ello en una etapa de 170 kilómetros entre Montilla (Córdoba) y Alhaurín de la Torre (Málaga). Un terreno lleno de repechos y constante sube y baja que, sin llegar a ser terreno montañoso, hace sufrir en los últimos kilómeotrs. El Alto de los Embalses (3ª), a mitad de etapa, era la única dificultad puntuable. El repecho de meta, de aproximadamente kilómetro y medio con los últimos 300 metros al 9%, podía crear algunas diferencias.
Escapada con gran nivel
Una etapa que transcurrió por los derroteros habituales. El pelotón permitió una fuga controlada, muy controlada. Y es que los escapados no lograron una diferencia superior a los tres minutos. El control de Movistar y Sky fue total hasta que lograron neutralizar al corte de cabeza, cosa que finalmente no fue tan sencilla, como se verá luego.
Por tanto, un corte de siete corredores de gran nivel y habituales en las escapadas, con Maciej Paterski (CCC Polkowice), Merhawi Kudus y Sogenzo Jim (MTN-Qhubeka), Johnny Hoogerland (Team Roompot), Peio Bilbao (Caja Rural), Rodolfo Torres (Colombia) y Víctor Martín (Burgos BH) fue el protaonista del grueso de la jornada. Como decíamos, la diferencia nunca fue muy grande bajo el minimalista control de Sky y Movistar. No querían sustos en un terreno favorable para los mismos.
Peio Bilbao, rey de la montaña
Por destacar un hecho a lo largo de la jornada, Peio Bilbao pasaba en primera posición por el Alto de los Embalses y se llevaba así la clasificación de la montaña. En el descenso desde la montaña cordobesa, la renta empezó a reducirse de forma seria, pero dejando margen a los siete de delante. La ventaja bajó del minuto a 45 kilómetros de meta.
La renta se situaba estable en torno al medio minuto cuando, a falta de 25 kilómetros, Jim y Torres no podían con el ritmo de sus compañeros de escaramuza y eran neutralizados. Poco más tarde, una caída que afectó a Peio Bilbao y Víctor Martín, les hizo perder contacto con la escapada y ser neutralizados kilómetros más tardes.
Paterski, el más fuerte
El ritmo era enorme, tanto en la escapada como en el pelotón. Por delante, el trío de cabeza mostraba un gran entendimiento e incluso remontaba terreno, aumentando su renta y sus esperanzas. Mientras, en el pelotón, equipos como Lotto-Soudal o Giant-Alpecin se sumaban en cabeza de pelotón. Pero tanto Paterski como Kudus y Hoogerland tenían un gran entendimiento, pero eso no iba a ser suficiente.
Tarde o temprano, el pelotón les iba a cazar y eso fue aprovechado por Paterski, el más fuerte de la escapada, que demarró a 18 kilómetros de meta hasta que dejó atrás a sus compañeros. El sudafricano y el neerlandés lo intentaron pero fueron absorbidos por el grupo comandado por Movistar.
Al final, ha doce kilómetros de meta, el polaco se mostraba fuerte, potente pero sin demasiadas opciones viendo el interés tan grande que llegaba por detrás. Paterski fue cazado dentro de los últimos diez kilómetros y ahí llegó el momento de colocar a los hombres rápidos lo más delante posible. CCC primero y LottoNL-Jumbo después, para Grega Bole y Moreno Hofland, respectivamente, tiraron del grupo en las amplias avenidas de las afueras de Alhaurín. También aparecían Topsport y Giant-Alpecin. El interés de los belgas residía en un hombre, Edward Theuns, un clasicómano en ciernes que ya sorprendió en 2014.
Lobato amarga a Degenkolb
Theuns lanzó un sólido ataque en el inicio de la parte más dura del repecho final, a un kilómetro de meta. Parecía que la etapa era suya pero en los últimos 300 metros, los grandes porcentajes rebajaron su ritmo. El pelotón se acercó aunque seguía manteniendo algunos segundos de renta. Pero ese fue el momento de Lobato. El gaditano saltó en la parte más dura, con una potencia exhibida como si fuera fácil demarrar en esas condiciones. Un repecho de los duros, donde solo los grandes ciclistas pueden hacer lo que hizo el velocista de Movistar, que cada día sorprende con esa versatilidad en las llegadas más duras. Con aparente facilidad, Lobato saltaba del grupo con Degenkolb a su rueda, pero el alemán no podía siquiera seguir su estela. Ambos superaron a Theuns, hundido ya a esas alturas.
El español afrontó con confianza la última curva en la que Degenkolb apareció derrotado. Y con tiempo para celebrar, Lobato festejó su tercer triunfo del año en pleno camino hacia San Remo. Degenkolb, desesperado con el nivel exhibido por el de Trebujena, entró segundo y Sylvain Chavanel (IAM Cycling), seguido de Bole y Ligthart, encabezaba el grupo de favoritos en donde figuraban Froome y Contador. El madrileño ni siquiera pudo intentar el demarraje ante el gran nivel exhibido por los hombres potentes.
Por tanto, Lobato que se corona, que sonríe hacia su gran objetivo, que busca ya engrosar su palmarés en Milán-San Remo. El gaditano ha sido profeta en su casa con dos victorias de nivel, demostrando una gran superioridad que, de mantener, le hacen un claro candidato a la Classicissima. Por otro lado, Chris Froome se coronó como ganador de la 61 edición de la Vuelta a Andalucía ganándole el duelo a Alberto Contador que fue segundo. Beñat Intxausti completaba el podio.