Esperanzador inicio para el ciclismo español

En una época de apogeo tocando a su fin, tras una saga de grandes ciclistas, de grandes éxitos y de ilusión, el ciclismo español ve el futuro negro. No parece haber relevo para esta gran generación encabezada por los Contador, Purito, Valverde, Freire, Sastre o Samuel Sánchez. El oscurantismo se cierne sobre el ciclismo español, al que se le presupone una época de sequía futura. Pero el inicio de campaña deja margen a la esperanza.

Y no solo por las victorias sino por las sensaciones. Además, el relevo parece llegar en diferentes dosis, con escaladores, clasicómanos, velocistas… Las victorias de Juanjo Lobato, el gran triunfo de Rafa Valls ante los mejores del mundo en Omán y las buenas sensaciones de Intxausti, Nieve, Castroviejo, Rubén Fernández o Jesús Herrada provocan que las esperanzas aumenten. Ninguno de ellos es excesivamente joven, está en la edad de despuntar, de crecer definitivamente como deportista. De dar ese salto que debe llegar en este 2015. Puede que no sea una generación tan prolífica como la de los años 2000 pero el ciclismo nacional seguirá muy vivo tras la decadencia de los Contador, Purito y Valverde en los próximos años.

Lobato, rematador para años

La punta de lanza de esta nueva generación es Juanjo Lobato. El velocista está en un momento de forma muy dulce y, a este nivel, muy pocos podrán batirle. Ya lo demostró el pasado año con resultados de mucho prestigio y, sobre todo, el cuarto puesto en Milán-San Remo le otorgó mucha moral.

Por momentos, Lobato recuerda a Óscar Freire

Lobato ha ido puliéndose y encontrando un terreno explotado a menor nivel: los finales en repecho. Se ha impuesto en los tres que ha disputado este año en el Tour Down Under y en Andalucía (en Lucena y Alhaurín) y ante velocistas de nivel. Además, su forma de saltar, explosiva, fácil, sugiriendo una gran sencillez, desespera a sus rivales, como ha ocurrido con Degenkolb en la Ruta del Sol. Recuerda, en muchos momentos, al gran Óscar Freire y parece destinado a ganar en numerosas llegadas rápidas en 2015. Puede que no sea el más rápido del pelotón pero sí uno de los más explosivos y eso hace que los finales al sprint en repecho sean nicho privado del gaditano. Milán-San Remo no tiene repecho final pero la dureza acumulada en la última parte hace que sea su objetivo más ambicioso de la temporada.

Valls, victoria de otro nivel

A sus 27 años, Rafa Valls consiguió en Omán la victoria de mayor prestigio de su carrera. Ya se impuso en el Mirador del Potrero en el Tour de San Luis en 2010 pero este triunfo es más especial. Especial porque lo consiguió en medio de una legión de estrellas, con Valverde, Nibali y Purito a la cabeza. Valls no es un novato aunque sí un ciclista con mala suerte en sus equipos, Geox y Vacansoleil desaparecieron cuando el tenía contrato en vigor, y con las caídas. Ahora, da un golpe encima de la mesa y, a pesar de ser considerado un gregario, podría liderar a Lampre en carreras menores.

Una 'larga' lista para el futuro

Además de las victorias de esta “nueva generación”, hombres como Beñat Intxausti, Mikel Nieve, Ion Izagirre, Rubén Fernández, Jonathan Castroviejo o Jesús Herrada han tenido protagonismo en este inicio de campaña. Los dos primeros en Andalucía, acabando tercero y cuarto, respectivamente. El uno lideró con paso firme a Movistar. El otro, estuvo apoyando a su líder en todo momento y se ha sabido buscar la vida en solitario cuando Froome se iba a pugnar con Contador.

Por otro lado, la calidad de Ion Izagirre como escalador completo es indiscutible y su inicio de temporada ha sido muy positivo, con el tercer puesto en Malhao, acabando décimo en la general de la Volta al Algarve y siendo undécimo en Murcia. Por su parte, tanto Castroviejo como Herrada han sido protagonistas en la carrera lusa, intentando llegar a la gloria por medio de escapadas. Por último, Rubén Fernández, que debutaba en el equipo Movistar esta temporada, lideró al equipo en las carreras montañosas como el Tour Down Under, donde fue tercero en la etapa reina y acabó quinto en la general, y en el Algarve fue muy regular y acabó entre los diez primeros.

Fuera de Movistar, en el Caja Rural hay varios ciclistas jóvenes llamados a ser el relevo de la generación actual. El que mejor ha arrancado es Miguel Ángel Benito, un ciclista muy completo que se desenvuelve bien en grupos pequeños. Fue cuarto en la clasificación de los jóvenes en la Estrella de Besseges. Por otro lado, el escalador Omar Fraile no ha tenido suerte en el arranque de campaña pero apunta fuerte al igual que el rematador Carlos Barbero, lesionado, pero con grandes cotas por superar.

Por tanto, un inicio de 2015 esperanzador para el ciclismo español. Muchos dicen que no hay relevo y quizás sea verdad, hablando del altísimo nivel que vive el ciclismo español. Pero la calidad y los triunfos en el futuro parecen asegurados.

Victorias de los ciclistas españoles en 2015