El ruso Anton Vorobyev (Team Katusha) se impuso en la contrarreloj inicial de los Tres Días de Flandes Occidental, consiguiendo un tiempo total 7:57. En segunda posición finalizó el neozelandés Jesse Sargent (Trek Factory Racing), que terminó a cuatro segundos del vencedor, un segundo más rápido que el tiempo del tercer clasificado, el checo Jan Barta (Bora-Argon).

La primera etapa de los Tres Días de Flandes Occidental consistió en una contrarreloj de siete kilómetros que discurrió por la localidad de Middelkerke. Pese a tratarse de un prólogo en el que los ciclistas tenían que recorrer una distancia pequeña, esta primera etapa es determinante para el resultado final, pus en los últimos años el ciclista que ganó la primera etapa terminó consiguiendo el triunfo final.

El primer ciclista en tomar la salida fue el belga Olivier Pardini (Verandas Willems). Tras él, y en intervalos de un minuto, los 183 ciclistas comenzaron a tomar la salida de esta primera etapa de la carrera. El primer ciclista en marcar un tiempo a tener en cuenta fue el belga Victor Campenaerts (Topsport Vlandeeren-Baloise), que registró un tiempo de 8:17 al cruzar la línea de meta. Los mejores ciclistas iban saliendo con el paso de los minutos y el primero en batir el tiempo de Campenaerts fue el belga Guillaume Van Keirsbulck, que marcó un tiempo de 8:13.

Poco le duró la alegría al ciclista del equipo Etixx-Quick Step, pues unos minutos después, Jempy Drucker (BMC Racing Team) paró el reloj en 8:08. Martijn Keizer (Team LottoNL) estableció el mejor tiempo en 8:06, pero el siguiente ciclista en marcar un tiempo fue el ruso Vorobyev, que rebajó la barrera de los ocho minutos y paró el crono en 7:57.

Los ciclistas seguían tomando la salida y cruzando la línea de meta. Ninguno era capaz de rebajar los ocho minutos, pero el checo Jan Barta estuvo muy cerca de conseguirlo, registrando un tiempo de 8:02. Después llegó el turno de uno de los especialistas, el neozelandés Sargent, que se colocó en segunda posición con un tiempo de 8:01.

Pese a que aún quedaba un buen número de corredores en tomar la salida y cruzar la línea de meta, ninguno de ellos logró colocarse entre los tres primeros en la tabla de tiempos, por lo que la victoria fue a parar al ruso Anton Vorobyev, el único corredor capaz de bajar de los ocho minutos.

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