Tras la disputa de la etapa reina, la morfología de los perfiles vuelve a variar hacia una jornada llana aunque con dificultades para los velocistas. Y es que la carrera gira hacia el sur, buscando ya la costa, pero las carreteras complicadas y los repechos son constantes en esta parte de Francia.

La quinta etapa de la París-Niza transcurre desde Saint-Étienne hasta Rasteau con 182 kilómetros de recorrido. Las colinas de las clásicas de Ardèche y Drôme serán protagonista en una etapa con tintes de primavera francesa. El recorrido arranca con un puerto de primera categoría de salida. El paso por el Col de la République puede hacer mucho daño para lo que resta de etapa, una etapa larga y de desgaste. Tras superar unos 70 kilómetros totalmente llanos, llega la zona puertos de tercera. El Col du Devés (3ª) y la Côte de l'Aleyrac (2ª) servirán para seleccionar la carrera mientras que, tras una serie de repechos continuados, el pelotón afrontará la Côte de Buisson (3ª - 1,8 km al 4,3%), a solo diez kilómetros de meta. El paso por este puerto añadirá emoción a la llegada y los velocistas deberán estar muy bien colocados para poder disputar el sprint final.

¿Llegada masiva o seleccionada?

Habrá que estar atentos al grado de selección que puede hacer dicho puerto. En caso de que los velocistas puros no tengan problemas en la cota de tercera, de nuevo repetirán candidatura los Alexander Kristoff (Katusha Team), John Degenkolb (Giant-Alpecin), Nacer Bouhanni (Cofidis), Arnaud Démare (FDJ), Michael Matthews (Orica GreenEdge) o André Greipel (Lotto-Soudal). En un segundo escalón aparecerían hombres como Bryan Coquard (Europcar), Moreno Hofland (LottoNL-Jumbo), Niccolo Bonifazio (Lampre-Merida), Bem Swift (Team Sky), José Joaquín Rojas (Movistar Team), Giacomo Nizzolo (Trek Factory Racing), Van Genechten (IAM Cycling) y Yauheni Hutarovich (Bretagne Seche Environnement).

Pero en caso de que la selección sea mayor en ese paso de montaña, habrá velocistas que queden eliminados. El más fuerte de ellos en este tipo de finales es Matthews. No parece que el australiano vaya a tener problemas con esa cota de tercera y es muy posible que, tanto de una manera como de otra, esté peleando por la victoria. Kristoff o Degenkolb tampoco lo hacen mal en finales de este tipo, más duros y enrevesados. Además, se abre la nómina de candidatos al sprint con hombres como Michael Albasini (Orica GreenEdge) o Arthur Vichot (FDJ). Grandes rematadores aunque con menor punta que los velocistas puros.

Matthews se impuso en Saint-Pourçain aprovechando un ligero repecho final | Fuente: ASO - G.Demouveaux.

Con varios días de competición en las piernas, los equipos de los velocistas tendrán que tener mucho cuidado con posibles ataques dentro de los últimos diez kilómetros. Un caramelito que puede ser aprovechado por gente de la calidad de Jan Bakelants (AG2R La Mondiale), Philippe Gilbert (BMC Racing Team), Thomas Voeckler (Europcar), Lars Boom (Astana Team), Sylvain Chavanel (IAM Cycling) o Bob Jungels (Trek Factory Racing).

Clasificaciones tras la cuarta etapa