El equipo Caja Rural-Seguros RGA siempre se caracteriza por ser un equipo ambicioso. Si no se pelea no se logra nada. Desde la dirección lo saben por eso su mánager Eugenio Goikoetxea destacó la necesidad de aprovechar la “fuerza del grupo” para lograr resultados, resultados que ahora están llegando. Victoria en la Vuelta a Castilla y León, en el Giro del Apenino, dos en la Vuelta a Turquía, una en Selcuk y otra en Estambul y otra en Los Cuatro días de Dunkerque. A eso hay que sumarle la victoria de etapa y el maillot de la montaña logrados en la Vuelta a la Comunidad de Madrid.

El equipo perdió a uno de sus líderes en la segunda semana de abril El mes de abril no comenzó bien. Los dichosos bolardos situados en plena Gran Vía de Bilbao, donde finalizaba la primera etapa de la Itzulia,  mandaron a Sergio Pardilla al hospital. El manchego nunca había corrido la carrera, y en su primer día de competición en la Vuelta al País Vasco la desgracia se cebó con él. Su equipo quería dedicarle un triunfo lo antes posibles. Aunque no fue posible hacerlo en Euskadi, el gran papel del equipo navarro le valió para que Omar Fraile luciese el maillot de la montaña en el podio final de Aia.

Al día siguiente el Caja Rural-Seguros RGA  fue a Amorebieta luciendo el número uno. Pello Bilbao ganador en 2014 era uno de los favoritos. La carrera se volvió loca desde el principio y nada más arrancar se formó una fuga numerosa que José Herrada supo resolver. El sprint del grupo, correspondiente a la pelea por el tercer puesto, lo ganó una de las grandes esperanzas del equipo, el burgalés Carlos Barbero.

Pello Bilbao abre la cuenta

Y por fin llegó el tan ansiado triunfo. Fue Pello Bilbao quien abrió la lata tras imponerse en la primera etapa de la Vuelta a Castilla y León. El de Gernika demostró tener buenas piernas en la Itzulia – fue 12ª en Bilbao y 8ª en Gasteiz – y aprovechó ese estado de forma logrado en Euskadi para vencer al sprint en Ávila y otorgar así el primer triunfo del año para su equipo. Carlos Barbero fue tercero en esa primera etapa de la ronda leonesa.

El próximo triunfo vendría de la mano de uno de los corredores más combativos del pelotón, Omar Fraile. El de Santutzi, ganador de la montaña en la Vuelta al País Vasco, quería demostrar que además de ser un corredor para pelear, también lo es para ganar. En la agenda de Euskaltel en su momento, el vasco tenía ansia de lograr su primer triunfo como profesional. Y al fin llegó. El corredor sorprendió al pelotón en el Giro del Apennino y alzó los brazos por primera vez en su carrera en una jornada con un perfil complicado.

Doblete en Turquía

Pero si hay una carrera para recordar es la Vuelta a Turquía. Allí, el equipo navarro ganó dos etapas y la clasificación general por equipos. El primer triunfo fino de la mano de Pello Bilbao, que demostró seguir con muy buenas piernas. El vasco cruzó la meta de la sexta etapa, con final en alto,  sorprendiendo al resto de corredores para lograr la tercera victoria del año para la estructura.

Omar Fraile y Luís Mas se han estrenado este año Pero eso no fue todo. Si Omar Fraile se estrenó cosa diez días atrás, otro que también triunfó por primera vez Luís Más. El ciclista mallorquín sorprendió a todos en la octava y última etapa, incluido a Mark Cavendish, que ya había ganado 3 etapas en su periplo por tierras turcas. Otro corredor combativo que por fin alzó los brazos. Tesón y fua para sumar el primer triunfo de su carrera y el cuarto de los navarro

Omar Fraile fue quien seguió aumentando la racha de victorias del equipo. Tras saborear su primera victoria como profesional en Italia, pocó tardó en volver a alzar los brazos. Lo hizo en Francia, en la cuarta etapa de los Cuatro días de Dunkerque, donde el equipo navarro prosigió llenando el zurrón de trinfos, el quinto en menos de un mes. El trabajo del equipo estaba teniendo premio y la rcha era ya espectacular. 

Calos Barbero se estrena de verde

Es una de las grandes esperanzas de futuro del ciclismo español, sobre todo en lo que a las llegadas masivas respecta. Formado bajo el amparo de la Fundación Ciclista Euskadi, el burgalés ha dado esta temporada su salto a la categoría Continental-profesional de la mano del equipo navarro avalado por su victoria en Getxo el año pasado y por la medalla de bronce en los nacionales de Ponferrada.

Explosivo y rápido, Carlos Barbero se ha estrenado de verde en la segunda etapa de la Vuelta a Madrid donde se ha impuesto en una ajustada llegada masiva a Enrirque Sanz y Adrián González. Además, Eduard Pradés se hacía con el maillot de la montaña. Con este triunfo los de Eugenio Goikoetxea están a uno solo de marcar su mejor registro en una temporada, faltando todavía más de cinco meses de competición.

Barbero y Prades detallan que el equipo ha sabido cambiar las cosas tras un inicio malo Los corredores son conscientes del buen momento por el que pasa el equipo. Así lo ha manifestado el corredor burgalés al término de la segunda etapa de la Vuelta a Madrid donde ha admitido que tuvieron un inicio de temporada “muy malo, marcado por las lesiones”, pero que siempre han confiado en su trabajo para “hacer que la dinámica cambie”. En el mismo sentido se ha manifestado Eduard Prádes, que al igual que Barbero estuvo lesionado al principio de temporada. Según ha declarado el ganador de la montaña de la Vuelta a Madrid al principio "no salía nada", pero sin embargo en poco más de un mes "todo ha cambiado de golpe". 

Lo que está claro es que el equipo navarro además de celebrar con champagne las clasificaciones secundarias, en el mes de abril y principio de mayo ha brindado una actuación espectacular con seis victorias de etapa que darán mucha moral de cara a afrontar lo que resta de temporada.