Arnaud Démare está de dulce. Tras una pésimo inicio de campaña, con cinco meses sin lograr levantar los brazos, el francés ha logrado su segundo victoria consecutiva en esta Vuelta a Bélgica. Parece que le van este tipo de carreras, alocadas y con dureza en forma de pavé y cotas. Más que las llegadas masivas. Y es que la llegada de hoy tenía su miga, como la de ayer, pero Démare ha demostrado que no se equivocaron en FDJ al apostar por él en lugar de Bouhanni. El francés está de dulce y quiere prolongar su racha hasta el Tour de Francia.

La cuarta etapa de la Vuelta a Bélgica se disputaba en bucle con salida y meta en Lacs de l'Eau d'Heure de 158 kilómetros. En la parte final se darían cuatro vueltas a un circuito en Lacs de l'Eau d'Heure con cuatro pasos por el Petit Poggio. Uno de ellos, definitivo, a cinco kilómetros de meta.

Guión previsto

La carrera comenzó con lucha por meterse en la escapada. Enseguida, pasados cinco kilómetros, Anton Vorobyev (Katusha), Roy Jans (Wanty), Alfonso Vermote (Vastgoedservice), David van der Poel (BKCP), Connor McConvey (3M), Thomas Ongena (Cibel), Olivier Chevalier (Valonia) y Kai Reus (Verandas Willems) se destacaron en cabeza. Un corte aceptado por los mandamases del pelotón, el equipo del líder, IAM Cycling. Los suizos se limitaron a controlar la renta y a dejar hacer a los equipos de los velocistas en la parte final.

Y la cosa les está saliendo bien aunque Démare, con dos victorias y correspondientes bonificaciones, se acerca peligrosamente al liderato de Brandle. A falta de 45 kilómetros para la meta, con la entrada en el circuito final, Astana aumentó el ritmo y redujo la renta por debajo de los dos minutos. Pasados 25 kilómetros más, con dos vueltas por recorrer, solo Vorobyev, McConvey y Chevalier permanecían en cabeza con Astana, Joker-Soudal y Etixx llevando el peso de la persecución.

Imagen de los escapados | Fuente: Dieter Vanderlinden - Vuelta a Bélgica.

El Petit Poggio, hogar de demarrajes

En el penúltimo paso por el Petit Poggio, lo probó Van Avermaet. Justo antes de la ascensión había una meta volante que aportaba bonificaciones. El belga saltó del grupo buscando esos segundos extras, aunque solo recogió tres más que Brandle, que saltó tras él en un demarraje defensivo. Fue entonces cuando, esos movimientos, permitieron la formación de un grupo de nivel en cabeza, poniendo en jaque a Etixx y FDJ. Van Avermaet Rohan Dennis, Jempy Drucker (BMC Racing Team), Timo Roosen (LottoNL-Jumbo), Mathieu van der Poel (BKCP), Wout van Aert (Vastgoedservice), Viacheslav Kuznetsov (Katusha), Kai Reus (Verandas Willems), Steve Chainel (Cofidis) Thomas Sprengers (Roompot), Frederik Backaert (Wanty) y Tiesj Benoot (Lotto Soudal) formaron el grupo delantero una vez la fuga había sido echada abajo.

Etixx trabaja, FDJ remata

La persecución, la encabezaron Etixx, con Vandenbergh, y FDJ. Boonen y Démare querían repetir triunfo y no tenían pensado permitir que un corte de ese nivel se les adelantase. Neutralizaron a los de delante a falta de 8,5 kilómetros pero la punta del pelotón estaba loca. Muchos ataques y demarrajes sin demasiado éxito. Antes y durante el Poggio, hombres como Marc de Maar (Roompot), Tiejs Benoot (Joker-Soudal) o Kuznetsov (Katusha Team) lo probaron. RUso y neerlandés llegaron a tener varios segundos de margen pero nada, Etixx estaba muy fuerte. FDJ delegó en los belgas para cazar y la jugada les salió a las mil maravillas.

Buena lucha de velocidad entre Boonen y Démare | Fuente: Dieter Vanderlinden - Vuelta a Bélgica.

Yves Lampaert (Etixx-Quick Step) se encargó de anular cualquier hueco mientras que Niki Terpstra (Etixx-Quick Step) lanzó la llegada en los últimos kilómetros. El belga lanzó a Boonen a la perfección en una llegada con un repecho bastante duro, aunque la parte final llaneaba. El belga salió bien colocado pero Démare, lanzado de gran forma por Mickael Delage, fue más fuerte y supo rematar mejor en la llegada al sprint.

La general, más abierta que nunca

Así pues, doblete pare Arnaud Démare que se pone a un segundo del líder, Matthias Brandle, gracias a las bonificaciones. Solo queda una etapa, dura y decisiva, en la que Brandle, Démare, Van Avermaet y Boonen, salvo sorpresa, se jugarán la general. La quinta etapa entre Sankt Vith y Sankt Vith, de 199 kilómetros, y con numerosas cotas. En la parte final, Stockeu y Bergstraasse serán decisivas.

Clasificaciones tras la cuarta etapa

El vídeo de la victoria de Démare