Al fin consiguió Sean De Bie su ansiada victoria. A sus 23 años ha eclosionado con Lotto-Soudal que se fijó en él cuando militaba en el filial de Leopard y logró el campeonato europeo en 2013. 2014 fue año de aprendizaje participando en muchas clásicas belgas y destacando en alguna vuetla por etapas como el Tour de Dinamarca. Y 2015, la eclosión. Luego de ser protagonista en los Tres Días de la Panne (acabó quinto final), consiguió en Luxemburgo su primera victoria como profesional. Este clasicómano, con buenas dotes contra el crono, tiene el futuro por delante.
Por su parte, la cuarta etapa de la carrera luxemburguesa supuso el triunfo de Linus Gerdemann en la general final. A sus 32 años, repite el guion de 2011 cuando se impuso en esta misma carerra con un triunfo de etapa. Esa había sido su última victoria en una ronda por etapas. Sus últimos años habían sido discretos, sin triunfos de nivel, luego de llevarse etapas, a mediados de los 2000, en Tour de Francia, Vuelta a Suiza o Tirreno-Adriático, y vencer en carreras como Vuelta a Baviera o Tour de l’Ain. Ciclista completo, ahora lidera una formación batalladora como el Cult Energy Pro Team, que está aportando muchas cosas a las carreras menores.
Cotas y Pabeierberg
La última etapa del Tour de Luxemburgo presentaba un perfil propicio para la ofensiva. Cotas y subidas que no cesaban desde la salida eran el terreno perfecto para que una fuga triunfará en el circuito final de Luxemburgo, con el Pabeierberg como juez definitivo con cuatro ascensiones previas y la meta en la cima.
Roompot deja hacer a la escapada
Con la general en juego entre Linus Gerdemann (Cult Energy Pro Team) y Marc de Maar (Team Roompot), con solo ocho segundos de diferencia, parece que el Cult Energy quiso controlar la carrera dejando a ir a una fuga de nivel pero sin peligro en la general. Enseguida se formó un corte que, si bien no contó con el beneplácito de todos los equipos, pues muchos querían tener representación en la última jornada, supo trabajar contra el ritmo del pelotón.
En los primeros kilómetros se juntó un corte de nivel con hombres veteranos como Jimmy Engoulvent (Team Europcar), Leonardo Duque (Colombia) o Bjorn Leukemans (Wanty-Groupe Gobert) además de otros más jóvenes como Sean De Bie (Lotto-Soudal), Kenneth Vanbilsen (Cofidis), Jaco Venter (MTN-Qhubeka) y Antoine Demoitie (Wallonie-Bruxelles), además de ciclistas más desconocidos como Frederik Brun (Bretagne Seche Environnement), Simone Antoni (Wanty-Groupe Gobert), Olivier Chevalier (Wallonie-Bruxelles) y Kristian Haugaard (Leopard Development Team).
Trabajo duro y buen entendimiento
Este corte, formado por once ciclistas tuvo qu trabajar al inicio pues el pelotón no daba tregua y se mantuvieron por debajo del minuto durante muchos kilómetros. Al final, la escapada se impuso y alcanzó los seis minutos de renta bajo el ritmo de control del Cult Energy. Se fueron sucediendo los kilómetros y los altos, con Leukemans y Duque como principales dominadores en las cimas. El uno buscaba protagonismo; el otro, proteger el liderato de Duarte en la clasificación de la montaña.
Poco a poco la renta empezó a bajar. A falta de 45 kilómetros, la diferencia era de 3:50 mietnras que tras el primer paso por el Pabeierberg, entrando en el circuito final, se quedó en 2:22. El ritmo de ciclistas como Leukemans, Duque, Venter, Vanbilsen o el propio De Bie era superior y los más débiles del corte empezaron a sufrir. Antonini, Brun y Chevalier fueron los primeros en quedarse, en esa primera ascensión al Pabeierberg mientras que, kilómetros más adelante, Haugaard, Engoulvent y Demoitie siguieron el mismo camino. Duque, Venter, De Bie, Vanbilsen y Leukemans se la jugarían en los kilómetros finales.
Selección ganador y coronación de De Bie
El ritmo por delante era muy bueno y, aunque el pelotón llevaba una marcheta incómoda para velocistas como Petit o Greipel, que se descolgaron del grupo principal, no pudieron con los fugados. Incluso a falta de dos vueltas, unos 15 kilómetros, la escapada pudo ampliar su renta en medio minuto. Parecía claro que se la iban a jugar entre ellos.
Entraban en la última vuelta con un Leukemans que se veía favorito. Su ritmo había sido mejor, tiene experiencia y velocidad punta, pero no contaba con un joven tan prometedor como De Bie. La subida final al Pabeierberg, que daba acceso a la meta en una llegada muy explosiva, resulto emocionante. Duque se colocó en cabeza del sprint defintivio pero De Bie le pasó como una bala por la izquierda para superarle en meta. Leukemans solo pudo ser tercero acusando el cansancio en los altos mientras que el ganador, el joven belga de Lotto-Soudal, cerraba una carrera idílica para su equipo, que sumó tres triunfos parciales, luego de saber ahorrar fuerzas y mantenerse fuera del protagonismo durante el grueso de la etapa.
Gerdemann repite en Luxemburgo
En la general no hubo diferencias. El grupo entró a 43 segundos encabezado por Florian Vachon (Bretagne Seche Environnement) y tanto Gerdemann como De Maar entraron en el mismo tiempo. Así pues, triunfo para el veterano ciclista alemán, escoltado por dos neerlandeses del Roompot como De Maar y Duyns.