Un vueltómano de siete días (aunque en este caso han sido nueve), un especialista en carreras de una semana con equilibrio entre montaña y crono. La balanza en perfecto estado, con la alta montaña, la media montaña y la crono medida en partes iguales. Su nivel en carreras como el Tour de Romandía históricamente, se ha refrendado este año con buenas actuaciones en País Vasco, París-Niza o la propia Romandia. Suiza tiene un imán para Spilak que refuerza su idilio con el país helvético venciendo en su triunfo más importante tras la conseguida en la otra carrera del país en el World Tour, allá por 2010.

Por su parte, la victoria de Tom Dumoulin no hace sino refrendar el relevo generacional que deja a Cancellara cuesta abajo. No solo por Tony Martin, presente de las cronos, sino por la aparición de talentos que poco a poco van consolidándose como el propio Dumoulin, Adriano Malori o Bob Jungels. Esos tienen la llave del presente y el futuro. El relevo ha quedado patente en una crono larga, sin especulaciones como ocurría en los poco más de cinco kilómetros del prólogo. Hoy, victoria de convicción en la crono.

Crono final

La jornada final de la Vuelta a Suiza consistía en una crono individual, más o menos larga, dura y técnica. Kilómetros iniciales de bajada llevaban a una parte de falso llano hacia una zona de varias subidas. Tras ello, descenso y zona de sube y baja hasta el llano final con llegada en Berna tras 38,4 kilómetros d erecorrido.

Las ganas de Cancellara

Salía Fabian Cancellara (Trek Factory Racing) con ganas de redimirse de su fracaso en la crono inicial, donde fue superado por Tom Dumoulin. En casa, ante su gente, y en una crono larga tenía buenas oportunidades de éxito y no perdió el tiempo. Marcó el mejor crono y mantuvo el liderazgo provisional durante gran parte de la etapa. Tras la salida de 'Espartaco', quien paró el reloj en 48:55, ya se podría preveer que las mejores marcas bajarían de los 49 minutos.

Tras Cancellara, especialistas como Matthias Brandle (IAM Cycling) o Svein Tuft (Orica GreenEdge) fracasaron en su intento por destacar, mientras que otros como Adriano Malori (Movistar Team), Cameron Meyer (Orica GreenEdge), Jerome Coppel (IAM Cycling) o Bob Jungels (Trek Factory Racing) escoltaron al suizo entre las primeras plazas.

Dumoulin da el relevo

Iban pasando los ciclistas hasta llegar a los últimos diez. El cotarro se iba a jugar entre los buenos contrarrelojstas como Dumoulin, Spilak y Thomas y entre los escaladores puros como Pinot o Pozzovivo, con escasas opciones de éxito. Tom Dumoulin (Giant-Alpecin) fue el primero de los candidatos en salir a la crono. Bien armado, completamente coordinado y en posición aerodinámica, el neerlandés marcaba 48:36, 19 segundos mejor que Fabian Cancellara. El relevo generacional en las contrarreloj llegaba en la figura de Dumoulin, bronce en los pasados campeonatos del mundo de Ponferrada.

Domenico Pozzovivo (Ag2R La Mondiale) fracasó, de forma lógica, en su intento. El italiano apenas tenía opciones y solo un milagro le permitiría acabar en el podio. Entró a más de dos minutos y medio de Dumoulin, un tiempo lógico para un escalador puro. La batalla se fraguaría entre los potentes. Simon Spilak (Katusha Team) tenía la misión de ser 48 segundos más rápido que Pinot y que Thomas fuera 14 segundos más lento que él. El esloveno lo tenía claro y fue a piñón fijo. En tiempos de ganar la etapa, saboreó el triunfo con suspense, pues los parciales fueron muy igualados tras la salida de Geraint Thomas (Team Sky).

Final de infarto

En el kilómetro 15, Spilak, Thomas y Dumoulin llevaban el mismo crono, superando los tres al líder, Thibaut Pinot (FDJ), sin opciones de éxito viendo los galgos que le rodeaban. Poco a poco, los parciales fueron favoreciendo, segundo a segundo, al esloveno, con Thomas perdiendo tiempo. Aunque no pudo superar a Dumoulin, que se llevó la etapa, Spilak acabó 18 segundos mejor que su rival por la general, Thomas. Así pues, triunfo de Dumoulin en la etapa y general para Simon Spilak.

Clasificaciones finales

El vídeo de la victoria de Tom Dumoulin