La historia del Tour de Francia está íntimamente relacionada con este coloso alplino. En sus rampas se escribieron con letras doradas gestas ciclistas de gran calado para el aficionado. Hasta tal punto es su unión que nombrar Alpe d'Huez se le asocia inmediatamente con el Tour de Francia y viceversa.

A pesar de que en 1952 fue la primera vez en ascenderse con el gran Fausto Coppi como triunfador no fue a partir de finales de la década de los 70 cuando se convirtió en final de etapa asiduo para el Tour de Francia. A partir de este momento, Alpe d''Huez se convirtió en la gran cima de los Alpes visitándola con la de hoy en 30 las ocasiones en que el Tour pasó por su cima.

El misticismo de esta ascensión es máximo. Cada una de sus 21 curvas lleva asociado el nombre de un ganador en su cima pasando así a la historia ciclista. Es llamada la 'montaña de los holandeses' por ser el país con más victorias, ocho en total, aunque los italianos están al acecho con siete victorias y pretenden cambiarle el nombre. En el caso de España solo fue conquistada en tres ocasiones (1987, 2003 y 2008). La fuerza de esta cumbre hace que quien pretenda ganar un Tour de Francia debe aprobar el examen de Alpe d'Huez con buena nota.

La famosa regla de oro

'Quien sale de amarillo de Alpe d'Huez, se corona en París' es la regla de oro de Alpe d'Huez. Dicha regla se cumplió en 21 de 27 ocasiones en que el Tour finalizó en la estación invernal alpina. Un porcentaje de acierto cercano al 78%, que este año aumentará dado que es la etapa previa a la etapa-homenaje en los Campos Elíseos, hace que sea casi un dogma en el ciclismo profesional.

Esta regla la aplicó Miguel Induráin a rajatabla, ya que en las cuatro ocasiones que salió de líder acabó adjudicándose la ronda gala. Bernard Hinault y Lance Armstrong solo la 'traicionaron' solo en una ocasión. En el caso del bretón fue en su primer Tour en 1978 y en el del americano ocurrió en su tercer entorchado en 2001, aunque luego fueron anulados todos sus títulos.

De las seis ocasiones en dos ocasiones no se cumplió debido a que líder tenía una gran ventaja importante con respecto al ganador final gracias a una fuga. Ocurrió con los franceses Ronan Pensec y François Simon como líderes en 1990 y 2001 respectivamente. En las otras cuatro ocasiones fue debido a la lucha cerrada entre los aspirantes al título.

En 1978, Joop Zoetemelk salió victorioso pero tenía a Bernard Hinault a tan solo catorce segundos en la general. El siguiente fue Pedro Delgado quien no cumplió con la regla al salir líder con 26 segundos con respecto a Stephen Roche, a la postre vencedor final en 1987. En el magnífico Tour de 1989, Laurent Fignon era líder pero con solo 26 segundos sobre el americano Greg Lemond. La última ocasión fue en 2011 cuando Cadel Evans se adjudico el Tour pero fue Andy Schleck el que salió de líder de la cima alpina con 57 segundos de ventaja sobre el australiano.

El Tour de 1989 no se cumplió la regla de oro | Fotografía: le equipe.fr Caption

Para que esta regla tuviera más efecto, se modificó añadiendo quien quiera ganar el Tour debe salir vestido con el maillot jaune de Alpe d'Huez y además vencer en una contrarreloj.

Un puerto, el de Alpe d'Huez, que quedará vinculado de por vida a la historia del Tour de Francia como otros santuarios ciclistas tales como Tourmalet, Galibier o Mont Ventoux.