Golpe sobre la mesa de Caleb Ewan. El velocista australiano ha conseguido su primera victoria en una gran vuelta y, por si fuera poco, ante dos corredores de la talla de John Degenkolb (Giant-Alpecin) y Peter Sagan (Tinkoff-Saxo), en una llegada donde, a pesar de ser un sprint, los últimos 600 metros picaban hacia arriba con una pendiente del 6 %. Es la segunda victoria del equipo 'aussie' tras la obtenida por Esteban Chaves en Caminito del Rey. Pero no todo iba a ser de oro para los de Neil Stephens, pues el colombiano ha perdido por 1'' el liderato de la carrera en detrimento del neerlandés Tom Dumoulin (Giant-Alpecin).
Jornada tranquila en el pelotón
La quinta etapa de esta Vuelta a España contaba con 167 kilómetros de recorrido. Un poco más tarde de las 13:30 horas, y tras 17 kilómetros neutralizados, daba comienzo esta etapa. Los ciclistas salían del sur de la provincia gaditana, concretamente desde Rota, para adentrarse al centro de Andalucía y llegar a Alcala de Guadaíra. Antes de la llegada a esta localidad sevillana rodaron por Trebujena, localidad del velocista de Movistar Juanjo Lobato, Sevilla o Dos Hermanas. El recorrido apenas tenía dificultad, pues no había ningún puerto puntuable, solo una meta volante a menos de 20 kilómetros de meta. El sprint estaba casi asegurado, aunque los últimos mil metros, con varias curvas cerradas y una pequeña subida, iba a eliminar a muchos velocistas puros.
Los 191 corredores que terminaron la etapa de Vejer de la Frontera tomaban la salida en Rota. Nada más darse el banderazo de salida, Tsgabu Grmay (Lampre-Merida) atacó para marcharse por delante y lo consiguió a la primera. El pelotón vio que el etiope no tenía peligro para la clasificación general, además de saber que un solo corredor en una etapa así no tendría mucho éxito, y le dejó marchar. Esto también lo sabía el de Lampre, que esperó a que atacara alguien desde el pelotón para buscar compañía. Antoine Duchesne (Europcar) y Iljo Keisse (Etixx-Quick Step) fueron los que lo probaron desde el pelótón y se unieron al etiope, quedando conformada la escapada del día. El mejor colocado en la clasificación general era Iljo Keisse a poco más de 20'.
La escapada y el pelotón rodaban tranquilamente camino de la provincia de Sevilla, pues no había ni siquiera una cota no puntuable que pudiera hacer sufrir a los más débiles salvo los últimos metros de la llegada a meta. Tras los primeros 30 kilómetros, los tres de cabeza tenían 4'17'' con el gran grupo, pues estos lo tenían todo muy controlado. Pero cuando llegaron a los 7', Giant-Alpecin, pensando en las opciones de John Degenkolb, se puso el mono de trabajo y tomó la delantera del pelotón para reducir la diferencia a pesar de que aún faltaban más de 100 kilómetros. Esta fue la mayor diferencia que tuvo la fuga en la etapa.
Giant-Alpecin reducía la diferencia de la fuga
La media de velocidad de la segunda hora de carrera aumentó hasta los 39 km/h por los 37 de la primera, lo que demostraba el ritmo que estaba imponiendo el equipo alemán. El avituallamiento próximo a Las Cabezas de San Juan marcaba que la renta seguía bajando aunque muy lentamente. La tranquilidad reinaba en los ciclistas a la espera de la primera y única rampa importante en los últimos 800 metros de la etapa. A falta de 75 kilómetros, Grmay, Keisse y Duchesne se coordinaban en los relevos y tenían la diferencia en torno a los 5'. A esta hora los 34ºC ya pegaban en la espalda de los ciclistas, aunque tuvieron suerte al no sufrir el habitual calor que hace en Andalucía por estas fechas.
Grmay, Keisse y Duchesne eran los tres escapados de esta quinta etapa
Poco a poco se iba reduciendo la diferencia entre los dos grupos y, con ello, la ilusión de estos tres escapados de llegar en solitario a meta. La carrera rodaba por carreteras nacionales muy estrechas pero que no eran peligrosas para el gran grupo. Hasta el momento eran los Giant-Alpecin los que mandaban a la espera de que otros equipos como Tinkoff-Saxo o Cofidis entraran a la ayuda. La velocidad media aumentó cuando el equipo francés comenzó a colaborar en el pelotón. La diferencia ya era de 3'15'' a falta de 43 kilómetros e iba descendiendo lo suficiente como para que el nerviosismo no hiciera acto de presencia, pues al pelotón tampoco le interesaba cazar ya para evitar que 'saltaran' otros corredores más fuertes.
Orica GreenEdge marcó su ritmo en la llegada a Alcalá
El pelotón, a su paso por Dos Hermanas, ya iba aumentando el ritmo y la diferencia bajaba a más velocidad. Además, Caja Rural se unía a los equipos de cabeza para dejar claro que Carlos Barbero quería estar en la pelea. Al estar ya rondando los 2' de diferencia, los escapados comenzaban a buscar su ritmo y a dejar de colaborar en grupo. Corredores como Andrew Talansky (Cannondale-Garmin) o Mikel Nieve (Team Sky) sufrían pinchazos que le iban a obligar a hacer un esfuerzo para reincorporarse al grupo, pero esta etapa no era peligrosa. El pelotón mantenía la diferencia en torno a los dos minutos para, al pasar la meta volante de Sevilla, dar el último arreón y cazar al trío de cabeza.
Tom Dumoulin es nuevo líder de la carrera en detrimento de Esteban Chaves
Antoine Duchesne (Team Europcar), al paso por la Avenida de la Palmera en Sevilla, era el primero en soltar a sus dos compañeros. Esto provocó que Keisse también intentara dejar atrás a Grmay, quien no soltaba su rueda. Tras varios intentos marrados por el trío, era el de Etixx-Quick Step quien conseguía marcharse y pasar primero por el sprint intermedio, aunque la diferencia ya era de 1'33''. A falta de 9 kilómetros acabaría la aventura de estos escapados, pues primero serían cazados por el pelotón Grmay y Duchesne para más tarde hacer lo propio con Keisse, el último superviviente y corredor más combativo de la etapa.
El último kilómetro, ya dentro de Alcalá de Guadaíra, tenía su trampa. A una pequeña subida le seguía un llano, una curva a izquierdas y la recta final en los últimos 600 metros, donde siempre se iba subiendo y, además, con una pendiente del 6 %. Caleb Ewan consiguió la victoria en la meta de Alcalá de Guadaíra tras un gran trabajo de su equipo en la parte final de la llegada. El australiano se impuso a los dos grandes favoritos para este final: John Degenkolb (Giant-Alpecin), segundo, y Peter Sagan (Tinkoff-Saxo), tercero.
Chris Froome, Tom Dumoulin o Rafal Majka consiguieron 6'' de diferencia sobre el resto de corredores importantes en esta llegada, lo que hace que el holandés de Giant-Alpecin supere en la clasificación general al colombiano Esteban Chaves y se coloque el maillot rojo de líder de la Vuelta a España con 1'' de diferencia.
La próxima etapa
La sexta etapa de esta Vuelta a España será la segunda con final en alto tras Caminito del Rey. Serán 200 kilómetros de recorrido con salida en Córdoba y llegada a la Sierra de Cazorla, en Jaen. Jornada tranquila en sus dos primeros tercios hasta que, en el kilómetro 132, comenzara el Alto de Baeza, una cota de 3ª categoría. Tras el paso por Úbeda, los ciclistas descendían para comenzar una nueva subida, donde estaba situada la única meta volante (km. 185). Un falso llano les llevaría hasta los últimos tres kilómetros de la etapa, donde ya comenzará el Alto de Cazorla, de 3ª categoría, que será el lugar donde finalice la jornada.