Nada más acabar el Tour de Francia esta temporada, Alberto Contador ya se fijaba el objetivo número uno para la temporada venidera: volver a conquistar la carrera francesa y conseguir el trío de triunfos en la vuelta por etapas más importante del mundo ciclista. Había terminado en quinto lugar, pero en absoluto estaba satisfecho y ya pensaba en la preparación de la siguiente temporada.

Sus palabras dejaban ver cierta insatisfacción por no haber podido conseguir el doblete Giro-Tour que se había impuesto como reto, pero nada de arrepentimiento, porque un campeón como Contador se habría arrepentido más de no haberlo probado, de haberse quedado con la duda sobre si habría sido capaz de conquistar Italia y Francia en un doblete que habría sido histórico o de haberse guardado las fuerzas para luchar únicamente por el Tour.

Puede volver si abandona o con un proyecto personal

Alberto Contador, campeón del Giro de Italia de esta temporada que ya termina, echó en falta en el Tour unas fuerzas que tardaron en recuperarse del esfuerzo en tierras italianas. Y por eso mismo, porque de los errores se aprende, Contador fijó el Tour de 2016 como el objetivo y anunció un cambio en la preparación respecto a la que había realizado en 2015.

Así, en una entrevista concedida al diario El País y realizada por Carlos Arribas, el corredor de Pinto afincado en Lugano, confirma que todo su calendario estará enfocado al Tour, su máxima prioridad.

Por un viaje programado con anterioridad no pudo acudir a la presentación del recorrido de la ronda gala que tuvo lugar hace un par de días en París, el que será su noveno Tour, pero sí puede hacer previsiones de lo que espera del recorrido y los rivales. Novena vez que participe y quién sabe si también la última. Preguntado por la posibilidad de que así sea, él no lo confirma, aunque sí lo piense: “Podría ser mi último Tour, en efecto, pero aún no es seguro al 100%”.

No obstante, no es capaz de asegurarlo por completo, pues sabe que si por cualquier circunstancia tuviera que abandonar Francia antes de llegar a los Campos Elíseos, su orgullo de campeón le haría volver otra vez en 2017.

Podría volver por ese motivo o por un segundo motivo, del que se viene rumoreando los últimos meses y que el propio ciclista español afirma: “Incluso volvería si logro poner en marcha un proyecto personal fuera del Tinkoff”. Lo que sí parece claro es que, tras terminar el contrato con el equipo ruso en 2016, no continuará con ellos.

Cabe recordar que el ganador español de la Triple Corona (Giro, Tour y Vuelta) ya tiene, a través de su Fundación, una escuela de ciclismo y dos equipos : uno en categoría Junior, el Flex Junior Team; y otro de categoría sub-23, llamado Specialized Sub23 Team.

Ahora, intentará sacar adelante un proyecto en profesional que gire en torno a su figura y que le permita estirar su carrera ciclista en un equipo hecho a su medida.

Lo que deja claro es que es él quien decide su carrera, no las circunstancias, y que la decisión sobre si se tratará de su último Tour o no dependerá plenamente de él. Por eso descarta que vaya a sufrir melancolía o pena pensando en si son sus últimas pedaladas en Francia. “La libertad de ser yo quien decida si sigo o no, no deja lugar a la pena. Sí me gustaría que el Tour se diera bien para poner un buen punto final”, declara finalmente el ciclista. Un buen punto final que redondee su excelso palmarés, con siete grandes vueltas ganadas.

En cuanto al recorrido, antes de conocerlo oficialmente, reconocía que la contrarreloj le vendría bien si no exige mucha velocidad media, pues para alguien de pocos kilos como es él, una contrarreloj a gran velocidad no le permite alcanzar la potencia absoluta necesaria. Una vez confirmado, puede estar satisfecho viendo los kilómetros contrarreloj que habrá, duros, de continuas subidas y bajadas y que se disputará tras haber pasado los Pirineos y de camino a los Alpes.

“Sí que es un poco extraño, pero es complicado valorar si es bueno o malo. En todos los Tour se trata de adaptarse al recorrido, de no tener días malos y de entender a los rivales”.

Dos rivales: Nairo Quintana y Chris Froome

A la hora de hablar de ellos, no duda en que el británico y ganador en 2015, Chris Froome y el colombiano de Movistar, Nairo Quintana, serán, a priori, sus grandes adversarios. Y los tiene bien estudiados, viendo como habla de ellos: “Froome siempre empieza muy fuerte, muy alegre, pero va a menos en la última semana”. Mientras que de Nairo opina lo contrario, que “le cuesta arrancar”, pero que en la tercera semana es muy superior, como demostró en este último Tour. “Buscaré adaptarme y aprovechar cada oportunidad”, termina diciendo Alberto, dejando claro que aunque tiene en cuenta a sus contrincantes, corre según sus fuerzas y sus opciones.

Da más opciones a Fabio Aru que a Tom Dumoulin

También cuenta con Fabio Aru y con una de las sensaciones de este año, Tom Dumoulin, pero cree que habría que contar “con Aru más que con Dumoulin, pues ha terminado entre los cinco primeros puestos las grandes vueltas que ha corrido, viene de ganar la Vuelta y tiene dos podios en el Giro. Pero a ver cómo se adapta al Tour en su debut”.

Para terminar la entrevista, interrogado sobre su preparación, Contador reconoce que 2015 ha sido un año muy duro, tanto física como psicológicamente. “Fueron  10 meses en los que me centré solo en la bicicleta, con todo medido al milímetro”.

De cara a 2016, confirma lo siguiente: “Disputaré para ganar las carreras de principio de temporada y luego descansaré pensando en el Tour”. No se olvida de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, los cuales le gustaría disputar en ambas pruebas, ruta y contrarreloj.

Durante la entrevista, haciendo un repaso por los Tour que ha disputado, asegura que el de 2009 es el mejor para él, pero que el ciclismo de hoy ha subido de nivel respecto a esos años: “Aquel fue el mejor en cuanto a rendimiento, pero desde entonces he mejorado aún mi nivel. El nivel del ciclismo, en general, es muy superior, más profesionalizado y optimizado todo”.

De lo que no cabe duda es que llegará al Tour en plena forma y que pondrá todo de su parte para subir el primer escalón del podio en París y tener una foto más con el Arco del Triunfo a sus espaldas.