Quedan aún tres citas para la clausura de uno de los Bpost Bank Trofee más cerrados de su historia, pero lo único ya claro es que Wout van Aert será el ganador de su general. La consecución de cuatro -y con este cinco- triunfos consecutivos avalan al joven belga, el mejor del año y, con diferencia, al que más veces se le ha visto ganar desde el mes de septiembre. Hoy, aprovechando la limpieza de Van der Poel, su gran rival, a mitad de carrera, ha conseguido la quinta en cinco pruebas, desestimando un posible duelo entre ambos, como el del Flandriencross de Hamme en 2014 o el del pasado Azencross de Loenhout, de cara a un emocionante final.

Van Aert no quiso un duelo con Van der Poel y encontró la victoria en solitarioEl campeón del mundo siempre ha tenido predilección por el circuito holandés. A los 18 años, aún como júnior, se atrevió a disputar la prueba élite, en la que solo le ganó Niels Albert; a los 19 años, y coincidiento con la temporada pasada, se quitó la espina de 2013 y ganó ante su público. En otro de sus fieron ataques, que le sirven para soltar lastre, solo la atenta presencia de Wout van Aert frenó sus esperanzas de su segunda victoria en tres participaciones en la categoría élite, tras rematarle al final y dejarle, otra vez, con el amargo sabor del segundo puesto, como le dejó, en 2013, el director del equipo de su rival, el retirado Albert.

Los copiosas zonas de arena, sencillas para pasarlas con rapidez y habilidad a partes iguales, fueron una zona testimonial más que decisiva, al menos en los primeros giros. Las grandes rectas y las rápidas vueltas -cada una de cinco minutos- impidieron una mayor selección de nombres, que siempre rondó los quince hombres. Con Namur en mente, la tranquilidad reinó entre los integrantes de la cabeza de carrera y los movimientos brillaron por su ausencia. Una caída de Lars van der Haar, cuyo hombro derecho se vio afectado, aunque luego siguió como si nada, fue la chispa que encendió a Van der Poel.

El pódium de la prueba holandesa. (Foto: Belga)

Restaban 25 minutos de carrera, cinco vueltas en total, y Van Aert, una vez cogida la medida a su rival y nunca nervioso, se dedicó a madurarle y dejarse el peso de un dúo al que nunca tuvieron opciones de llegar Van der Haar, Nys y Pauwels, erigidos como terceto perseguidor, una vez rota la carrera. Abusivo e insaciable, la decimocuarta victoria del año del chico de Herentals era ya irremediable, al igual que su victoria general en la clasificación del Bpost Bank Trofee. Van der Haar, por su parte, se quedó con el tercer lugar, ganándole el duelo a Kevin Pauwels en los últimos instantes de la última vuelta.

Vídeo de la prueba