Hacía tiempo que Simon Gerrans no sonreía, ya lo decíamos ayer, pero que lo haga dos veces consecutivas es algo que no se veía desde hace muchos y muchos meses. Tras un 2015 maldito, dramático, con muchas caídas, lesiones y episodios de mala suerte, el australiano parece haber dejado atrás la mala racha. Está centrado en lo que mejor sabe hacer: ganar.

Hoy volvió a decidir con la llegada de un grupo reducido, aunque no tanto como ayer. Sky tomó la responsabilidad en el final pero Ben Swift solo pudo escoltar a Gerrans. No había peligro para él pues el velocista de moda, Caleb Ewan, había desaparecido tras la única subida reseñable del día, a veinte kilómetros de meta. Veloz, rematador, ganador, triunfador... Gerrans volvió a sonreír, esta vez en Victor Harbor.

Engañoso final

La cuarta etapa del Tour Down Under 2016, antesala de la jornada reina de la carrera, se trataba de una etapa propicia para hombres rápidos. Primera parte de la etapa con el paso por la sierra, desde Norwood pasando por Stirling, Echunga o Meadows, para llegar al otro extremo de la península, hasta la ciudad costera de Victor Harbor. Pero ojo, el alto de Port Elliot, a unos veinte kilómetros de la meta iba a complicar las cosas a los velocistas puros. Una vez superado, terreno engañoso con mucho falso llano y repecho. Ojo también con el viento.

Gerrans vuelve a capturar bonificación

Muchos ataques iniciales por coger la fuga, como es habitual, estamos en el arranque de temporada y los corredores están frescos y con ganas. Pero uno fue especial. Se trataba de Simon Gerrans (Orica GreenEdge). Ganador ayer, el australiano saltaba del pelotón para capturar segundos de bonificación en el primer sprint intermedio, en Mylor. 

Tras ello, el ritmo se tranquilizó y se formó la escapada protagonista de la etapa. Alexis Gougeard (AG2R-La Mondiale), David Tanner (IAM CYcling) y Patrick Shaw (Unisa Australia) se iban a erigir protagonistas. Su distancia, en terreno favorable para estos tres rodadores, subió hasta los 5:45 a falta de 95 kilómetros. Desde ahí, en decadencia.

Subida infernal para Caleb Ewan

Llegaba la parte clave. Al ritmo de control de Orica GreenEdge se unían más conjuntos al acercarse a la única ascensión del día. BMC, Lotto Soudal y Tinkoff, entre otros, tiraron del pelotón para endurecer la carrera en la subida. Intentaron dejar atrás a los velocistas puros como Ewan y lo consiguieron. Por cierto, la fuga ya había sido neutralizada antes de la subida merced al fuerte ritmo que imponían varios equipos.

Orica llevó el peso de la carrera en el grueso de la etapa | Fuente: Prensa Orica GreenEdge.

Hubo movimientos en la cima del alto, pero nada más allá de buscar los puntos de la montaña. Richie Porte (BMC Racing Team) probó a Sergio Henao (Team Sky) pero el colombiano respondió de maravilla. Le ganó el duelo y sigue portando el jersey de lunares.

Sky, valientes y muchos repechos

Quedaba poco más de una treintena de ciclistas en el grupo delantero. La ascensión había hecho daño. Sky tiraba con Ian Stannard, Peter Kennaugh, Geraint Thomas, Sergio Henao, ... llevaba el ritmo en esa zona que castigaba las piernas, con mucho repecho. Un terreno ideal para Jesús Herrada (Movistar Team) que lo probó en uno de ellos, a 16 kilómetros de meta, y se marchó.

A doce de meta, Herrada acabaría siendo neutralizado por el ritmo de Stannard.  Miradas a diez kilómetros de meta, repecho para arriba, repecho para abajo, y otro valiente lo probaba. Un galgo como Lieuwe Westra (Astana Team) atacaba en un largo falso llano y conseguía sacar unos metros. Pero nada. Los cinco de Sky delante eran demasiado para un solo hombre.

Sky tiró en la parte final pero Swift solo pudo ser segundo | Fuente: Prensa Team Sky.
Sky tiró en la parte final pero Swift solo pudo ser segundo | Fuente: Prensa Team Sky.

Las diferentes escuadras se iban alineando, los trenos se iba formando en la retaguardia de Sky que seguía tirando. Cannondale aceleró, también Lotto... no querían dejar a Sky toda la delantera. Alberto Bettiol cogió la cabeza del grupo por parte de Cannondale. Apretó los dientes lo que pudo hasta que su trabajo concluyó a falta de 2,2 kilómetros. Volvía Kennaugh a tirar con acierto. Bandazos a un lado, de una cuneta a la otra, bandazos al otro. La resolución estaba cercana.

Dos exhalaciones de Orica

Katusha, con Machado y Lagutin, Orica, con IMpey, Sky, con Thomas... todos tiraban. A sus espaldas, los Gerrans, Swift, Battaglin, Lobato, Nizzolo... se frotaban las manos. No estaba por allí Caleb Ewan. Llegada lanzada. Lo hizo Lagutin y siguieron los Sky. Thomas llevó a Swift a su estela, con Jay McCarthy (Tinkoff-Saxo) muy atento.

Curva de derechas muy ligera y por ahí aparecían, dos balas de Orica. Por delante, Daryl Impey; a su rueda, Simon Gerrans. El sudafricano apretó lo justo, el australiano le sobrepasó por la derecha y en un intenso duelo de tú a tú con Ben Swift, Gerrans volvía a sonreír. A poco de remontar se quedó Giacomo Nizzolo (Trek-Segafredo, que partió muy atrás en la llegada lanzada. Cuarto fue un rapidísimo Jay McCarthy.

Gerrans levanta los brazos en lo que supone su segunda victoria en el TDU | Fuente: Prensa Orica GreenEdge.
Gerrans levanta los brazos en meta | Fuente: Prensa Orica GreenEdge.

En la general, Simon Gerrans refuerza su liderato. Deberá aguantar en la subida a Willunga si quiere volver a ganar en el Tour Down Under. Le saca 14 segundos a McCarthy pero, los verdaderos favoritos, pierden algo más. Rohan Dennis (BMC Racing Team) está a 26'', Henao y Rubén Fernández a 28'' y a más de medio minuto los Pozzovivo, Valls, Porte o Luis León Sánchez.

Y es que en la quinta etapa, a priori, se decidirá la general. 151 kilómetros llenos de repechos para acabar con un doble paso por Willunga Hill, juez de la carrera. El primero se inicia a unos treinta kilómetros de la meta y el segundo, en cuya cima está ubicada la llegada, a unos diez. Por tanto, una exigente ascensión de algo más de diez kilómetros para decidir el ganador de la edición 2016 del Tour Down Under.