Gran ejercicio de templanza el realizado por Juanjo Lobato en el Circuit de la Sarthe 2016. En la primera etapa el ciclista de Movistar vio como Marc Fournier llegaba en solitario a la línea de meta desbaratando el más que previsible sprint, no pudiendo pelear la llegada masiva de la segunda etapa al encontrarse cerrado en los últimos metros, por lo que la cuarta y última etapa se convertía en la última oportunidad para Lobato, quien demostró su clase sobre la bicicleta, llevando el triunfo a su casillero sin oposición de sus rivales, dejando atrás los problemas sufridos en su rodilla.

"Al tener seis corredores por equipo se hacía más difícil controlar en carrera y por eso se fueron las fugas el primer día y ayer en la etapa reina"

El equipo rindió a la perfección, Lobato no quería que una nueva escapada llegara a la línea de meta como en la primera y tercera etapa, por lo que a él solo le quedaba el trabajo más complicado, rematar en la línea de meta con un triunfo. "Poco a poco voy sintiéndome en mi sitio y esta victoria me ha servido para recuperar mucha ilusión y soltar mucha rabia. Al tener seis corredores por equipo se hacía más difícil controlar en carrera y por eso se fueron las fugas el primer día y ayer en la etapa reina, dos días en que lo hice bien, hoy hemos confiado y apostado desde el principio, poniendo ya a Dayer desde salida para tener la fuga bajo control y con el resto del equipo siempre apoyándome muy bien. He mantenido la calma en el sprint, no me he puesto nervioso: hasta que los Roompot no han empezado a progresar a falta de kilómetro y medio no he entrado en la pelea, en la curva a 600 metros de meta ya iba tercero y he podido medir bien la distancia y arrancar en cabeza, sin problemas", comentó ante los medios de comunicación.

Para terminar, Juanjo Lobato tiene totalmente olvidados los problemas de rodilla que le obligaron a abandonar la París-Niza y ahora enfoca su calendario en aprender en las clásicas de las Ardenas. "Esos problemas de rodilla de hace 2-3 semanas, cuando me tuve que bajar en París-Niza, me perjudicaron en mis objetivos, pero ya me siento mejor y listo para las próximas. Después de Roubaix tengo previsto, en principio, debutar en las Ardenas. Voy a estar en Amstel Gold Race y Flecha Valona, con la intención de conocerlas, sin marcarme ningún objetivo, y luego veremos si disputo Vuelta a Madrid o paro ya un poco para pensar en las carreras del verano", concluyó.