Primera gran cita de la temporada 2016. El Giro de Italia está a escasos días de comenzar y, con ello, la ronda italiana coronará al sucesor de Alberto Contador tras tres intensas semanas, en las que no habrá descanso, todos y cada uno de los días tendrán una intensidad máxima y, cada ciclista que quiera pelear por la clasificación general deberá estar atento en todo momento. Vincenzo Nibali, un año más, afronta con ganas e ilusión su carrera más importante del año, y es que estará delante de su público, el que tantas veces le ha llevado en volandas al triunfo.

Una temporada regular e ilusionante

Caía la nieve en Italia cuando Vincenzo Nibali anunció su calendario y, desveló su gran objetivo, el Giro de Italia. Habiendo conseguido ganar por primera vez el Tour de Francia, el italiano asume que su mejor nivel ha llegado en su tierra, por lo cual lo más sensato, viendo el plantel de favoritos que tendrá la ronda gala será apostar por vencer en el Giro. Su prueba fetén y, por ello, la que más preparación requiere al disputarse en el mes de mayo, temprana fecha que obliga a rendir bien desde las primeras carreras de la temporada.

Nibali decidió comenzar su campaña en Argentina, disputando el Tour de San Luis donde se conformó con la 14ª posición en la clasificación general, obteniendo buenas sensaciones antes de poner rumbo al Tour de Omán, donde ahí sí que apostaba por triunfar y lo conseguía. El jefe de filas de Astana terminaba segundo en la segunda etapa y, dos días después, se imponía en la cuarta etapa, para así terminar llegando a la última etapa con la victoria en la clasificación general bajo el brazo. Primera carrera conquistada y la maquinaría estaba engrasada. Concluyó el quince en la Strade Bianche y abandonó en el GP Industria & Artigianato, para seguir su campaña por suelo italiano, con la disputa de una carrera de nivel como la Tirreno-Adriatico, que ni mucho menos le salía como esperaba, teniendo que conformarse con la sexta posición final, perjudicado por la anulación de la etapa reina a causa de la nieve.

Poco a poco la temporaba iba tocando a su fin, y es que en el horizonte estaba el merecido descanso para cargar pilas de cara al Giro, pero antes Nibali compareció en la Milán - San Remo, donde no pudo pasar de la 33ª posición. Una 21ª posición en el Giro del Trentino fue su penúltima actuación hasta el momento, terminando sus compromisos el pasado 24 de Abril, con la disputa de la Lieja - Bastoña - Lieja, quedando clasificado en el puesto 51. Ni más ni menos que 4.188.25 kilómetros ha recorrido Vincenzo en los 27 días que ha tenido de competición el italiano en 2016. El motor está rodado, ahora solo queda llegar a la primera etapa sin percances previos, tales como pueden ser caídas entrenando o enfermedades varias.

El Giro, una carrera predilecta para Vincenzo Nibali a lo largo de toda su carrera ciclista

Tras once temporadas en el ciclismo profesional, comenzando su carrera en el Fassa Bortolo, pasado por Liquigas y terminado en Astana, Vincenzo Nibali se ha convertido en uno de los mejores corredores italianos de la historia. El palmarés de Vincenzo comenzó a gestarse en 2009, logrando ser sexto en la clasificación general del Tour de Francia, para tomarse la revancha en 2010, consiguiendo ser tercero en el Giro de Italia, para meses después imponerse en su primera gran Vuelta, la de España, quedando en primer lugar, sumando además ese año un triunfo de etapa en la ronda italiana.

Poco a poco iba mejorando en suelo italiano Nibali, que en 2011 tan solo se veía superado en el Giro de Italia por Alberto Contador, siendo él segundo. En 2012 apostó por el Tour de Francia en vez de la ronda italiana y, tan solo pudo ser tercero, lo cual le hizo centrarse de nuevo en el Giro en 2013, y después de muchos años quedando a un paso, lo consiguió, terminó haciéndose con la clasificación general en su segunda gran Vuelta, para en ese mismo año refrendar su buen momento de forma con un segundo puesto en la Vuelta a España. Tan solo le quedaba por ganar el Tour, apostó en 2014 y esta vez sí le salió bien, logrando triunfar en París por primera vez.

La pasada temporada tampoco decidió acudir al Giro de Italia, se aventuró a plantar cara a los mejores ciclistas del mundo en el Tour de Francia y no consiguió revalidar su corona en la ronda gala, teniendo que verse relegado al cuarto puesto, para que la Vuelta a España fuera su gran cruz, cuando en la segunda etapa era descalificado al ayudarse de un coche para recuperar tiempo perdido. Le pudieron las ganas al italiano, que desde este viernes buscará sumar su segundo Giro de Italia.

Nibali, repleto de ilusión y confianza

Todo está listo, y las ganas del italiano son máximas para obtener su segunda victoria en el Giro de Italia, carrera a la que vuelve dos temporadas después, en las que apostó por el Tour de Francia y su balance no pudo ser mejor. "Este va a ser un Giro muy difícil y ganar por segunda vez nunca es fácil, pero la experiencia que he acumulado en las grandes vueltas que he disputado, y ganado, podría jugar como una gran ventaja para mí. Una gran vuelta la vives día a día, estudias el recorrido y los puntos clave", comentó sonriente ante los medios de comunicación. Valerio Agnoli, Eros Capecchi, Jakob Fuglsang, Tanel Kangert, Bakhtiyar Kozhatayev, Davide Malacarne, Michele Scarponi y Andrey Zeits serán los ocho compañeros que se encargarán de llevar a su jefe de filas en volandas a la conquista de su segunda maglia rosa.