No hay quien tosa a André Greipel en las llegadas masivas del Giro de Italia 2016. Con esta victoria ya son tres las que ha contabilizado el Lotto-Soudal en esta primera semana de la corsa rosa, dos para Andre Greipel y la conseguida ayer por Tim Wellens. El 'Gorila' una vez más se mostró intratable y rubrico el gran trabajo de su equipo a la hora de lanzarle a por la victoria. Por su parte, Tom Dumoulin sigue líder en un día sin sobresaltos.
El Etixx-Quick Step había trabajado durante gran parte de la etapa en favor de su hombre rápido, Marcel Kittel, gran protagonista en el primer tercio de la ronda transalpina, donde consiguió dos victorias etapas y despojarle de la maglia rosa a un Tom Dumoulin que hasta el momento se estaba mostrando intratable. Pero un problema técnico a 5 kilómetros de meta le dejó sin opciones de luchar por la victoria de etapa.
Una etapa idonea para las emboscadas
Una nueva jornada maratoniana, sobre un terreno relativamente llano, solo interrumpido por un puerto de segunda categoría el Svolte di Popoli situado en el inicio de la carrera y por una pequeña cota de cuarta categoría, a 40 kilómetros de meta.
Como no podía ser de otro modo, durante la subida a Svolte di Popoli, el puerto más exigente de la jornada de hoy, muchos corredores hicieron casi lo imposible po meterse en la fuga buena del dia. Al final, tan solo unos pocos corredores consiguieron hacerse un hueco en la escapada, Stefan Küng (BMC), Axel Domont (AG2R), Giulio Ciccone (Bardiani), Stefan Denifl (IAM), Ilia Koshevoy (Lampre-Merida) y Daniel Felipe Martinez (Wilier-Southeast), fueron los seis valientes que formaron la fuga de hoy.
A falta de 30 kilómetros el helvético Stefan Küng decidió abandonar el grupo de escapados y probar la aventura en solitario. Como si de una contrarreloj se tratara, con los antebrazos en el manillar y con el cuerpo lo más abajo posible tratando de tener una posición lo más aerodinámica posible, se fue en busca de la victoria. Pero según pasaban los kilómetros su ventaja con el pelotón era mas y mas pequeña y al final cuando la cabeza de carrera ya se disponía a entrar en la ciudad de Foligno, el joven Küng acabó engullido por el pelotón.
En los ultimos kilometros
Con el patrón de carrera establecido, el guión hasta el final tuvo poco que reseñar. El pelotón quiso darse una tregua antes de afrontar la primera etapa montañosa de esta edición de la Corsa Rosa.
La etapa estaba condenada al sprint, y así fue. En las calles de Foligno, Lampre y FDJ trataron de colocar a sus hombres en la mejor posición posible, pero el gran trabajo de Jürgen Roelandts en los últimos metros fue fundamental en el transcurso del sprint. El resto lo hizo Greipel, tremenda arrancada hacia la gloria, para firmar su segunda victoria. Giacomo Nizzolo y Sacha Modolo completaron los puestos de honor.
Y mañana que...
En el dia de mañana los ciclistas tendrán que afrontar una etapa de 186 kilómetros entre Foligno y Arezzo, con dos puertos de montaña, el segundo de ellos el Alpe di Poti de segunda categoría situado a 20 kilómetros de meta, hará las delicias de los corredores que no tengan opciones en las llegadas masivas.
