Equipo joven, con ganas, que ha sabido renovarse y permanecer como toda una referencia en el circuito internacional. Así es el Cannondale Pro Cycling Tour y así se presentará en el Tour de Francia, sin excesiva presión pero con corredores talentosos y con opciones a todo. En una equilibrada mezcolanza de ciclistas jóvenes y experimentados, el conjunto estadounidense buscará con ahínco la victoria en alguna etapa, y a buen seguro serán uno de los actores principales en escapadas. Algunas dudas más suscita su jefe de filas, Pierre Roland, capaz de lo mejor y de lo peor.
David Millar corrió y es ahora uno de los managers del equipo
El Cannondale es un equipo profesional desde 2007, erigiéndose en uno de los más jóvenes de los que serán de la partida en la ronda gala. Ingresó en el ProTour en 2008 bajo la denominación de Garmin Slipstream, y corredores de la talla de Bradley Wiggins, Ryder Hesjedal o David Millar dieron alegrías en el seno del conjunto. Precisamente éste último es un actor fundamental en el devenir del equipo, al postularse en la actualidad como uno de los dirigentes con más peso.
Tras sufrir numerosos cambios de patrocinadores y fusiones con otros equipos, como el Cervelo, en 2015 se produce el punto de inflexión que marca la situación actual de la escuadra norteamericana. Se fusionan con el equipo italiano Cannondale, y se apuesta por corredores jóvenes y con proyección, tanto italianos como estadoundidenses, que forman la columna vertebral del equipo.
Decepcionante temporada de Clásicas, donde ninguno de sus corredores pudo brillar
Talansky, Urán y Rolland se erigen en los líderes del conjunto, lo que permite contemporizar esfuerzos y mandar a cada uno a una gran vuelta. En el Giro fue el colombiano el jefe de filas, y terminó séptimo en la clasificación general, dejándose ver de manera recurrente.
También fue destacable la actuación de Talansky en la Vuelta a Suiza, quedando quinto en la general. Una vuelta de referencia de cara al Tour de Fracia, como es la Dauphiné Libere, no fue fuente de grandes alegrías para Cannondale, percibiéndose cierta debilidad en su líder, Pierre Roland, que acabó décimo pero sin mostrar sensaciones de gran poderío.
En el conjunto presentado de cara al Tour de Francia, destaca la polivalencia de todos sus corredores. Pierre Roland será el líder indiscutible, aunque las dudas sobre si es un corredor para la general y no para grandes etapas, sigue sobrevolando el pelotón. Si Rolland responde bien en la primera semana, el equipo se volcará con él, pero si se descuelga puede darse libertad a corredores de la calidad de Navardauskas, Langeveld, Breschel y, por supuesto, el joven Craddock.
Son muchas las esperanzas depositadas en el joven estadounidense Lawson Craddock, destacado en el circuito junior y que ya ha dado coletazos de su talento a nivel profesional, con una etapa en el Tour de Gila con tan solo 20 años, y otra en el Tríptico de los Montes y los Castillos. Será mimado por el entorno del equipo, siendo un corredor con tremenda proyección de futuro.
Equipo Cannondale Pro Cycling
| Pierre Roland | Francia | 29 años |
| Matti Breschel | Dinamarca | 31 años |
| Sebastian Langeveld | Holanda | 31 años |
| Ramunas Navardauskas | Lituania | 28 años |
| Alex Howes | Estados Unidos | 28 años |
| Lawson Craddock | Estados Unidos | 24 años |
| Kristijan Koren | Eslovenia | 29 años |
| Tom-Jelte Slagter | Holanda | 27 años |
| Dylan Van Baarle | Holanda | 24 años |
El líder: Pierre Roland
Palmarés de lujo de uno de los corredores más venerados y queridos en Francia, pero que en muchas ocasiones deja la sensación de no haber llegado a ser lo que podía preverse. Victorias de peso acumula en su palmarés, como aquella inolvidable en Alpe D´Huez dejando en agua de borrajas la escapada histórica de Alberto Contador.
En 2011 ganó el maillot blanco de los jóvenes pero en los últimos años parece algo estancado. Ha querido dar el paso de corredor competitivo en grandes etapas a candidato a la clasificación general, y lo está pagando con cierto oscurantismo. Su victoria el pasado año en la Vuelta a Castilla y León es un bagaje insuficiente para un corredor de sus características, cuyo objetivo no es otro que el de meterse entre los diez mejores de la general y poder arrancar alguna etapa en la segunda o tercera semana.
El gregario: Ramunas Navardauskas
Su polivalencia le convierten en un fiel y fiable escudero, aunque puede reducir sus posibilidades de brillar en otros terrenos. El papel del lituano será el de guardaespaldas de Roland, aunque el francés es un corredor poco dado a estrategias y que sabe que tendrá que buscarse las habichuelas por sí mismo.
Navardauskas estará con Rolland en la montaña para apoyarle en caso de crisis, pero en función de cómo vaya la carrera, podría adquirir más protagonismo en busca de una victoria de etapa que diera brillo a la actuación del equipo.
El hombre rápido: Álex Howes
Es una de las referencias del ciclismo estadounidense en los últimos años, habiendo cuajado actuaciones brillantes en los Campeonatos Nacionales y poniendo de manifiesto su talento para rodar bien en todo terreno y ser competitivo en los sprints. El elevadísimo nivel general y alta competencia hacen que sea difícil para Howes brillar en el Tour, pero puede buscar su oportunidad en alguna escapada.
Atentos a: Lawson Craddock
Joven, con un futuro esplendoroso y mucho talento. Así es este corredor nacido en 1992 y que fue una de las grandes referencias en categoría junior. Debutará en el Tour de Francia, por lo que habrá que estar atentos a ver cómo le pasa factura el hecho de disputar por primera vez una carrera de tres semanas.
Escala muy bien y rueda bien contra el reloj, por lo que esta edición puede ser un aprendizaje de lujo para un ciclista llamado a dar mucho que hablar en los próximos años.