Borrón y cuenta nueva. Con el Mundial casi sentenciado por parte de Vettel, muchas escuderías centran sus esfuerzos en el monoplaza que debutará en Melbourne la próxima temporada. Algunas de ellas, no obstante, partirían con una clara ventaja: los equipos que utilicen los propulsores Mercedes en 2014 podrían disfrutar de 100 CV de potencia por encima de los motores Ferrari y Renault.
Mercedes podría haber tomado la delantera en la carrera de los propulsores
Las informaciones que circulan por el paddock evidencian que la marca de la estrella tiene entre sus manos un propulsor notablemente superior al de sus dos competidores. La nueva reglamentación obliga a abandonar los actuales V8 para sustituirlos por unos V6 Turbo que serán la pieza clave de los monoplazas del próximo año.
Este elemento diferenciador, según el corresponsal de la revista 'Auto Motor und Sport', Tobias Grüner, podría haber empujado a Lewis Hamilton a abandonar las filas de McLaren el año pasado. “Hay indicadores que indican que Mercedes va un paso por delante”, afirma el periodista. La información no ha sido confirmada por el equipo Mercedes, pero sus dirigentes “transmiten una confianza inusual al ser preguntados por el asunto”, concluye Grüner.
Un dato que apoya las sospechas de los expertos es el hecho de que Mercedes ha expresado su voluntad de aumentar en dos centímetros el ancho de los neumáticos traseros en 2014, mientras que Ferrari y Renault parecen conformes con la configuración actual. El cambio sería necesario para soportar el aumento del par máximo que proporcionarán los V6 Turbo de 850 CV.
Ferrari debe solucionar los problemas de consumo de su motor
La potencia, sin embargo, no es el único factor a destacar. La fiabilidad será un elemento a tener en cuenta el próximo año, y más aún conociendo los problemas que atraviesan los ingenieros para que el motor alcance los 3.600km de vida útil. Además, en el caso de Ferrari, se le da particular importancia al consumo del propulsor ya que el suyo es, a día de hoy, el que gasta más gasolina. Las tres marcas continúan trabajando a contrarreloj en estos aspectos, en los nuevos diseños y en elementos adicionales como el KERS y el turbo.
Novedades en la estética de los monoplazas
El diseño de los coches del año que viene no distará en demasía de los presentes. El reglamento obliga a bajar el frontal del alerón delantero hasta los 18,5cm, por lo que el aspecto de los nuevos morros sería un híbrido entre la estética “morsa” (desde una perspectiva frontal) y la “oso hormiguero” (visto de perfil) y su anchura sería inferior a la actual, similar al del McLaren MP4/21 de 2006.
Por otra parte, el nuevo código permite que la sección AA (parte del chasis donde se ubica el tren delantero) alcance los 55cm de altura. Esta brecha puede ser utilizada por los ingenieros para redirigir el flujo de aire por debajo del monoplaza. La transición entre este segmento y la punta del morro podría ser en línea recta y de forma pronunciada, ya que en sólo 70cm de longitud se debe descender una altura de 30cm. Los ingenieros trabajan para aprovechar estas oportunidades del reglamento para que sus nuevos coches marquen la diferencia en la nueva temporada.
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