Esta semana está siendo muy ajetreada para Bernie Ecclestone. El jefe ejecutivo de la Fórmula Uno, se encuentra en Londres declarando como calidad de demandado por su participación en el caso "Gerhard Gribkowsky". La compañía de comunicación Constantin demanda a Ecclestone por el presunto soborno al banquero ya encarcelado, Gribkowsky. Los abogados de la compañía han pedido 171 millones de dólares en daños y perjuicios por la compra de acciones devaluadas de la Fórmula 1.

El británico, en su primera comparencia, negó haber realizado pagos corruptos a un banquero alemán para facilitar la venta de la Fórmula Uno.  No obstante, reconoció ante el Tribunal Supremo de Reino Unido que pagó casi 12 millones de euros (10 millones de "Realicé el pago de 12 millones de € porque me dijo que me estafaría con los acuerdos de impuestos de nuestro pariente de confianza" libras esterlinas) a Gerhard Gribkowsky porque había amenazado con estafarle sobre los asuntos de impuestos de su familia: "Fueron 12 millones de euros. Realicé el pago porque me dijo que me estafaría con los acuerdos de impuestos de nuestro pariente de confianza, algo que habría salido muy caro". Además, Ecclestone negó haber hecho un acuerdo corrupto con Gribkowsky para vender las acciones de la Fórmula Uno a una empresa de su elección.



Por su parte, los abogados de Ecclestone señalaron que la demanda de Constantin carecía de pruebas y negaron cualquier conspiración. "La demanda se cae por su propio peso: no hubo ninguna conspiración, ni tampoco ningún intento de dañar a Constantin. Él no ha sufrido ninguna pérdida. Ecclestone aceptó un soborno debido a las amenazas de impuestos e insinuaciones que había recibido de Gribkowsky"

Sin embargo, el grupo Constantin Medien apuntó en su defensa que Bernie salió perdiendo debido al presunto acuerdo. Según su Ecclestone reconoció que pagó a tres equipos para firmar el Pacto de la Concordia de 1998 versión, Gribkowsky facilitó a Ecclestone la venta de una participación importante de la Fórmula Uno por su banco, BayernLb, a un comprador escogido por Ecclestone, la empresa privada CVC Capital Partners. Philip Marshall QC, representante de Constantin, afirmó en la vista previa que el acuerdo permitió que Ecclestone mantuviera una posición con la Fórmula Uno.



Según Marshall, Eccestone había pensado que CVC apoyaría su rol continuo como jefe ejecutivo de las empresas operadores en la F1. Gribkowsky pudo haber facilitado a Ecclestone la venta de una participación importante de la Fórmula Uno por su banco, BayernLb Además, el representante de Constatin comentó que su empresa había invertido derechos en la Fórmula Uno, otorgándoseles el derecho a adquirir ganancias de cualquier venta, por lo que la inversión del banco se vendió "sin seguir el proceso normal y adecuado", provocando que Constantin saliera perdiendo.

Por otro lado, y a raíz de este juicio, el máximo accionista de la Fórmula Uno ha reconocido que pagó a diferentes personalidades en el año 1998 para que cumplieran con la firma del Pacto de la Concordia de aquel entonces. Bernie ha señalado como beneficiarios de casi 12 millones de euros al fundador de la escudería Jordan Gran Prix y actual comentarista de la BBC, Eddie Jordan; al cuatro veces campeón del mundo, Alain Prost; y al  por entonces jefe de la escudería Arrows, Tom Walkinshaw.


El dinero, de acuerdo con las investigaciones, fue directamente transferido a las cuentas bancarias personales de los jefes y no a los equipos, a través de las empresas familiares del británico. De esta forma, el jefe de la F1 se aseguraba de que los equipos contribuyeran a la firma.

FOTOS: guide-bijoux, diarioadn.co y elsolnews