El joven piloto de McLaren no ha podido estrenarse mejor en el Gran Circo, consiguiendo el mejor tiempo en su primer contacto con el MP4-29, con el que ha rodado tras hacerlo Jenson Button. Esta situación no estaba prevista antes de llegar a Jerez, pero los problemas que tuvo el equipo de Woking, que impidieron rodar al inglés el primer día, han obligado a compartir monoplaza en el tercer día de pruebas.
“Tenía mariposas en el estómago y algunos problemas para dormir la pasada noche”, comentó el dinamarqués sobre sus sensaciones previas a debutar, ya que, según destacó, tenía unas ganas “sublimes” de subirse a su monoplaza. Aun así, no es su primer día de trabajo, pues ya conoce a todo el mundo y, en McLaren, se siente “como en casa”.
Magnussen ha restado en todo momento importancia al hecho de estrenarse en pretemporada en lo más alto, afirmando que, en Jerez, se está para "aprender sobre el coche"
Respecto a la importancia de marcar el mejor tiempo en su sesión de estreno, ha asegurado que no le da mucha importancia, pues “no se trata de una vuelta en la que estuviera entre la espada y la pared”. Su tarea era recoger “información y aprender más sobre el coche”, como “todo el mundo pretende hacer aquí”.
El MP4-29 tiene margen de mejora o, al menos, eso afirma el hijo de Jan Magnussen: “Lo más importante es cómo mejoran las cosas cuando nos marchemos de Jerez”. Sobre la evolución del coche, en McLaren, ya tienen “una idea sobre la dirección que tomar”.