Caterham está tocado. La escudería británica no esperaba que Marussia consiguiese tan pronto el objetivo por el que ambas llevaban pugnando varios años: su primer punto en el Mundial. De hecho, hace dos fines de semana, en Mónaco, Jules Bianchi logró un noveno puesto que le otorgó no solo uno, sino dos puntos, un hecho que sembró dudas en el garaje de Caterham, que, como ha asegurado Kobayashi, comprobó “con la FIA que todo era legal”, por lo que “es un trabajo bien hecho”.

Así, tras el visto bueno del máximo organismo internacional, la escudería verde asumió su particular derrota y se puso por objetivo tratar de acercarse a su rival borrando la ventaja que parece haberles ganado. De este modo, Kamui Kobayashi ha asegurado en la rueda de prensa de la FIA previa al Gran Premio de Canadá que “es un momento difícil para el equipo”.

Sin embargo, el japonés, penúltimo en el Mundial, apuesta por lanzar un mensaje positivista: “Progresamos. Lo que pasa es que las cosas no cambian de la noche a la mañana en un equipo de Fórmula 1. Pero estamos trabajando muy duro, de eso estoy seguro”. Por lo tanto, el nipón buscará mejorar también sus registros en Canadá para alcanzar, o por lo menos acercarse, al objetivo: conseguir puntos. Para ello, disponen de ciertas “mejoras” que esperan que funcionen y permitan seguir evolucionando el coche y mejorar su competitividad.

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