El piloto francés Romain Grosjean aterriza en Bélgica con el objetivo de volver a puntuar con el errático Lotus. Diversos problemas de fiabilidad con el propulsor de Renault y la falta de competitividad del monoplaza de Enstone le han privado de esa posibilidad. Grosjean también seguirá buscando superar a su compañero de equipo y permanecer en la estructura del equipo británico.

La primera pregunta para todos ha sido la precoz llegada de Max Verstappen a la Fórmula, y todos han remarcado su gran talento y lo que todavía le queda por aprender: “Es una oportunidad maravillosa ya que es bastante especial llegar a la Fórmula 1. Como todos han dicho, ha mostrado un gran talento desde joven pero tiene mucho que aprender sobre el automovilismo en categorías superiores –degradación de neumáticos, velocidad, un montón de cosas. Pero es bueno ver sangre fresca, aunque esté algo triste por JEV (Jean-Éric Vergne).

El piloto francés ha remarcado que a los 17 años no estaba preparado para debutar en la Fórmula ya que acababa de aterrizar en monoplazas: “A los 17 estaba competiendo en mis primeras carreras en monoplazas. Fue en la Fórmula Renault 1.6l y no, no estaba preparado”.

Creo que todavía tenemos que entender y analizar un poco más esta difícil temporada. Hubieron muchas razones por las que empezamos con el pie equivocado pero estoy seguro de que podemos aprender mucho. La idea es preparar el futuro para que sea lo mejor posible para Lotus. Han diseñado maravillosos coches desde los últimos cuatro años y no veo la razón por la que no pueda repetirse este caso en el futuro. Con suerte, las cosas irán mejor pero hasta el momento necesitamos hacer nuestro trabajo, entender las cosas y ver que podemos aprender de esta temporada”, se explayó Romain Grosjean acerca de esta difícil temporada y la posibilidad de que Lotus haga de nuevo un coche competitivo gracias a la llegada de los motores Mercedes.

Romain Grosjean cree que lo importante para un piloto es que se divierta. También cree que la Fórmula 1 es menos física, no obstante, los coches todavía son difíciles de pilotar; más si pensamos acerca del par motor de los V6 y el menor agarre aerodinámico: “Creo que el primer punto es que las pasadas carreras han siendo realmente divertidas. Puedo ver, desafortunadamente, un poco de esos grandes premios. Pero por otra parte, no os equivoquéis, el coche no es fácil de conducir. Estamos todavía rindiendo muy bien. Y sí, físicamente son fáciles, pero hay otros desafíos. Creo es todavía un trabajo duro. Recuerdo mi época en 2009, y ya entonces los coches eran físicamente difíciles de conducir. Me gustaría más ir lo más rápido posible ya que así se disfruta más. Somos pilotos de carreras. Si nos das 200 caballos más y mayor adherencia, lo cogeríamos –aunque lo que queremos realmente es tener buenas carreras”, explicó Grosjean.

De joven, Grosjean tenía alguna superstición, pero cuando se olvidó también ganó la carrera, por lo que solo sigue rutinas para afrontar cada sesión: “Solía tener supersticiones cuando era más joven y una vez olvidé esas cosas, gané la carrera, así que creo que son inútiles pero hay ciertas rutinas: siempre me visto de la misma manera, entró en el coche desde el lado derecho y con los cinturones igual. Es el hecho con el que te das cuenta de que estás preparado para la carrera”.

Fotografías: Formule1.nl.