Con 31 puntos de ventaja sobre su compañero de equipo y máximo rival llega Nico Rosberg al Gran Premio de Italia. La guerra en la escudería Mercedes es cada vez más evidente, y el trazado de Monza será testigo de una nueva batalla entre Hamilton y Rosberg. El toque que tuvieron los monoplazas de los dos pilotos en la segunda vuelta del Gran Premio de Bélgica ha desatado todo tipo de declaraciones por parte de los empleados de Mercedes.

Las disculpas de Nico Rosberg por el incidente de Spa fueron el último paso tomado por el piloto alemán para calmar la creciente tensión en el equipo de las flechas plateadas: "El tiempo me hizo cambiar de opinión. Me tomé la semana para pensar sobre ello y lo debatí el viernes con el equipo y al final, decidí que era yo el que debía asumir la responsabilidad por el incidente. Los jefes del equipo no pueden hacer que pida disculpas. Es una decisión que sale de mi tras escuchar las opiniones de la gente y tras haber mirado a mi mismo de nuevo. Creo que era mi responsabilidad", comentaba el alemán en la rueda de prensa de pilotos.

Foto: zimbio

Con solo 7 carreras por delante, cada punto comienza a ser más importante y la lucha entre Hamilton y Rosberg empieza a ser considerada por muchos como uno de los grandes duelos de la historia de este deporte: "Me doy cuenta de que estamos haciendo historia este año. En Spa, definitivamente no estaba orgulloso de la forma que actué porque en general quiero contribuir a 'mi deporte', porque quiero que sea el deporte más entretenido del mundo y si soy capaz de contribuir a ello a lo largo de la temporada, estaré muy feliz.

Fernando Alonso también ha aportado su punto de vista sobre el conflicto en Mercedes en una entrevista de televisión, donde ha remarcado que tras el Gran Premio de Bélgica, las dos partes del garaje de Mercedes podrían estar divididas y los ingenieros, mecánicos y trabajadores de la marca podrían favorecer a uno u otro piloto: "En general, creo que durante toda la temporada ha habido una competencia sana, dentro del equipo también. Por eso estamos donde estamos. Tenemos el mejor coche, tenemos al mejor equipo del momento. Eso es porque trabajamos juntos como un equipo. Y si no trabajas bien en equipo, no puedes dominar un deporte como lo estamos haciendo ahora nosotros, así que creo que esa es la mejor prueba de ello", declaraba Rosberg en respuesta a las palabras del piloto español.

El toque entre los dos pilotos de la escudería alemana sigue coleando, y con la mirada puesta en posibles enfrentamientos en pista entre Hamilton y Rosberg, la política sigue siendo la misma: competencia, pero sin toques: "Está muy claro desde el principio que no debemos tocarnos entre compañeros. Y ese punto de vista no ha cambiado para el futuro. Sigue siendo lo mismo", sentenciaba Rosberg.

"Respeto las opiniones y trato de concentrarme en conducir mi monoplaza rápido, trabajando duro con el equipo, sacando lo mejor de la situación, y también, disfrutando del momento. Tengo mucha, mucha suerte de tener un coche así. Es algo muy raro en la Fórmula 1. Voy a todas las carreras y se que puedo hacer la pole y ganar la carrera con el coche que tengo. El equipo está haciendo un trabajo increíble, también con el desarrollo del coche. Hay que mantenerlo ¿sabes?. Empujar más y más. Los otros chicos no se están acercando realmente, así que mi atención se centra en concentrarme en el momento y sacar lo máximo de él". Así respondía Nico Rosberg al ser preguntado acerca de su preparación psicológica de cara a las carreras restantes, ahora que la lucha es cada vez mayor.

El podio del Gran Premio de Bélgica de hace dos semanas tuvo una particularidad poco frecuente en la Fórmula 1: Nico Rosberg era abucheado por el público: "No es una buena sensación recibir abucheos. Y los entiendo, ya que la gente viaja desde lejos, muchos para ver una gran carrera: una gran batalla entre Lewis y yo. Y no les dimos eso, por lo que los entiendo y los acepto".

En la última semana se había comentado que Niki Lauda habló con Nico Rosberg para pedirle perdón por las declaraciones que había realizado justo después de la carrera de Spa Francorchamps. El piloto alemán confirmó esta versión durante la rueda de prensa: "Si, es cierto, si. Fue un bonito gesto por su parte, el cual acepté totalmente. Es una cosa del pasado".

En cuanto a lo que se verá en la pista durante el fin de semana, parece que el cambio de la escapatoria de la última curva del circuito de Monza será el tema más hablado y discutido en el paddock. Todos los pilotos han ofrecido su punto de vista acerca de la nueva escapatoria de asfalto. Nico está a favor del cambio, ya que aporta seguridad: "Era una de las curvas más arriesgadas del calendario, así que, definitivamente, hace las cosas mucho más seguras y esa es la dirección en la que hay que ir", comentaba Rosberg al respecto.