Tras cuatro meses siendo el jefe de la parrilla, Nico Rosberg tuvo que inclinar la rodilla y ceder el liderato del campeonato de la manera más dolorosa: por una avería mecánica, sin tener ninguna posibilidad de hacer algo al respecto. Su importante distancia de incluso 29 puntos (alcanzada en Spa) había sido aniquilada por su fallo mecánico y la posterior victoria de Lewis Hamilton en Singapur.

Lejos de venirse abajo, Rosberg llega a Suzuka con las pilas cargadas y dispuesto a recuperar el liderato del campeonato. De momento, en la primera jornada de libres, mejor tiempo por la mañana, y segundo por la tarde, a tres décimas de Hamilton: "Ha sido un muy buen día para nosotros. Hay que dar las gracias a este magnífico equipo por darnos un coche tan competitivo, tanto a una vuelta como en tandas largas", aseguró el alemán.

El hijo del campeón del mundo de 1982 dio especial importancia a su gran ritmo en tanda larga, considerando como la clave de una carrera tan dura como la que se prevé el domingo: "Mi tanda larga por la tarde fue muy buena, así que soy optimista y estoy muy confiado de cara a la carrera del domingo", dijo Rosberg.

Nico Rosberg, que nunca ha subido al podio en este circuito (su quinto puesto en 2009, con Williams, es su mejor resultado), coincide con la mayoría de pilotos en que este trazado tiene algo especial: "Ha sido fantástico poder conducir en este circuito hoy. Además, también el ambiente es muy bueno, ya hoy muchos fans por aquí y son muy entusiastas", concluyó el alemán.