Numerosas son las disciplinas deportivas, artísticas y filosóficas que se han relacionado con la Fórmula Uno a lo largo de esta temporada. Existe una frase ampliamente reconocida de la teoría del darwinismo social que podría sumarse a este capítulo de técnicas y enunciados aplicables a la categoría reina del automovilismo. Charles Darwin hablaba de la “supervivencia del más apto”, del más fuerte, de aquél que ostenta las mejores características para adaptarse a los cambios del entorno. En este caso, la lucha por subsistir en medio de la revolución se transformó en supremacía absoluta.

Mercedes AMG F1 consiguió el ansiado doblete en 2014

Ninguna etiqueta le pega mejor a la temporada más revolucionaria de la historia en lo que a reglamento se refiere. Ante lo desconocido, resultó vencedora la escudería que mejor interpretó el libreto de un 2014 bañado en sangre de turbo. Mercedes prestó a Hamilton y Rosberg la herramienta necesaria para dar un salto en la escala evolutiva y conseguir un histórico doblete. Solo el británico consiguió aprovecharla.

Lewis Hamilton celebra el título a bordo del W05. | Foto: Getty Images.

Los motores turbo ya no son lo que eran. Atrás quedaron las nubes de humo del Renault RS01, la 'tetera amarilla' que bautizó Ken Tyrrell, y los años setenta repletos de pruebas y evoluciones, de fuegos y chimeneas. Los 1.200 CV de potencia ya están enjaulados, moviéndose entre los barrotes de una celda patrocinada por la modificación de las normativas a lo largo de la historia. El rugido ensordecedor ya no emana de los propulsores, sino del quejido entrecortado de una afición que se vio privada en 2014 de uno de los grandes alicientes de la Fórmula Uno: el sonido de los monoplazas.

Mercedes aprovechó como nadie los cambios en la reglamentación

Son los cambios del entorno, esos mismos que Mercedes y solo Mercedes interpretó como nadie, haciendo que todos los factores inestables acabaran jugando a favor del W05. El motor turbo fue solo una pieza del engranaje evolutivo, pero sin duda constituyó la joya de la corona de la escudería de la estrella. Las flechas plateadas se convirtieron en auténticos cohetes sobre el asfalto.

La escudería Mercedes celebra su histórico doblete. | Foto: Getty Images.

Desde Jerez hasta Abu Dabi, pasando por Melbourne y Singapur, los trazados se convirtieron en alfombras de plata. Tras un dominio constante durante las pruebas invernales, en las que todas las escuderías paseaban sus modelitos y ocultaban sus secretos, Mercedes comenzó la temporada de forma dubitativa en Australia con el abandono de Lewis Hamilton. La victoria de Rosberg en Albert Park, una de las cinco que conseguiría en el campeonato, sería la primera piedra de un monumento inquebrantable, a la postre tan solo comparable al levantado por McLaren-Honda en 1988 y por la Scuderia Ferrari en 2002. La temporada de Mercedes fue la tercera más dominadora de la historia, con 16 victorias en 19 carreras, lo que supone un 84% de triunfos.

La temporada de Mercedes fue la tercera más dominadora de la historia

El campeonato fue un paseo militar en el que dos estrategas del mismo bando combatían entre sí. El reparto de victorias, primero repudiado por la grada y el micrófono, acabó tomándose con la naturalidad y la resignación de quien debe aguantar una temporada viendo a las mismas caras pugnando por la gloria. Al final, fue hasta entretenido. La lucha por el Mundial mano a mano, sin la intervención de terceros corredores, originó una notable brecha entre Hamilton y Rosberg mediada la temporada. La tormenta de fuego amigo causó heridas en la piel de los pilotos, amigos desde la infancia, afectando a una relación que solo la mano del Toto Wolff supo curar y reconducir. En este sentido, el comportamiento del alto mando de Mercedes fue ejemplar: permisividad para la competición entre los pilotos, siempre y cuando se salvaguarden los puntos para la escudería.

Nico Rosberg fue subcampeón del Mundial de Pilotos. | Foto: Getty Images.

El dominio inquebrantable de Mercedes se tradujo en un segundo de diferencia con el resto de escuderías, si bien Red Bull y Williams llegaron a disputar de tú a tú algún momento concreto en alguna carrera. Con la salvedad de los problemas mecánicos y el buen hacer de Daniel Ricciardo, que con tres victorias se convirtió en la revelación de este campeonato, la marca de la estrella dominó con suficiencia y mano de plata cada una de las citas del calendario. Al final, el mundial fue a cara o cruz, a papá o a mamá, convirtiendo la recta final en un duelo de personalidades y estilos.

La falta de suerte de Nico Rosberg en la carrera de Yas Marina, que precisaba ganar y poco menos que un milagro para coronarse campeón, encontró su contrapartida en el asiento del piloto 44. Tuvo más peso específico el talento, el 'hammertime' y las once victorias cosechadas por Lewis Hamilton, que por segunda vez en su trayectoria hizo ondear la bandera del Reino Unido por encima del resto. Una altura similar a la que se sitúa Mercedes de cara al 2015. Las estrellas plateadas dieron un salto en la escala evolutiva.

Dos grandes pilotos, un solo campeón

Mercedes ha sido la escudería reina esta temporada. Los ingenieros hicieron un grandísimo trabajo con el monoplaza, pero un buen coche no garantiza un campeonato. Tener buenos pilotos en el equipo, sí. Lewis Hamilton y Nico Rosberg han demostrado a lo largo de todo mundial por qué se merecían estar en el equipo. Los resultados hablan por sí solos, un campeonato y un subcampeonato del mundo respectivamente. El inglés ha sumado durante los 19 grandes premios disputados un total de 384 puntos, seguido de su compañero con 317 unidades.

Nico Rosberg realizó una mejor primera mitad de temporada que Lewis Hamilton

Pese a esta diferencia de casi 60 puntos, el principio de la temporada parecía pronosticar que sería Nico Rosberg el que se alzase con el preciado título. A mitad de la temporada los números le eran totalmente favorables, mientras se hablaba de una maldición a Hamilton. Más puntos, más poles, mejor posición media en clasificación… el alemán tenía el mundial de cara. Pero a partir del Gran Premio de Gran Bretaña la suerte comenzó a estar de lado del inglés.

Hamilton y Rosberg durante la foto de pilotos de final de temporada en Abu Dabi. | Foto: Getty Images

Si se analizan detenidamente los datos de ambos pilotos, se ve claramente la regularidad de Rosberg en clasificación y cómo éste se vio superado por Hamilton los domingos. La racionalidad y exactitud del primero frente a lo emocional e instintivo del segundo. El alemán consiguió 11 de las 19 poles durante el campeonato, mientras que el británico “sólo” consiguió siete de ellas. Rosberg salió en la primera línea de la parrilla en Baréin, Mónaco, Canadá, Gran Bretaña, Alemania, Hungría, Bélgica, Japón, Estados Unidos, Brasil y Abu Dabi. Hamilton consiguió esa misma hazaña en Australia, Malasia, China, España, Italia, Singapur y Rusia.

Rosberg consiguió 11 de las 19 poles del campeonato

En las diferentes sesiones de clasificación, Nico Rosberg consiguió entrar siempre en Q3, mientras que su compañero de equipo se vio obligado a abandonar sin haber hecho tiempo en Q1 en dos ocasiones, en Hungría por quemar el motor y en Alemania al estrellarse después de que un problema con en el disco delantero derecho le bloqueara el neumático izquierdo y le impidiera coger una curva.

Nico Rosberg celebra su victoria en el Gran Premio de Alemania. | Foto: Getty Images.

Respecto a la clasificación media de carrera, el alemán consiguió una espectacular calificación de 1.68, muy por encima del inglés con una media de 4.63, lo que manifiesta la superioridad de Rosberg los sábados.

Éste fue el rendimiento conseguido por los pilotos de Mercedes en clasificación durante la temporada 2014:

Piloto Pos media Eliminado Q1 % Eliminado Q2 % Clasificado Q3 % Poles
Hamilton 4.63 2 10.52 0 0 17 89.47 7
Rosberg 1.68 0 0 0 0 19 100 11

Aunque la superioridad del alemán en clasificación fue aplastante, Hamilton le ganó la partida quedando por delante el día de la carrera en 12 ocasiones. Sólo Daniel Ricciardo con sus victorias en los GP de Canadá, Hungría y Bélgica y Felipe Massa con la pole en el GP de Austria pudieron disimular el dominio de Mercedes. Rosberg se hizo con la victoria en cinco ocasiones mientras que Hamilton lo hizo en 11.

Hamilton sufrió 3 abandonos; Rosberg solo 2

El británico puntuó 16 veces, las mismas que el alemán. Ninguno de los dos fue un habitual en lo que a abandonos se refiere. Hamilton se vio obligado a retirarse de la carrera en tres ocasiones, Rosberg solo dos. Las sanciones no estuvieron presentes para los pilotos de Mercedes, ni siquiera en el incidente ocurrido en la clasificación del GP de Mónaco, cuando Nico se salió de la pista y provocó una bandera amarilla justo cuando Hamilton parecía que iba a arrebatarle la pole.

Nico Rosberg durante un momento del Gran Premio de Australia. | Foto: Getty Images.

Si bien en la clasificación Nico Rosberg se ha mostrado imbatible, Lewis Hamilton ha tenido un mejor rendimiento durante la carrera, con un saldo positivo de una posición respecto a la inicial en la salida. Además de escalar hasta 18 posiciones en el Gran Premio de Hungría, pasando de P21 a segundo. Lo que contrasta con las 51 posiciones perdidas del alemán a lo largo del campeonato, en Singapur llegó a perder 19 posiciones.

La falta de destreza en las salidas le ha salido muy caro a Rosberg, que en la última carrera de la temporada –en la que los puntos eran dobles- dejó escapar la oportunidad de mantenerse en primera posición al contar con la pole después de que las ruedas le patinasen cuando el semáforo se puso en verde. Por otra parte, el inglés superó al alemán en número de podios por 16 a 15.

Éstos fueron los resultados en carrera obtenidos por los pilotos de Mercedes:

Piloto Victorias % Podios % Veces Puntos % Total Puntos
Hamilton 11 57.89 16 84.21 16 84.21 384
Rosberg 5 26.31 15 78.94 16 84.21 317

Así fue el rendimiento de Rosberg y Hamilton durante la temporada 2014:

Piloto Pos Media Puntos Abandonos
Hamilton 4.10 384 3
Rosberg 5.23 317 2

La temporada 2014 ha sido completamente opuesta para los pilotos respecto a la del año pasado. En esta ocasión, era Nico Rosberg el que comenzaba con muy buen pie el campeonato, alzándose como favorito para el mundial. Pero poco a poco se fue desinflando para dejar paso a Hamilton, que fue mejorando su rendimiento hasta alzarse con el campeonato, confirmándose como leyenda del automovilismo británico.

Lewis Hamilton se coronó bicampeón del mundo en el Circuito de Yas Marina. | Foto: Getty Images.

Repetir supremacía en 2015

Mantenerse en lo más alto. Ese es el objetivo del equipo Mercedes tras realizar una temporada espectacular con el campeonato de constructores y de pilotos en sus manos, además del subcampeonato de Rosberg y una clara ventaja respecto a sus rivales. Las demás escuderías necesitan mejorar mucho para poder alcanzar el rendimiento de las flechas plateadas este año.

El resto de escuderías debe recortar una gran diferencia para plantar cara a Mercedes en 2015

Quizás el rival más próximo de cara a la temporada que viene sea el tándem entre McLaren y Honda, que vuelve a la Fórmula Uno después de más de 20 años. El jefe del departamento de deportes de motor de la empresa nipona, Yasuhisa Arai se mostraba confiado con las posibilidades del equipo frente a los actuales campeones: "Tengo confianza en que alcanzaremos a Mercedes. Creo que los otros dos suministradores de motores se recuperarán la siguiente temporada, y nosotros también estaremos ahí. La Fórmula Uno es una parte importante de nuestra estrategia, y ganar es muy importante para Honda”.

La escudería ha querido cubrirse las espaldas y lleva desde agosto trabajando exclusivamente en el coche que utilizarán sus pilotos, Lewis Hamilton y Nico Rosberg, la próxima temporada. Los problemas de fiabilidad que surgieron a comienzos del campeonato parecen haber sido superados, por lo que si Mercedes continúa en la misma línea y Honda no da la sorpresa, no parece que vaya a tener problemas de cara a la próxima temporada.

Artículo realizado en colaboración con Alicia Rodríguez (@AliciaRRo)