Nuevo desfile triunfal de Hamilton en la tierra de los ojos rasgados. Si bien ya se jactaba de tres victorias, cuatro poles, dos vueltas rápidas y seis podios antes de comenzar el Gran Premio, pueden ir sumándole otro tanto. El 'hammer time' sigue engrosando sus números y en China -por no volar más lejos- son ya de cuatro triunfos, cinco 'pole-postions', tres vueltas rápidas y siete podios sobre el reino oriental.

No en vano, tras quedarse a pocos centímetros de tocar el 'Grand Chelem', el británico ha dominado en todos los campos. Sin ir más lejos, todos los libres, la clasificación y la carrera han sido acaparadas por el campeón inglés, que ha subido al número uno en todo lo que se ha disputado desde la mañana del pasado viernes. Sesión a sesión, y destrozando cronos, ha impuesto con puño de hierro su ley en la tierra asiática.

La fórmula. El retorno del canon | FOTO: ZIMBIO

Ya no sorprende volver a ver a las fugaces estrellas de plata copando las primeras posiciones del podio, como tampoco nos inquieta escuchar el himno británico que con ostensible fervor entonaba para sí el bicampeón del mundo tras conquistar su decimocuarta victoria a los mandos del bólido anglosajón. Con ello, el ya coronado campeón comienza de nuevo a modelar su flamante imperio, sentando la barrera entre su monarcado y el resto del mundo. Y así pasaba el inglés por meta. Marcando las distancias, y con el Safety Car habilitado para finalizar su paseo triunfante y, saludando al respetable, imponer su impronta.

El botín del inglés en el incipiente campeonato asciende ya a 68 puntos, y solo siete de los guarismos en juego han escapado de su control. Precisamente los que le robara un Sebastian Vettel, cuya victoria en Malasia ha parecido ser un espejismo, un destello transitorio que apenas ha sido capaz de cegar a un equipo Mercedes que ha repetido en Shangái doblete en el podio, siendo el teutón el tercero en discordia tras encadenar -y quién se lo diría a Ferrari- su tercer podio del presente curso.

La fórmula. El retorno del canon | FOTO: ZIMBIO

No en vano, los que protagonizaran el milagro de tinte 'rosso' en Sepang han vuelto a secundar un Gran Premio de jerarquía. Con Räikkonen abonado al cuarto, resistente al bombardero blanco de Williams, en las primeras posiciones han desfilado cual si fuera una tropa militar los tres mejores equipos de la presente parrilla. Con Mercedes llevando la maniobra, Ferrari se conforma con seguir completando el podio y opositar a alguna victoria, mientras en tercera línea los Williams persisten en tierra de nadie tras el pasmoso ascenso de su contrincante transalpino.

Y así y todo, la petulancia parsimoniosa de los líderes contrasta, no obstante, con el marco de los mortales. De los unos a los otros, es decir, del sexto al séptimo puesto, parece haber una grieta insalvable. Una 'muralla china'. "Por una mirada, un mundo", dirán estos de la otra división. Y tanto que sí, ya que estos apenas son capaces de otear en el horizonte los alerones de los hombres de cabeza.

Desafortunado papel de los españoles en China

Un mundo como el que ha separado al Williams de Bottas de su perseguidor el francés Romain Grosjean. Diez segundos de brecha que apenas han asustado el retrovisor del finés. Como para Lotus, para Sauber, Force India, Toro Rosso o Red Bull esta es una batalla perdida. En tanto que, visto lo visto en tres jornadas de competición, el mantra que se presupone de aquí a final de año será el de que "Mercedes domina y los demás le siguen"; un espejo traído del año anterior.

Un desafortunado papel de Toro Rosso ha sido lo único que ha roto los esquemas de un Gran Premio que ha vuelto a reeditar los cánones. Mala fortuna para Sainz, que trompeaba en la vuelta 2 y más tarde perdía ritmo hasta detenerse en la recta de meta. Luego de haberse detenido por fin conseguía reiniciar el software para conlcuir en decimotercera plaza, tras la sanción de Jenson Button que le ha permitido ganar una posición.

La fórmula. El retorno del canon | FOTO: ZIMBIO

Mejor suerte corría el otro McLaren-Honda, el de Fernando Alonso, tras una carrera cómoda en incluso divertida que le ha colocado por delante de todos los españoles. No así en el caso del holandés Verstappen, que corría octavo cuando un fallo en el motor de su Toro Rosso le privaba de repetir por segunda semana seguida en los puntos.

Por su parte, Manor se mantiene a la cola de una clasificación que Roberto Merhi ha cerrado este domingo tras su compañero de equipo. Poco más cabía esperar de los neo-Marussia, que muy lejos de los puntos han completado todas las vueltas y han recabado una buena cantidad de datos de cara a Shakir. Como en el seno del equipo de Woking, el objetivo era ese precisamente, seguir rodando y completando ensayos. Seguir sumando en la curva de aprendizaje que es para ellos este 2015.

La fórmula. El retorno del canon | FOTO: ZIMBIO

"Llegará el turno de McLaren"

Y lo que en Mercedes empieza, en McLaren-Honda termina. Un equipo el anglonipón que cada vez viene dando más brotes verdes. Los de Woking se niegan a convertir su proyecto en un mero artificio, en una promesa fallida. En un plan de "mucho ruido y pocas nueces". El capo Ron Dennis ha sido el primero en jurar que a partir de España caben esperar novedades en un McLaren-Honda que aún sigue muy lejos de puntuar. "Esperamos dar un salto cualitativo para Barcelona". Y tanto insistía que le vamos a tomar la palabra.

Y, por otra parte, están obligados a dar con la fórmula. Así, de paso, se evitan comentarios casi burlescos de Räikkonen por radio como los que se han producido este domingo. "Quitadme de en medio a este McLaren", decía mientras pisoteaba el MP4-30 de Fernando Alonso. Otra de esas paradojas del destino, cruel -de momento- para el español.

"Pero ahora les toca ellos, ya disfrutaremos nosotros", añadía el asturiano. Y por qué no. De todos modos, poco más se puede hacer que esperar un salto de la escuadra inglesa de cara a próximas citas. Es por ello que cabe confiar en un equipo que todavía necesita, como también aclaraba el propio Fernando, "caminar antes de andar".