Como un paciente enfermo. Así llegó la Fórmula 1 al inicio del año 2015. Este deporte, que guarda en su historia momentos increíbles, venía sufriendo en los últimos tiempos una pérdida de aficionados considerable. La creciente importancia de la tecnología en una competición basada en su creación en la pericia del piloto ha ido desenganchando al público, que además ha visto cómo ha disminuido la espectacularidad y el número de adelantamientos pese a la introducción de elementos especialmente diseñados para tal fin.

El último factor que desencadenó esta crisis de la máxima categoría del automovilismo fue el dominio apabullante que ejerció Mercedes en 2014, dominando con autoridad ambos campeonatos y dando exiguas posibilidades de éxito al resto de escuderías.

Una pretemporada con muchos frentes abiertos

El objetivo del ‘Gran Circo’ para esta nueva temporada no era otro que el devolver la emoción a las carreras e intentar que se abriese el abanico de posibilidades de que un monoplaza distinto al de la estrella plateada se proclamase ganador o entrase en la lucha por el campeonato. Y esta meta propuesta por los dirigentes de la Fórmula 1 comenzó a mostrar sus primeros progresos en la pretemporada.

El dominio de Mercedes continuaba pareciendo incontestable, pero Ferrari, la escudería más mítica del Mundial y que había protagonizado un 2014 para olvidar, se postuló desde el primer momento como la alternativa a la escudería alemana. Los primeros tests también sirvieron para poner un foco de atención también en Toro Rosso, pues la escudería italiana llegaba a Jerez con dos de los pilotos con mayor proyección: Carlos Sainz y Max Verstappen.

La lucha también se podía centrar en cada uno de los garajes del resto de equipos, pero buena parte de las miradas se fijaban en McLaren. La escudería británica había llegado a un acuerdo con Honda para que la marca nipona se convirtiese en la suministradora de motores del equipo, y este nuevo proyecto se vio respaldado con el fichaje de Fernando Alonso, que puso fin a cinco años agridulces en Maranello para volver a Woking e intentar disfrutar de una de las mejores escuderías de la historia y olvidar su etapa de 2007. El equipo liderado por Eric Boullier también comenzó una lucha desde el primer momento, si bien su rival era la fiabilidad y la evolución de un motor Honda que no funcionó como se esperaba en un principio.

Así, el 1 de febrero, ocho escuderías (Force India y Manor no participaron) se citaron en el circuito de Jerez para afrontar durante cuatro días los primeros entrenamientos de pretemporada. Ferrari mostró velocidad, Mercedes fiabilidad, y otras escuderías como Sauber sorprendieron a todos por su ritmo a una vuelta y por su rendimiento durante estos primeros tests.

Dos semanas después, las escuderías se trasladaron a Cataluña para llevar a cabo la segunda parte de la pretemporada. Force India comenzó también su pretemporada tras ausentarse en Jerez, pero las miradas se centraron en Lotus-Mercedes. El cambio de motor provocó muy buenas sensaciones en el equipo de Enstone, que dominó tres de las cuatro jornadas de estos primeros entrenamientos en Barcelona y anticipaba un salto cualitativo con respecto al rendimiento de la pasada temporada.

Sin embargo, lo más destacado de estos segundos tests de pretemporada ocurrió el cuarto y último día. Fernando Alonso perdió el control de su monoplaza en la tercera curva del circuito y se estrelló contra el muro, siendo trasladado de manera inmediata al Hospital General de Catalunya. El golpe había sido más fuerte de lo esperado en un principio y el piloto asturiano estuvo varios días ingresado en el centro médico. Una vez recuperado, aún no se encontraba en plenas condiciones para subirse al MP4-30, por lo que el bicampeón del mundo no estuvo presente en la primera carrera del Mundial 2015, el Gran Premio de Australia.

Pero antes de viajar a tierras oceánicas llegó la tercera tanda de entrenamientos de pretemporada. Los equipos iban ajustando sus piezas y adaptándose a todas las novedades reglamentarias para llegar en condiciones óptimas a Melbourne. Mercedes comenzó a asomar la cabeza por las primeras posiciones y dominó dos de los cuatro días de entrenamientos, mientras que escuderías como Williams o Red Bull daban un paso al frente y mejoraban sus prestaciones con respecto al inicio de la pretemporada.

Así, se presuponía un nuevo dominio de Mercedes en el campeonato, pero Williams, Red Bull y Ferrari se encontraban preparados para presentar batalla. McLaren-Honda seguía luchando contra sí mismo, mientras que Lotus, Toro Rosso y Sauber emergían como candidatos a equipo revelación.

La vida sigue igual

El fuego real comenzó el 15 de marzo, con la disputa de las dos primeras sesiones de entrenamientos libres. La pretemporada había creado expectación entre los aficionados, pero Mercedes demostró desde el principio que quería hacer de nuevo un campeonato aburrido para el resto y que su distancia con las demás escuderías seguía siendo abismal.

Nico Rosberg y Lewis Hamilton lideraron las tres sesiones de entrenamientos libres con una diferencia en torno al segundo con los siguientes monoplazas, en este caso los Ferrari de Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen. Ya en la clasificación, el vigente campeón demostró por qué era el primer candidato a conseguir el título este año, y consiguió la ‘pole position’ con seis décimas de ventaja con respecto a su compañero de equipo y más de 1,5 segundos con el tercer clasificado, el brasileño Felipe Massa.

El domingo, en la carrera, los dos monoplazas de la estrella confirmaron que también seguían contando con el mejor ritmo por vuelta de la parrilla, y Lewis Hamilton dominó el gran premio de principio a fin y consiguió su primer triunfo del Mundial 2015.

Al británico le secundaron en el podio Nico Rosberg y Sebastian Vettel, que comenzó en la cuarta posición y sumó su primer podio en su primera carrera vestido de rojo. El gran premio comenzó de manera accidentada y la salida la tomaron 15 monoplazas tras las ausencias de Valtteri Bottas (lesión en la espalda), Kevin Magnussen (que sustituyó a Fernando Alonso y sufrió una rotura de motor en la vuelta de formación) y Daniil Kvyat, al que le sucedió lo mismo que al piloto danés. Y es que Red Bull fue una de las notas negativas de esta primera carrera, pues demostraron desde el principio muchos problemas con el motor Renault que le impidieron estar más cerca de los mejores.

Las actuaciones más destacadas de este Gran Premio de Australia, al margen de la carrera de Lewis Hamilton, llegaron de parte de Sauber, que con Felipe Nasr (5º) y Marcus Ericsson (8º) logró terminar con ambos coches en los puntos (situación que no se producía desde el Gran Premio de Japón 2013), y de Carlos Sainz, que logró un espectacular noveno puesto en su primera carrera en la Fórmula 1.

El resultado podía haber sido mucho mejor para el piloto madrileño, pero un problema en el pit stop (la tuerca de la rueda trasera izquierda se atascó) le hizo perder 32 segundos y con ello sus posibilidades de lograr un mejor debut. Por su parte, Fernando Alonso no participó al no estar recuperado del accidente sufrido en los segundos entrenamientos de pretemporada.

Ferrari vuelve a la élite

Dos semanas después, la competición llegó a Sepang, uno de los circuitos que más espectáculo ha ofrecido en los últimos años. Los Mercedes volvieron mostrar su dominio en todas las sesiones de entrenamientos, pero Ferrari recortó de manera notable la diferencia con el equipo alemán y mostrando un ritmo similar al de la escudería alemán en tandas largas, lo que les situó como firmes candidatos a disputarle la victoria a los campeones del mundo.

Tanto es así, que incluso Sebastian Vettel logró clasificar entre ambos coches plateados y comenzó la carrera desde la primera línea, relegando a Nico Rosberg a la tercera posición. La sorpresa fue aún mayor el domingo, pues el tetracampeón del mundo confirmó la tendencia acaecida en los entrenamientos, lo que sumado a una gran estrategia le permitió conseguir su primera victoria con Ferrari, un triunfo que no lograba desde el Gran Premio de Brasil 2014.

Más especial aún fue esta victoria para la escudería alemana, que no se subía a lo más alto del podio desde el Gran Premio de España 2013. El podio se completó con los dos monoplazas de Mercedes, que asistieron estupefactos al resurgir del ‘Cavallino Rampante’, con el británico en segunda posición tras libar una bonita batalla con Vettel y Rosberg ocupando el tercer cajón del podio.

Al igual que en Australia, una de las actuaciones más destacadas la protagonizó Carlos Sainz, que volvió a terminar en la zona de puntos al cruzar la línea de meta en octava posición pese a partir 15º, mientras que su compañero Max Verstappen se convirtió en el piloto más joven de la historia de la Fórmula 1 en puntuar tras terminar séptimo.

Fernando Alonso volvió a la competición, y llegó a rodar en octava posición y con un mejor ritmo por vuelta del esperado, pero el McLaren-Honda acusó graves problemas de fiabilidad y tuvo que retirarse, al igual que su compañero Jenson Button. También compitió un tercer piloto español, Roberto Merhi, que disputó su primera carrera en la máxima categoría del automovilismo con la escudería Manor. El valenciano logró cruzar la línea de meta, todo un logro para una escudería con un presupuesto netamente inferior al resto de equipos y cuyo objetivo es acumular kilómetros para poder desarrollar el coche en el futuro.

Mercedes retoma el pulso en China

El continente asiático esperaba a la Fórmula 1 para celebrar la tercera carrera de la temporada. El fracaso de la carrera en Malasia sirvió para espolear a los hombres de Mercedes que, liderados por Lewis Hamilton, no dieron opción al resto de monoplazas y coparon la primera posición de todas las sesiones de entrenamientos oficiales, logrando además la tercera ‘pole position’ de la temporada. En el trazado chino, donde el motor supone un aspecto fundamental, Williams se coló entre los dos Ferrari en la clasificación y comenzó a asomar la cabeza por las posiciones delanteras en este Mundial 2015. Sin embargo, los puntos se reparten el domingo y el podio del Gran Premio de China fue exactamente igual al de la primera carrera: Hamilton-Rosberg-Vettel. El británico dominó de manera contundente la carrera de principio a fin y sumó su segunda victoria en tres carreras, mientras que el alemán de la escudería italiana lograba su tercer podio consecutivo.

El principal centro de atención de la carrera estuvo en la lucha por la segunda posición, pero esta vez Mercedes reaccionó bien a los intentos de Ferrari y logró que el vigente subcampeón del mundo lograra subir al segundo cajón del podio. Los españoles vivieron un buen fin de semana y los tres logaron terminar la carrera, si bien ninguno de ellos entró en la zona de puntos. Carlos Sainz sufrió un trompo al inicio y posteriormente problemas en la caja de cambios, terminando muy lejos de los diez primeros puestos; Fernando Alonso remontó y consiguió llegar hasta la 12ª posición, pero el MP4-30 no podía aún competir con los mejores. Por último, Roberto Merhi, que volvió a terminar una carrera de Fórmula 1, pero esta vez se vio superado por su compañero de equipo. Quien sí estuvo entre los diez primeros fueron los dos Sauber, que seguían postulándose como el equipo revelación gracias a este gran inicio de temporada. También cabe destacar la actuación de Max Verstappen, que protagonizó adelantamientos espectaculares y llegó a ser octavo, pero el motor Renault se rompió a falta de tres vueltas para el final.

Una noche helada

El Gran Premio de Baréin, la cuarta carrera de la temporada, tuvo connotaciones similares al disputado en territorio malayo. La noche caía sobre el circuito de Sakhir y Kimi Räikkönen sorprendió a los Mercedes liderando la primera sesión de entrenamientos libres, pero los campeones apretaron y dominaron el resto de sesiones incluida la clasificación, de nuevo con Lewis Hamilton a la cabeza. Sebastian Vettel, al igual que en Sepang, se coló entre los dos monoplazas plateados y comenzó la carrera en la primera fila de la parrilla por segunda vez en la temporada. Sin embargo, el alemán sólo pudo ser quinto en una carrera que fue de nuevo dominada por Lewis Hamilton. Esta vez, el que se coló entre ambos monoplazas plateados fue el finlandés de Ferrari, que comenzaba la carrera desde la cuarta posición y adelantó a Nico Rosberg en la última vuelta por un problema de frenos del piloto alemán. El piloto finés volvió a dar su mejor versión mucho tiempo después y protagonizó una espectacular remontada, recortando 20 segundos en 17 vueltas tras aprovechar una estrategia diferente a la del subcampeón del mundo.

McLaren-Honda dio muestras de continuar con su evolución y logró su mejor resultado con el undécimo puesto de Fernando Alonso, que rodó a un gran ritmo en el tramo final de la carrera y se quedó a menos de cuatro segundos del Williams de Felipe Massa. La cruz en la escudería de Woking la protagonizó Jenson Button, que no pudo tomar la salida por un problema en el ERS. Tampoco le fueron bien las cosas a Carlos Sainz y Toro Rosso. El madrileño se vio obligado a abandonar en la vuelta 29 por un problema de motor, mientras que su compañero también terminó la carrera de manera prematura, en su caso por un fallo en el sistema eléctrico. El tercer español en liza, Roberto Merhi, logró llevar el coche hasta la línea de meta pese a sufrir problemas de potencia y velocidad con respecto al coche de su compañero Will Stevens.

Rosberg y Sainz brillan en Europa

La quinta prueba de la temporada es una de las más esperadas por la escudería. La Fórmula 1 pisa por primera vez en el año suelo europeo, lo que significa que las primeras grandes evoluciones llegan a los diferentes monoplazas. La cercanía de las fábricas provoca que el número de mejoras que se lleva a Barcelona sea superior a la de la mayoría de circuitos. De esta forma, las diez escuderías llegaron a Montmeló para disputar el Gran Premio de España. La llegada a Europa le sentó bien a Nico Rosberg, que se mostró más rápido que su compañero de equipo y máximo rival por el título en casi todas las sesiones, siendo también el mejor coche en la sesión de clasificación, logrando así su primera ‘pole position’ de la temporada. Pero las miradas en estos entrenamientos se centraron en Carlos Sainz, que tuvo una actuación magistral y llevó al Toro Rosso hasta la quinta posición de la parrilla de salida.

En Barcelona, quien logra comenzar la carrera desde la primera posición tiene un altísimo porcentaje de victoria, superior al de Mónaco, y Nico Rosberg hizo valer esta estadística para conseguir su primer triunfo de la temporada tras dominar la carrera de principio a fin. Además, el alemán recortó las distancias en el campeonato con Lewis Hamilton, que tuvo que conformarse con la segunda plaza. La distancia con el resto de escuderías parecía haber aumentado, y entre el germano y su compatriota Sebastian Vettel, que logró su cuarto podio en cinco carreras, hubo una diferencia superior a 45 segundos y una sensación de que Ferrari había dado un paso atrás con respecto a las cuatro primeras carreras de la temporada.

La actuación de Carlos Sainz fue sencillamente espectacular. Pese a perder posiciones en la salida y salir de la zona de puntos por la baja velocidad punta del Toro Rosso, el madrileño optó por una estrategia diferente y se reservó los neumáticos blandos para el final, lo que le permitió llegar hasta la úndécima posición. Delante se encontraba su compañero de equipo, que nada pudo hacer ante el empuje del español y acabó perdiendo la última posición de puntos. Pero a Sainz aún le quedaban unas vueltas por delante y, aprovechando los problemas de neumáticos de Daniil Kvyat, adelantó al ruso y finalizó la carrera en novena posición. Peor suerte corrió Fernando Alonso, que se vio obligado a abandonar por problemas de frenos en la vuelta 28. El McLaren-Honda parecía tener ritmo para estar en los puntos, pero de nuevo la fiabilidad echó por tierra la primera opción real de puntuar del piloto asturiano. Sí logró terminar Roberto Merhi, pero el valenciano se vio de nuevo superado por su compañero de equipo.

Un error en mayúsculas

Mónaco es sinónimo de glamour, de riqueza y también de velocidad. Los monoplazas se juegan la vida en las estrechas calles del Principado, donde el más mínimo error te deja fuera de carrera y donde la concentración se eleva hasta su punto más álgido. El Gran Premio de Mónaco es la carrera que todo piloto de Fórmula 1 quiere ganar. Independientemente de cuál sea tu trayectoria en este deporte, la persona que gana en el trazado monegasco pasa a formar parte de la historia del mundo del motor. Esta carrera siempre es sinónimo de espectáculo y emoción, y la edición de 2015 no iba a defraudar. Lewis Hamilton, que posee un gen ganador muy potente, salió herido de Barcelona, así que se subió al monoplaza dispuesto a devolverle la moneda a Nico Rosberg. El británico fue el más rápido durante todo el fin de semana y consiguió de nuevo la ‘pole position’, quinta en seis carreras, lo que le permitió convertirse en máximo favorito al triunfo por la dificultad de adelantar en este circuito.

Sin embargo, la carrera aún tenía una sorpresa preparada, si bien para Lewis Hamilton fue una pesadilla. El británico lideraba y controlaba la carrera sin ninguna dificultad, pero todo cambió a falta de 15 vueltas para el final. Max Verstappen sufrió un fuerte accidente en la primera curva del circuito y el ‘safety-car’ salió a la pista. En una maniobra incomprensible, Mercedes llamó a ‘boxes’ para cambiar compuestos a Lewis Hamilton, que vio cómo Nico Rosberg y Sebastian Vettel le adelantaban. Pese a faltar ocho vueltas para el final, el bicampeón del mundo no pudo adelantar al de Ferrari y tuvo que conformarse con la tercera posición cuando ya comenzaba a saborear la victoria. El segundo triunfo consecutivo de Rosberg le permitió además recortar la distancia en el campeonato, situándose tan sólo a diez puntos de su compañero de equipo.

Por detrás, Red Bull realizó una excelente carrera y terminó con Daniel Ricciardo en la cuarta posición Daniil Kvyat en la quinta, logrando así su mejor resultado de la temporada hasta el momento. Otra actuación destacada la protagonizó Carlos Sainz, que comenzó la carrera desde el ‘pit-lane’ por no acudir el sábado al pesaje y logró terminar en décima posición y sumar un nuevo punto a su casillero particular. Las malas noticias para los españoles volvieron a llegar de parte de Fernando Alonso, que sufrió problemas de temperaturas en su coche y fue llamado al garaje. Pero no todo fueron malas noticias en la escudería de Woking. Jenson Button cuajó una buena actuación y terminó en la octava plaza, dando al equipo británico sus primeros puntos de la temporada. El tercer español de la parrilla, Roberto Merhi, continuó realizando un excelente trabajo y volvió a completar la carrera, que es el objetivo que le marcan desde el equipo.

Distinto continente, historia habitual

Tras dos carreras consecutivas en Europa, llegó el momento de pisar suelo americano por primera vez esta temporada. El circuito Gilles Villeneuve acogía la séptima prueba de la temporada, el Gran Premio de Canadá. Un trazado donde la proximidad con los muros no permite el más mínimo error a los monoplazas, y que siempre es un lugar donde se celebran careras emocionantes. Montreal era el lugar para comprobar la fortaleza mental de Lewis Hamilton. El británico llegaba a territorio norteamericano tras el desastre de Mónaco, pero el campeón del mundo demostró que ha madurado lo suficiente dentro del monoplaza para olvidar el fiasco y volver a ser el más rápido. Y lo fue durante las dos primeras jornadas en el circuito canadiense, consiguiendo el mejor tiempo en dos de las tres sesiones de entrenamientos libres y en la clasificación. Una sesión de clasificación donde Kimi Räikkönen superó por primera vez a Sebastian Vettel y donde los Lotus-Mercedes asomaron en la parte delantera y ocuparon la tercera fila de la parrilla, con Romain Grosjean en quinta posición y Pastor Maldonado en sexta. La gran sorpresa fue la eliminación del tetracampeón del mundo en la Q1 por pérdida de potencia en su Ferrari, lo que le obligó a comenzar desde la última posición tras sufrir también una sanción de cinco posiciones por adelantar con bandera roja en los Libres 3.

El domingo, en la carrera, las aguas volvieron a su cauce y Lewis Hamilton no tuvo ningún problema para adjudicarse su cuarta victoria de la temporada y aumentar la ventaja con sus rivales en el Mundial. Nico Rosberg no puso en apuros al líder en ningún momento y se vio relegado a la segunda posición, mientras que el podio lo completó Valtteri Bottas, que se subió por primera vez al cajón en esta temporada 2015. El finlandés aprovechó la depecionante actuación se compatriota Kimi Räikkönen para volver a pisar un podio que se le resistía este año. Si Kimi fue la cruz de Ferrari, Sebastian Vettel fue la cara y el gran protagonista de la carrera tras remontar desde la 19ª hasta la quinta posición con un recital de adelantamientos, demostrando que a día de hoy está muy por encima de su compañero de escudería.

Pero la actuación más negativa de este Gran Premio de Canadá corrió a cargo de McLaren-Honda. La escudería de Woking protagonizó su peor carrera del año y no continuó con la trayectoria ascendente que había seguido en las últimas carreras. Las piezas de estreno llevadas a tierras norteamericanas no mejoraron el MP4-30 y ambos monoplazas sufrieron problemas mecánicos que le obligaron a abandonar la carrera. También abandonó Roberto Merhi, que por primera vez en la temporada no lograba terminar una carrera. El único español que vio la bandera a cuadros fue Carlos Sainz, pero el madrileño no tuvo una gran actuación y tuvo que conformarse con la 12ª posición.

Nuevo doblete plateado

La Fórmula 1 volvió a Europa para disputar las tres últimas carreras antes del parón veraniego. La primera de ellas se disputó en Austria, en el circuito situado en Spielberg, un trazado corto que conlleva menores diferencias entre los monoplazas. Si la primera visita a Europa sentó bien a Nico Rosberg, el alemán también tuvo un buen regreso al ‘viejo continente’. El piloto de Mercedes dominó los primeros entrenamientos libres, pero fue Sebastian Vettel el hombre más rápido del fin de semana en los Libres tras dominar la segunda y la tercera sesión. Sin embargo, a la hora de la verdad, Lewis Hamilton volvió a demostrar su velocidad y su capacidad de competir y se llevó una nueva ‘pole position’, lo que le situaba con grandes opciones de conseguir el triunfo en un trazado difícil para los adelantamientos. La sorpresa de esta clasificación llegó de manos de Nico Hülkenberg, que llevó el Force India hasta la quinta posición de la parrilla y demostrando que tiene capacidad para hacerlo bien en equipos más punteros.

Pero la carrera no iba a ser tan fácil para el líder del Mundial. Hamilton realizó una mala salida y se vio superado por Nico Rosberg, lo que sumado a una posterior sanción de cinco segundos al británico tras su primera parada en boxes por pisar la línea blanca del pit-lane terminó de decantar la victoria para el alemán, que sumó su tercera de la temporada (las tres en suelo europeo) y volvió a enjugar la diferencia en la clasificación mundial de pilotos. El tercer cajón del podio estuvo ocupado por Felipe Massa, consiguiendo así el primero de la temporada y consiguiendo arrebatar Williams ese lugar por segunda carrera consecutiva a un Ferrari, que dio síntomas de involución y pareció estar sufriendo un proceso inverso al de la escudería de Grove.

La actuación de los españoles tuvo sensaciones contrapuestas. Fernando Alonso se vio obligado a abandonar en la primera vuelta tras un toque con Kimi Räikkönen que dejó a los dos coches fuera de carrera. Tampoco le fueron bien las cosas a Carlos Sainz, que sufrió un mal pit stop y problemas en su motor Renault que le obligaron a terminar la carrera de manera prematura. Quien sí tuvo una gran actuación fue Roberto Merhi, que logró su mejor resultado en la Fórmula 1 tras finalizar 14º en una carrera con un nuevo desastre de McLaren-Honda, que tras el abandono de Jenson Button por problemas mecánicos vio cómo volvía a terminar la carrera sin ninguno de los dos monoplazas sobre la pista.

La sonrisa británica y española

La novena prueba de la temporada era una de las carreras marcadas en rojo por Lewis Hamilton. No sólo por no haber conseguido la victoria en Austria, sino por ser el Gran Premio de Gran Bretaña, la carrera de ‘casa’ para el bicampeón del mundo. El británico quería ganar ante su público y volver a poner tierra de por medio en el mundial, pero su comienzo no fue el más acertado y cometió varios errores que permitieron a Nico Rosberg liderar los entrenamientos del viernes. Hamilton mejoró su concentración el sábado y lideró los Libres 3 y la sesión de clasificación, logrando una nueva ‘pole position’ y volviendo a comenzar la carrera desde la primera posición. La sesión de clasificación también sirvió para confirmar esta tendencia ascendente de Williams, que copó la segunda fila de la parrilla y relegó a Ferrari a la tercera. Carlos Sainz volvió a entrar en la Q3 y consiguió el octavo mejor tiempo, mientras que los otros dos españoles quedaron eliminados en la Q1.

El domingo tuvo lugar la mejor carrera de la temporada hasta ese momento. Los Williams sorprendieron a los Mercedes en la salida y se colocaron en primera y segunda posición, situación que se mantuvo hasta la mitad de la carrera. A partir de ese momento aparecieron dos factores clave para el resultado final: la estrategia y la lluvia. La escudería británica volvió a elegir una estrategia equivocada con la aparición de la lluvia, lo que permitió a los dos monoplazas de la estrella volver a situarse en las dos primeras posiciones, con un Lewis Hamilton imparable sobre la lluvia que se encaminó hacia una nueva victoria de la temporada. Ferrari sí estuvo acertado en la estrategia y propició que Sebastian Vettel ocupara el tercer cajón del podio y sumara un tercer puesto con el que no contaba. Los Williams tuvieron que conformarse con la cuarta y la quinta posición, protagonizando la nota negativa en lo que a equipos se refiere, mientras que Force India logró situar a sus dos monoplazas en los puntos con la séptima posición de Hülkenberg y la novena plaza de Sergio Pérez.

En cuanto a los españoles, dos vivieron su mejor carrera de la temporada y otro tuvo que abandonar. El que se vio obligado a terminar el gran premio de forma prematura fue Carlos Sainz, que de nuevo volvió a sufrir los problemas de rendimiento y fiabilidad del motor Renault y dejó la carrera a falta de 20 vueltas para el final. Por su parte, Fernando Alonso consiguió su primer punto del año en la tercera carrera que finalizaba tras pelearse con el coche y con las condiciones de la pista y terminar en una meritoria décima posición. Por último, Roberto Merhi, que logró su mejor resultado del año tras llevar el Manor a la 12ª posición y remontar 20 segundos de desventaja con su compañero de equipo en las últimas 15 vueltas, demostrando su habilidad sobre el asfalto mojado y, sobre todo, que tiene aptitud y actitud para ser piloto de Fórmula 1.

Carrerón mirando al cielo

La última carrera de la temporada 2015 de Fórmula 1 antes del parón estival se disputó en Hungría. El circuito de Hungaroring es especial para algunos de los pilotos que conforman la parrilla actual de la máxima categoría del automovilismo, y es una carrera que siempre suele deparar espectáculo y emociones a partes iguales. Y este año no iba a ser menos, y el Gran Premio de Hungría se convirtió en la mejor carrera de la temporada y de los últimos años. Sin embargo, y pese al espéctaculo sucedido sobre la pista, la carrera magiar también fue la más triste de la temporada. Jules Bianchi, que llevaba nueve meses luchando por su vida tras su accidente en Suzuka en 2014, falleció el fin de semana anterior, y desde ese momento todos los pilotos pensaron en ofrecer el mayor espectáculo posible para honrar la memoria del joven piloto francés.

El comienzo fue similar a la del resto de carreras celebradas, con Lewis Hamilton dominando con autoridad las tres sesiones de entrenamientos libres y la sesión de clasificación. Ferrari, Williams y Red Bull habían demostrado un buen ritmo en las tandas largas y se postulaban como candidatos al tercer cajón del podio. Como venía siendo habitual, los Mercedes realizaron una mala salida y se vieron superados por los dos Ferrari. Nico Rosberg también adelantó a Lewis Hamilton y el británico, en un intento imposible de adelantar a su compañero, se salió de pista y se reincorporó a la carrera en la décima posición. El líder del campeonato comenzó así una remontada que le llevó hasta la cuarta posición y a poner en apuros el tercer lugar de Rosberg. Sin embargo, un accidente de Nico Hülkenberg provocó la salida del ‘safety-car’ y la enorme distancia de Sebastian Vettel quedó reducida, por lo que los Mercedes volvieron a postularse como favoritos para el triunfo.

El ímpetu de Lewis Hamilton le jugó una mala salida en la reanudación de la carrera y, en su intento de adelantar a Daniel Ricciardo, se tocó con el Red Bull del australiano y tuvo que entrar a boxes a cambiar el alerón, viéndose relegado a la 13ª posición. Por delante, Rosberg adelantó a Räikkönen y se colocaba segundo, por lo que en ese momento se colocaba primero en el Mundial de pilotos. El alemán de Mercedes se mostraba exultante y se encaminaba hacia la primera posición de Vettel, pero entonces Ricciardo, en un intento a la desesperada, impactó contra el monoplaza plateado y pinchó el neumático trasero, por lo que el subcampeón del mundo tuvo muchas dificultades para llegar a su garaje y cambiar el neumático. El germano se reincorporó por detrás de su compañero, mientras que Ricciardo, que también tuvo que entrar, mantuvo la tercera plaza.

En segunda posición se había colocado un sorprendente Kvyat, que se mantuvo en pista y aprovechó el carrusel de incidentes y sanciones para finalizar en el segundo cajón del podio y lograr el primer podio de su carrera y el primero de Red Bull esta temporada. El resultado para la escudería de la bebida energética fue espectacular, con Daniel Ricciardo subiendo también al podio por primera vez esta temporada en la excelente victoria de Sebastian Vettel, la primera de su carrera en el circuito de Hungaroring. En cuarto lugar finalizó Max Verstappen, que rozó el podio y logró el mejor resultado de Toro Rosso desde el Gran Premio de Brasil 2008.

Fernando Alonso fue uno de los grandes protagonistas de esta carrera. El circuito magiar sigue siendo talismán para el asturiano, que partía 15º y logró terminar en quinta posición tras una nueva lección de pilotaje y aprovechando los errores del resto de pilotos. El piloto de McLaren-Honda lograba el mejor resultado de la escudería de Woking esta temporada, pero no fue la única alegría en el equipo británico, que también puntuó gracias al noveno puesto de Jenson Button. Roberto Merhi también logró terminar la carrera, esta vez en 15ª posición, mientras que Carlos Sainz se vio una vez más obligado a abandonar por problemas mecánicos. Otros que abandonaron fue los dos monoplazas de Force India, que dejaban ambos de manera prematura el gran premio por primera vez este año.

Pero la nota más destacada de la carrera la protagonizaron los hombres de Mercedes. La escudería alemana vivió un gran premio para olvidar y finalizaron en sexta y octava posición, con Lewis Hamilton aumentando su ventaja en el Mundial de pilotos con respecto a Nico Rosberg. Es la primera vez que un coche de Mercedes no se sube al podio desde el Gran Premio de Brasil 2013, lo que muestra la perfección el dominio del equipo germano desde la temporada pasada. Sin duda, Jules Bianchi no pudo recibir un mejor homenaje de parte de sus compañeros con esta carrera loca que tuvo todos los ingredientes necesarios para volver a enganchar a los aficionados.

Esta primera parte de la temporada 2015 de Fórmula 1 ha demostrado que, pese al dominio de Mercedes, este deporte puede ser divertido y siempre pueden suceder cosas imprevisibles que añadan esa emoción necesaria para recuperar parte del crédito perdido en los últimos años. Definitivamente, la diversión ha vuelto al ‘Gran Circo’.

Clasificación Mundial de Pilotos

Piloto Equipo AUS MAL CHI BAR ESP MON CAN AUT GBR HUN Puntos totales
Lewis Hamilton Mercedes AMG 25 18 25 25 18 15 25 18 25 8 202
Nico Rosberg Mercedes AMG 18 15 18 15 25 25 18 25 18 4 181
Sebastian Vettel Scuderia Ferrari 15 25 15 10 15 18 10 12 15 25 160
Valtteri Bottas Williams Racing - 10 8 12 12 0 15 10 10 0 77
Kimi Räikkönen Scuderia Ferrari - 12 12 18 10 8 12 - 4 - 76
Felipe Massa Williams Racing 12 8 10 1 8 0 8 15 12 0 74
Daniel Ricciardo Red Bull Racing 8 1 2 8 6 10 0 1 - 15 51
Daniil Kvyat Red Bull Racing - 2 - 2 1 12 2 0 8 18 45
Nico Hülkenberg Force India 6 0 - 0 0 0 4 8 6 - 24
Romain Grosjean Lotus-Mercedes - 0 6 6 4 0 1 - - 6 23
Max Verstappen Scuderia Toro Rosso - 6 - - 0 - 0 4 - 12 22
Felipe Nasr Sauber 10 0 4 0 0 2 0 0 - 0 16
Sergio Pérez Force India 1 0 0 4 0 6 0 2 2 - 15
Pastor Maldonado Lotus-Mercedes - - - 0 0 - 6 6 - 0 12
Fernando Alonso McLaren-Honda - - 0 0 0 - - - 1 10 11
Carlos Sainz Scuderia Toro Rosso 2 4 0 - 2 1 0 - - - 9
Jenson Button McLaren-Honda 0 - 0 - 0 4 - - - 2 6
Marcus Ericsson Sauber 4 - 1 0 0 0 0 0 0 1 6
Roberto Merhi Manor - 0 0 0 0 0 - 0 0 0 0
Will Stevens Manor - - 0 0 0 0 0 - 0 - 0

Clasificación Mundial de Constructores

Escudería AUS MAL CHI BAR ESP MON CAN AUT GBR HUN Puntos totales
Mercedes AMG 43 33 43 40 43 40 43 43 43 12 383
Scuderia Ferrari 15 37 27 28 25 26 22 12 19 25 236
Williams Racing 12 18 18 13 20 0 23 25 22 0 151
Red Bull Racing 8 3 2 10 7 22 2 1 8 33 96
Force India 7 0 0 4 0 6 4 10 8 0 39
Lotus-Mercedes 0 0 6 6 4 0 7 6 0 6 35
Scuderia Toro Rosso 2 10 0 0 2 1 0 4 0 12 31
Sauber 14 0 5 0 0 2 0 0 0 1 22
McLaren-Honda 0 0 0 0 0 4 0 0 1 12 17
Manor - 0 0 0 0 0 0 0 0 0 0