La última carrera en territorio europeo de 2015 marca el comienzo del fin de una temporada en la que, salvo sorpresa mayúscula, dos hombres van a luchar por el Campeonato del Mundo: Lewis Hamilton y Nico Rosberg. El alemán está necesitado de un buen resultado que corte la extraordinaria racha de su compañero de equipo, que va lanzado a por su tercer título. Nico necesita un triunfo en Monza, circuito en el que el año pasado fue segundo tras la polémica carrera de Spa en la que ambos Mercedes colisionaron.

Los entrenamientos libres no han comenzado bien para Nico, que se ha visto por detrás de Hamilton en la primera sesión y en la segunda. Muy a destacar la diferencia de casi medio segundo que ha logrado el británico respecto del alemán con el neumático medio. Mercedes rinde claramente por encima del resto, más si cabe en este circuito que tan bien se adapta a su monoplaza, pero Nico necesita ganar pronto al otro Mercedes si quiere seguir dentro de la lucha por el Mundial.

"Es genial estar en Monza, los tifosi son increíbles. Hoy estuvo todo muy justo con Lewis. "Nuestro coche es increíble aquí y además el poder del motor Mercedes nos empuja hacia delante. Parece que va a ser una dura pelea entre nosotros dos", declaró el piloto germano. 

Según ha explicado Rosberg al bajarse del monoplaza, pierde tres décimas de segundo respecto a Hamilton en la curva de la Parabólica. El alemán ha señalado que esta noche estudiará la trazada de su compañero para poder ir más rápido: "Son las dos últimas curvas, ahí pierdo tres décimas. Es mucho. No sé qué hace Hamilton ahí, tengo que mirar la cámara on-board de su coche y ver qué línea de carrera sigue. A ver si puedo copiarle un poco, pero también entender qué hago bien en el resto de curvas para no cambiar nada ahí".