Fin de semana atípico para Roberto Merhi y el equipo Manor. Aunque siguen rodando en sus posiciones habituales, las dos últimas, y no tienen ninguna opción de competir con el resto de participantes de tú a tú, las peculiares circunstancias que rodean a este Gran Premio han hecho de los hombres de Manor simples accidentales protagonistas.
Y es que Roberto Merhi, pese a no poder superar a su compañero de equipo Will Stevens, partirá más adelante que nunca en la salida. Las sanciones por diversos cambios de piezas a los pilotos de Red Bull, Toro Rosso y McLaren-Honda han hecho ganar posiciones a los modestos monoplazas de Manor. De esta forma, Merhi saldrá desde una sorprendente 14ª plaza en el circuito más veloz del mundo.
El castellonense, de todas formas, no se mostró especialmente satisfecho tras la clasificación: "Sabíamos a dónde veníamos. Monza es un circuito con rectas muy largas y aquí es imposible hacer milagros. Si en Bélgica no se podían hacer, aquí menos", comenta el piloto español. "La vuelta ha sido realmente buena, ha sido una buena jornada y quedar tan cerca de Stevens en un trazado que era el peor para nosotros de todo el año no está mal", afirma Merhi.
Con su habitual sonrisa de oreja a oreja, Merhi cree que es posible cumplir los objetivos en la carrera de mañana: "La diferencia es muy pequeña y las tandas largas de ayer fueron bastante bien, así que puede ser una carrera positiva". Sobre cómo se sentirá con dos campeones del mundo y dos Red Bull detrás, el castellonense se lo toma con humor: "El objetivo mañana es que no nos pase nadie".
El análisis de la carrera por parte de Merhi no tiene muchas variaciones a las del resto del año. "Hay que intentar hacer una buena carrera, no destrozar las ruedas e intentar acabar lo más adelante posible. Intentaré adelantar a Stevens en la salida, que en Spa no pude hacerlo y a partir de ahí intercalar coches entre él y yo para evitar que pueda meter el DRS. Creo que ese debe ser el objetivo para nosotros", asegura el piloto de Manor.