Mclaren añadira otro Gran Premio más a la lista negra, esta vez el de Italia. A pesar de haber estado por algunos momentos dentro del Top 10 en la trampa de velocidad, ni Fernando Alonso ni Jenson Button han conseguido pasar nuevamente la Q1, por lo que les esperan unas 53 vueltas complicadas en las que estar en los puntos será una quimera, así que con finalizar la carrera estarán más que satisfechos en la escudería de Woking.
El campeón de 2005 y 2006 asegura que aunque hubieran pasado a la segunda ronda de clasificación, no tenían los medios suficientes para participar en ella, al igual que en el Gran Premio de Bélgica, aunque las sanciones que han perjudicado a los de Woking este fin de semana han sido menores y tendrán batalla con los Red Bull que también tienen penalización: "Aunque hubiera llegado a Q2, no habría salido a pista. No teníamos ni neumáticos ni kilómetros para hacer así que ha sido como en Spa, hacer una vuelta en la Q1, ver como va el coche, asumir las penalizaciones que tengamos por los cambios de motor y a ver mañana lo que podemos hacer sabiendo que será como en Spa y rodaremos en la parte de atrás".
Alonso afirma que quieren volver a hacer la salida producida en Spa, una salida en la que ganó ocho posiciones poco después de trazar la primera curva, La Source. Pero a pesar de ese comienzo la carrera, no fue capaz de mantener ese duodécimo puesto por la escasa potencia que contiene el MP4-30, aunque la situación en el trazado italiano no será distinta que en el belga: "Aquí en Italia se ha tratado de asumir las penalizaciones que teníamos por el motor y ver mañana lo que podemos hacer saliendo desde atrás, confiando en poder hacer la salida de Bélgica. Las posiciones que ganemos en la primera curva las vamos a perder en la primera vuelta por lo que no hay mucha diferencia pero sí podemos aprender sobre ellas y sobre el coche".
El asturiano declara que Monza, última prueba en país europeo, será el clavario final por el que pasará Mclaren y que desde Singapur intentarán aspirar a objetivos más importantes que hasta ahora, era algo improbable: "Sabemos de aquí a final de año las carreras que nos van a ir un poco mejor y un poco mejor significa ojalá rozar los puntos el domingo y entrar en la Q2. Carreras que nos irán un poquito peor y estaremos en la parte trasera. Poco va a cambiar. No metemos el dedo en nuestra propia herida, sabemos cuál es la situación y lo que estamos haciendo es trabajar, trabajar y trabajar lo más en silencio y de la forma más profesional posible".
"Tenemos 6 ruedas de prensa cada día y es un poco repetitivo, principalmente cuando te preguntan si hay mejoras en el coche, que estás último y si ves alguna mejora. Pues no, pero tampoco estaba prevista. Cuando estén previstas mejoras, ojalá las veamos” finalizaba el compañero de Jenson Button.