Lewis Hamilton no ha podido puntuar en el Gran Premio de Singapur. El piloto inglés ha tenido que abandonar en la vuelta 24 de carrera debido a problemas mecánicos en su monoplaza. La retirada ha supuesto un trago amargo para el líder del mundial que ha "perdido algunos puntos" pero reconoce que "aún queda un largo camino".

En el momento de su abandono Hamilton reconocía que "todo estaba llendo muy bien". "Estaba haciendo lo máximo y estábamos en ritmo para poder ganar", reconocía Hamilton tras tener que aparcar su monoplaza.

A pesar de la pérdida de puntos el piloto inglés reconocía que retirarse de la carrera "era lo mejor" para poder "salvar el motor". Ahora Hamilton confía en trabajar duro para saber que ocurrió exactamente y no se muestra preocupado por "perder este motor".

Lewis se centra ya en "volver a luchar en Suzuka" ya que la cuarta plaza de Rosberg le ha acercado en el mundial a tan solo 41 puntos. Sin duda, la de Japón será una nueva batalla en la que los Mercedes estarán en cabeza luchando por el campeonato.

Por otra parte, el jefe de equipo de Mercedes, Toto Wolff reconocía que la cuarta plaza de Rosberg era "a lo máximo que se podía aspirar". En cuanto a los problemas de Hamilton comentaba que "se ha intentado resolver la pérdida de potencia con el piloto en pista, pero ha sido imposible y el abandono del coche era lo mejor".

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Wolff también coincidía con Hamilton en que "el próximo fin de semana en Suzuka, Mercedes volverá con más fuerza". Por último, el director ejecuivo de la escudería, Paddy Lowe, insistía en los problemas técnicos de Hamilton y en que "no ha sido posible solucionarlos durante la carrera".

Así pues, un mal fin de semana para el equipo Mercedes, que tan solo ha conseguido llevarse 12 puntos para el Mundial de Constructores gracias a la cuarta plaza de Nico Rosberg. Sin embargo, la escudería al completo se muestra optimista para volver a dominar en la carrera del próximo fin de semana en el circuito de Suzuka de Japón.