Uno de los grandes referentes del paddock, Alain Prost, ha salido a defender la entrada de los motores híbridos en el gran circo. El embajador de la marca Renault ha querido adoptar el papel de intermediario entre la polémica que ronda las cabezas de los aficionados y la innovación de la que se alimenta la categoría reina: "Sé que a muchos aficionados les gustaría que fuera de ese modo, pero sería una mala señal. La Fórmula 1 tiene que ser un escaparate para las nuevas tecnologías. Tal vez, un compromiso entre lo que los aficionados quieren y lo que necesita la Fórmula 1 sería posible".

A lo largo de estas mismas declaraciones, recogidas por Auto Motor und Sport, también reconoció que, a su juicio, la nueva normativa no solo trae ventajas. El francés cree que sería una buena idea dar una mayor libertad a los motoristas a la hora de evolucionar sus maquinas: "En el pasado, si tenías un problema, en una semana podías cambiarlo todo y la semana siguiente lo probabas en el circuito de pruebas. Ahora hay demasiadas restricciones".

"Vayamos unos cuantos años atrás: los grandes constructores tenían todos los mismos motores, es por eso que decían 'pararemos si no podemos mostrar competencia en el mercado de la automoción'. Todos quieren demostrar que son mejores que la competencia", apuntó el tretacampeón, recordando a algunas marcas sus propias palabras.

Pero por otra parte, ha explicado que esto no quiere decir que las flechas plateadas no se merezcan la superioridad con la que han machacado a sus rivales durante los dos últimos años: "Hay muchas quejas respecto a la dominancia de Mercedes, pero seamos honestos, simplemente han hecho un trabajo magnífico. Merecen ganar. A veces, en la Fórmula 1, debes aceptar que otros pueden hacer un trabajo mejor que el tuyo".