Haas ha empezado con esperanza su primera temporada en Fórmula 1. La pretemporada ha sido positiva, ya que, aunque no han aparecido en la parte alta de la tabla de tiempos en Montmeló, la actuación ha sido bastante notable para ser un recién llegado, algo que nunca es fácil, menos aún cuando el equipo viene de Estados Unidos, un lugar sin apenas tradición en el Gran Circo. De hecho, hace bastante tiempo que no hay ningún piloto ni escudería de este país que haya logrado algo especialmente destacable en Fórmula 1. Por ello, el reto será doble. 

Uno de sus dos pilotos, Esteban Gutiérrez, que formará pareja con Romain Grosjean a bordo del denominado VF-16, se ha mostrado esperanzado con el monoplaza del equipo americano. El mexicano, expiloto de Sauber y que la temporada pasada fue hombre reserva de Ferrari, espera que las buenas sensaciones se conviertan en resultados: "Me siento cómodo, disfruto pilotándolo", ha comentado Gutiérrez. "Para ser honesto, espero que sea tan competitivo como se siente. Tenemos que ser muy cuidadosos con nuestras expectativas, tenemos que trabajar muy duro para poner el coche en el siguiente nivel. Fue muy importante terminar (la pretemporada) con un buen sentimiento”.

Haas fue uno de los equipos que menos vueltas dio a lo largo de las ocho jornadas de test disputadas en Montmeló a lo largo de las dos últimas semanas. No obstante, Gutiérrez cree, que pese a ello, consiguieron realizar numerosos avances de cara al primer gran premio de la temporada, que se disputará en Melbourne el fin de semana del 18 al 20 de marzo: "No logramos experimentar mucho con el coche, pero fuimos capaces de resolver los problemas que se dieron y los objetivos que teníamos con el coche, así que esto es un buen paso en cuanto a dirección e intentaremos dar nuestro máximo para ser competitivos en Melbourne", ha concluido.