A la temporada 2016 tan solo le quedan unas pocas horas para que dé comienzo y los equipos ya van pensando en las mejoras que podrán introducir en los próximos Grandes Premios. En una constante batalla por la evolución de sus chasis, parece ser que el diseño más novedoso visto hasta el momento se lo lleva Williams, que han pasado por fin los “crash-test” de su nuevo alerón corto, tal como han podido confirmar en Melbourne.

Pero no ha sido un camino fácil para los de Grove. Así lo ha reconocido Pat Symonds, director técnico del equipo, diciendo que le ha costado la friolera cantidad  de 10 o 12 diseños distintos para poder pasar las complicadas pruebas de seguridad: "Necesitamos entre diez y 12 intentos". Pese el tiempo invertido, el equipo británico no se arrepienten del trabajo empleado, ya que según han declarado ha sido un gran paso realizado para poder seguir creciendo: "Es uno de los mayores pasos hacia delante que hemos dado en los últimos años".

El equipo se encuentra con dos graves problemas. El primero será la puesta en escena de esta pieza que ya está en proceso de fabricación y empaquetaje para la cita que debutará, que será en la cita de Bahrein, siendo un poco tardía respecto al inicio del mundial. El segundo y más importante, dentro de lo que cabe, serán las unidades disponibles de este elemento. Resulta que tan solo dispondrán de una unidad para ambos pilotos, enfrentándose a decidir que piloto la montará. Pero la escudería parece tener ya un criterio para esto y el codiciado alerón será para el piloto que más puntos sume en la primera cita del calendario:  "El piloto que salga de Australia con más puntos", ha aclarado Felipe Massa respecto al asunto, siendo un aliciente para la alineación extra, que se suma al inicio del mundial.