Tras una sesión de clasificación un tanto extraña, ya que se ha visto por primera vez el nuevo sistema implantado, Carlos Sainz ha puesto en evidencia que Toro Rosso es el tercer equipo de la parrilla ahora mismo. Su séptima posición junto con la quinta lograda por Verstappen confirman las buenas sensaciones de los de Faenza. 

El madrileño destaca que el tiempo marcado en Q2 le hubiese servido para ser quinto en la última ronda de la clasificación. Aun así, se muestra satisfecho con la jornada del sábado y para mañana su objetivo es acabar en puntos: "Hemos mejorado la posición del año pasado, ese era el objetivo. La clasificación ha sido bastante caótica, no sabía muy bien lo que estaba pasando, si valía mi vuelta. Hemos estado en momentos tensos durante la Q1 y la Q2. Lo importante es que la vuelta de Q2 me hubiera servido para ser quinto, una pena no haberla repetido en Q3", añade. 

Sobre el nuevo sistema de clasificación, Carlos Sainz ha señalado que ha sido 'caótico' pero que este nueva forma de clasificar no debe de ser del agrado suyo, sino de los aficionados a la Fórmula 1: "Entre que no hay radio y no se entiende el sistema de clasificación, es entre caos y frustración. No sé si ha gustado a los aficionados y a las televisiones. Es raro. No me tiene que gustar. A los que les tiene que gustar son a los que lo ven por televisión. Puede que el formato no esté bien definido o no sea perfecto para la Q3 o los ocho primeros", destaca. 

Para mañana domingo, el madrileño se centra en conseguir el máximo de puntos posibles, ya que según él, los puntos son posibles: "Los puntos son muy posibles mañana. Habrá que hacer una buena salida y luego ya se verá". Con esta séptima posición, Carlos Sainz supera la lograda el año pasado, clasificando el octavo mejor tiempo aunque luego salió en la misma posición que en este año. Mañana, cuando se apague el semáforo en Albert Park, comenzará la segunda temporada de Sainz en Fórmula 1