Los sábados son más divertidos que los domingos. Esta es una afirmación que realiza un gran número de personas salvo los amantes del motor. Para el que le gusta la velocidad, el sábado es un día bueno y divertido, pero el momento de la verdad se realiza antes de los apáticos lunes. El séptimo día de la semana es el del descanso y el de las carreras. El domingo de Bahrein fue muy bueno, probablemente sería uno de los mejores domingos del pasado año, sin embargo queda dividido e incluso multiplicado por cero gracias al atentado al espectáculo que ha hecho la FIA con el nuevo y maravilloso sistema de clasificación.
Póngase el casco, el mono, los guantes y súbase al Fórmula 1. Arránquelo y vuélvelo a apagar. Bájese del coche y realice 100 metros lisos, el primer piloto que con todo puesto toque la pared saldrá en primera posición y así sucesivamente. Bienvenidos a la reunión de la FIA para decidir el nuevo modo de clasificación de la Fórmula 1 2016.
Probablemente esta idea sea una exageración, pero visto como han transcurrido estas dos primeras qualys invita a pensar que esta disparatada proposición no se haya puesto sobre la mesa aquel fatídico día en el que se decidió ahogar y asesinar la emoción de los sábados. Cierto es que la cosa va a mejor y es que esta vez tan sólo sobraron seis minutos de la Q2 y los pilotos tuvieron tiempo de irse a la ducha unos minutitos antes. En la Q3 también sigue avanzando la cosa a pasos agigantados, en la noche de Bahrein el "gritito" de Lewis Hamilton celebrando su pole número 51 se escuchó 3 minutos antes de que se diese el punto y final. Pero un hombre iluminó un día oscuro. Su nombre es Nico Hulkenberg y es que cuando todos los coches estaban en los garajes y los pilotos ya concediendo las primeras entrevistas, con todos los focos y la pista para él marcó un buen registro y salvó el corte de este nuevo sistema. Sin lugar a duda el gran héroe del fin de semana.
Antes los pilotos luchaban con el crono y ahora lo hacen con el reglamento. En la nueva reunión de la FIA se deberá de decidir, si quieren hacer que los amantes de las cuatro ruedas vuelvan a disfrutar de los sábados. Los domingos suman, los sábados dividen e incluso anulan.