En esta sesión de clasificación se preveía que Carlos Sainz demostrase hasta donde podía llegar con su STR11 exprimido al máximo, pero el tráfico y el tiempo del piloto local le han dejado fuera de Q3, donde su compañero sí ha entrado.

El madrileño ha sido sincero, y a diferencia de otras ocasiones, reconoce que hoy tenían ritmo suficiente como para entrar en Q3 pero no ha sido capaz de lograrlo: “No ha habido ningún problema en específico. El ritmo nos sobraba para estar en la Q3, pero me he encontrado a Kvyat en el último sector. Cuando te pasa algo así, no puedes hacer nada”, señalaba el español con resignación.

Aun así, el pesimismo no es sinónimo de Carlos Sainz. Al igual que hizo el año pasado, tras una sesión de clasificación complicada por el aparatoso accidente, el domingo se reponía y aunque abandonó por problemas con sus Pirelli, hizo una de las mejores carreras del año. Y para esta temporada no será diferente, Sainz destacaba a los medios que han ido bien durante todo el fin de semana  y por tanto mañana harán una buena carrera: “Las sensaciones han sido muy positivas durante todo el fin de semana. Hemos ido muy rápidos, así que estoy confiado de cara a mañana, pero me da rabia porque el coche estaba para la Q3, sabemos que para nosotros era importante pasar y con todo este impedimento del tráfico con Kvyat en la última curva no hemos pasado. Es así de simple”, comentaba.

Para mañana la estrategia será una de las claves de la carrera gracias al peculiar asfalto que presenta el circuito ruso. Carlos Sainz lo sabe, pero no fija su objetivo en Red Bull, ya que reconoce que en carrera los de Milton Keynes están por encima: “Estamos cerca de Red Bull, sobre todo en clasificación, aunque en carrera van mejor que nosotros. Pero con Force India y el resto de equipos una buena oportunidad mañana”, sentenciaba.