Las nuevas generaciones de pilotos siguen siendo uno de los focos de atención esta temporada y Carlos Sainz, que a sus 21 años apunta maneras, sigue cosechando buenas críticas en su equipo. La situación que viven los pilotos como él, novatos y en permanentemente en la cuerda floja, provoca siempre la inseguridad de si podrán continuar conduciendo, en su escudería actual o en otra, el año siguiente.

En el caso de Sainz, además, la mala suerte y las averías enturbian ocasionalmente una temporada que, por otra parte, está sacando a relucir sus mejores aptitudes. Prueba de ello es el meritorio octavo puesto que consiguió este mismo fin de semana en el Gran Premio de Austria, con remontada incluida.

El jefe de su equipo, Franz Tost, alabó la actuación de Carlos tras contemplar semejante carrera. “Si le das un coche bueno, estaría cada fin de semana en los puntos”, dijo a Mundo Deportivo. Por ello, la noticia de su renovación con Toro Rosso ya parecía algo que iba a llegar tarde o temprano. Tost apuntó, además, que mira con optimismo al futuro: “Estoy convencido de que el año que viene tendremos un coche competitivo con el motor Renault y la tecnología de Red Bull”, por lo que espera que Sainz disfrute de un buen futuro.

“Le han renovado pronto porque es una forma de hacer que el equipo se mantenga concentrado en el trabajo del año que viene”, declaró, haciendo referencia una vez más al proyecto de futuro que tienen con el piloto. Sainz y su compañero, Max Verstappen, forman una de las duplas de jóvenes pilotos más codiciadas de la parrilla, por lo que Red Bull no ha perdido el tiempo y ya ha empezado a blindarlos. “Red Bull ha ejercido la opción a mantenerle y es porque no quiere perderle”, concluye Tost.