Muchas son las voces críticas respecto al rumbo que ha tomado la Fórmula 1 en los últimos años, con un interés por parte de los aficionados en decadencia. Las causas, entre otras, bien podrían ser los numerosos cambios en los monoplazas, un reglamento inconsistente con idas y venidas o una realidad: la tiranía temporada tras temporada de un solo equipo. Prácticamente en todos últimos años (desde 2009) hubo un equipo que casi siempre copaba las primeras posiciones: Brawn GP, Red Bull Racing y, ahora, Mercedes AMG consiguieron abrir una brecha considerable respecto a sus rivales.

En la presente temporada, con 12 Grandes Premios disputados hasta la fecha, el equipo de Brackley ha logrado la nada desdeñable cifra de 11 victorias. Solo una se escapó, en el Circuit de Barcelona-Catalunya. Lewis Hamilton es el que más triunfos ha conseguido, con un total de 6, por los 5 de su compañero Nico Rosberg, quien inició la temporada venciendo en las cuatro primeras citas del Mundial pero cuyo rendimiento ha ido descendiendo hasta ser alcanzado por piloto el inglés.

Los mayores rivales están en casa

En efecto, los mayores rivales de Mercedes están en casa, y no son otros que sus propios pilotos. La suma de rendimiento y fiabilidad de los monoplazas de Brackley es tan superior al resto que todo parece indicar que solo ellos mismos pueden evitar alzarse con la victoria en un Gran Premio.

La prueba de ello la encontramos en el hecho de que solo en el Gran Premio de España no ganó un Mercedes, y el motivo principal no fue otro que la colisión entre Hamilton y Rosberg en la primera vuelta cuando luchaban por el liderato de la carrera, con el consecuente abandono de ambos. La tensión existente entre los dos pilotos es evidente, toda vez que se saben rivales el uno del otro en la lucha por el Mundial. Tanto es así que un nuevo episodio en el Gran Premio de Austria estuvo a punto de ocasionar las mismas consecuencias que en Montmeló. Esta vez en la última vuelta, Rosberg sacó de pista a Hamilton, quien al reincorporarse al trazado impactó con el alemán, ocasionándole daños en su alerón delantero. Por fortuna para la escudería de la estrella, ambos pilotos pudieron finalizar la carrera, con victoria para el británico y tercer puesto (sanción por el incidente incluida) para Nico.

Hamilton y ROsberg colisionan en el GP de España (Foto: Getty Images).
Hamilton y Rosberg colisionan en el GP de España (Foto: Getty Images).

Sin embargo, el director de Mercedes AMG, Toto Wolff, no quiere ver más incidentes de este tipo entre ellos, llegando a definirlos como “agotadores”. De hecho, ya lo advirtió: “les hemos dado un aviso y es el último”, expresó tras la cita austriaca en clara referencia a Rosberg y Hamilton. Nueve son los Grandes Premios que quedan por disputarse, donde los pilotos de las flechas plateadas tendrán ocasión muy probablemente de volver a encontrarse en una situación similar. En esa ocasión lo harán con todas las advertencias agotadas, por lo que será interesante saber dónde fijan los límites ambos contendientes al título.

Red Bull se acerca pero aún no es suficiente

Si hay un equipo que parece poder hacerle sombra a Mercedes ese es Red Bull, toda vez que el rendimiento de Ferrari se ha ido diluyendo hasta el punto de verse superado por la escudería austríaca. Red Bull, con Daniel Ricciardo y Max Verstappen al volante de sus dos monoplazas (este último tras sustituir a Daniil Kvyat desde el GP de España, donde precisamente logró la victoria tras el incidente entre Rosberg y Hamilton), se encuentra actualmente en una fase ascendente donde en los últimos cuatro Grandes Premios disputados ha logrado meter al menos a un piloto en el cajón del podio, mientras que en el último disputado en Alemania consiguieron la segunda y tercera posición.

No solo en cuanto a la posición final se nota la mejoría del equipo de Dietrich Mateschitz, sino también en los tiempos cada vez más cercanos a los monoplazas de Mercedes. No obstante, parece que aún faltan algunas décimas por exprimir al RB12 para estar a la altura de las flechas plateadas y conseguir arrebatarles alguna victoria luchando de tú a tú.

43 victorias en 50 Grandes Premios para Mercedes

Una vez analizada la situación de la vigente temporada, es preciso advertir que esta espléndida racha de la escudería germana no es fruto de la casualidad pues, desde el año 2014, Mercedes ha logrado cruzar la línea de meta con un monoplaza suyo en primer lugar en 43 ocasiones. En el tiempo comprendido entre el GP de Australia del referido año hasta el último Gran Premio disputado en Alemania hace casi 20 días, tan solo siete victorias se les resistieron a las flechas plateadas. 16 triunfos de 19 en 2014 y 2015, y 11 de 12 hasta el momento en la presente temporada, colocan a Mercedes con un total de 43, por encima ya incluso de Red Bull Racing en su época dominante (2010-2013), cuando el equipo de las bebidas energéticas consiguió 41 victorias en 77 citas.

2017, la gran incógnita

Sin embargo, existe la posibilidad de que este dominio abrumador de Mercedes AMG llegue a su fin esta temporada como consecuencia de los cambios en el reglamento que se introducirán el próximo año en busca de una mayor igualdad y espectáculo. Entre estos cambios se encuentran unos neumáticos más anchos, un aumento de la carga aerodinámica y en lo que se refiere a la unidad de potencia, se eliminará el sistema de tokens.

En Mercedes son conscientes de que su posición puede verse en peligro con estas modificaciones en el reglamento. Tanto es así, que el propio Lewis Hamilton lo ha advertido recientemente: “Si este es el último año (del dominio de Mercedes), quiero asegurarme de aprovecharlo”.

Pese a ello, aún restan nueve Grandes Premios para la conclusión de la presente temporada y el inicio de la siguiente, donde podremos despejar esta incógnita. De momento, el futuro más inmediato se encuentra en el circuito de Spa-Francorchamps, escenario que el próximo fin de semana acogerá, probablemente, un nuevo duelo entre las dos ‘estrellas’ de Mercedes.