A principios de esta temporada, los rumores sobre la desaparición del trazado italiano saltaron y todo apuntaba a que Imola relevaría al circuito actual. Lo cierto es que el magnate de la Fórmula 1 ofreció al trazado de San Marino volver al calendario. Sin embargo, el presidente del ACI, Angelo Sticchi Damiani, defendió la continuidad de Monza. Sticchi aseguró hace un mes que los problemas políticos en la ciudad italiana ya finalizaron. Tanto éste como Ecclestone llegaron a un acuerdo durante el Gran Premio de Mónaco, donde se dieron la mano, pero ahora falta que dicho consenso se firme, y todo apunta a que se realice el próximo fin de semana en Italia.
Por ello, el director ejecutivo de la Fórmula 1, Bernie Ecclestone, tratará de firmar este fin de semana el acuerdo con el Automovil Club de Italia (ACI) para la continuidad en el calendario en el futuro del circuito de Monza, que el próximo domingo acogerá el Gran Premio de Italia. "Me sorprendería si no llegásemos a un acuerdo", ha expresado el inglés.
El Autódromo di Enzo e Dino Ferrari, localizado en Imola (San Marino), tan sólo sustituyó a Monza durante la celebración del Gran Premio de Italia en 1980. Aquella carrera la ganó el brasileño Nelson Piquet, seguido del australiano Alan Jones, quien se coronó campeón aquella temporada, y del argentino Carlos Reutemann. Desde 1981 hasta 2006, el trazado acogió el Gran Premio de San Marino, en el que, desde 1994, año en el que tuvieron lugar los trágicos accidentes de Roland Ratzemberger y de Ayrton Senna, ha sido frecuente ver ganar a Michael Schumacher, quien tiene el récord de victorias aquí, con siete triunfos.
En cuanto a Monza, además de considerarse un templo en esta categoría automovilística, es uno de los circuitos más rápidos que ha habido en la Fórmula1. Su antiguo óvalo peraltado sirvió de escenario para rodar Grand Prix (1966), una cinta considerada de culto por los fans del automovilismo. Dicha rapidez, junto a la velocidad de los monoplazas actuales, podrá traernos buenos episodios el próximo domingo.