Felipe Massa es un piloto especial, y aunque echando un ojo a sus últimos años en la parrilla pueda parecer todo lo contrario, lo cierto es que el brasileño ha aportado mucho a la F1 y viceversa. Además, aunque materialmente no hubo suerte, estuvo a punto de conquistar lo máximo en la F1, el título de campeón del mundo que se le escapó por un punto. ¿Qué es un punto en el último momento? Para todo el que siguió la temporada 2008 nada, quizás la leve diferencia entre un campeón titulado y otro sin titular, sin restar mérito a Hamilton.

Pero para Massa supuso el hecho de tener que retirarse de la F1 con la espinita clavada. Sin embargo, como el mismo ha dicho, se siente orgulloso de todos sus logros y no es para menos ya que como una extraña minoría el brasileño es de esos pilotos para los que el camino no es tan fácil como el de los niños de papa adinerados y con capacidad de comprar un asiento en la categoría reina del automovilismo. Así, el mundo de la velocidad podría haber presenciado su retirada antes de tiempo, cuando los problemas económicos no favorecían la continuidad de su carrera.

Inicios con Sauber

Supo ganarse sus asientos, comenzó su andadura a los 9 años en los Karts y a partir de entonces continuó participando en distintas modalidades de la velocidad, La Fórmula 3000 Europea fue la que le dio el billete a la F1 ya que demostró una superioridad abrumadora. Así comenzó como piloto de pruebas en Sauber y en 2002 lo nombraron como piloto titular.

Ferrari y Williams, las míticas

Este fue el equipo que le permitió ponerse en el escaparate, durante tres temporadas 2002,2004 y 2005, y allí fue donde una italiana acostumbrada a ganar le ojeo y se lo llevó tras la marcha de su rey, así Scuderia Ferrari fue su segundo equipo y en el que más tiempo pasó. Un total de ocho temporadas en las que pudo compartir equipo con grandes como Räikkönen, Alonso y Schumacher, donde consiguió sus mejores resultados en F1 (3º,4º y 2º respectivamente) . Además con Ferrari, en 2009, sufrió el peor accidente de toda su carrera que casi se obliga a abandonarla. Todas esas experiencias configuraron sus mejores años como piloto y fueron tan intensos que al acabar su andadura en el equipo rojo, en 2013, lo primero que se planteó fue dejar la F1. Y aunque por suerte no fue así, lo cierto es que no ha vivido tiempos mejores fuera de la reina de las escuderías. Y es que a Massa los fines de ciclo no le sientan bien.

Cuando parecía que había tocado techo otra de las míticas escuderías le contó que todavía tenía mucho que dar al deporte y así lo convencieron para formar parte de la parrilla otros tres años más en Williams. Y aunque no han sido tres años brillantes, en su despedida Massa sólo tenía palabras de agradecimiento para la gran familia Williams. Con los que también empezaba a cumplir ciclo, pues el futuro del brasileño con la escudería no estaba claro y, sin la información suficiente para saber los verdaderos motivos de su retirada, cabe la posibilidad de que Massa pensara que una retirada a tiempo siempre es una victoria, pues esta está siendo su peor temporada desde 2009, de momento está 10º en la clasificación.

Así que sea por la falta de asiento para la próxima temporada o por unos largos 15 años en la F1, que ya pesan, lo que está claro es que el ciclo Williams ha sido el definitivo para el brasileño que ahora quiere tomarse las cosas con más calma y vivir la vida.

Futuro al volante

¡Pero ojo! porque el piloto ha dejado caer que el hecho de que se retire de la F1 no quiere decir que vaya a alejarse de los volantes para siempre y daba pistas sobre su posible futuro en otras categorías del automovilismo, que de momento no están confirmadas. Otra de las posibles perspectivas de futuro es el periodismo ya que hace tan sólo unos meses y con la decisión seguramente tomada, el brasileño debutó como colaborador en Motorsport, donde tiene una columna propia, la Columna de Massa. Y además, algo hace intuir que la retirada de la F1 tampoco será posible y es que otro mini Massa viene acerando fuerte. Así que no sería extraño ver a Massa dentro de un paddock viendo la carrera de su hijo, que ya apunta maneras y sigue los pasos de su padre. El propio Felipe mostraba en sus redes hace unos meses, la gran carrera entre su hijo y su amigo y compañero Daniel Ricciardo. Un encuentro improvisado en el que el pequeño de los Massa se hacía con la victoria.