Con diez victorias consecutivas, la mejor racha de su historia, el Borussia Dortmund empezó el partido con muchas ganas de poder prolongar esos números. Tras unos primeros minutos de tanteo en los que ambos conjuntos intentaron sentirse cómodos en el césped y estudiar al rival, los de Tuchel se pusieron manos a la obra y empezaron a dominar el juego. A los seis minutos, Mkhitaryan mandó el primer aviso en forma de disparo que se marchó alto tras una buena combinación con Gündogan.

Antes de llegar al cuarto de hora, el Dortmund encadenó unos diez minutos de gracia en los que monopolizó la posesión de pelota, el control del partido y las ocasiones. Mkhitaryan sacó a relucir su calidad con un eslalon desde la izquierda que acabó con un disparo desde la frontal que Leno desvió a córner. En el minuto 18, las abejas convirtieron una llegada del Leverkusen en su mejor aliado. Tras un saque lateral de las aspirinas y un primer rechace en largo de Sokratis, el balón le cayó a Kagawa en el centro del campo. Con un pase largo que rompió la espalda de la defensa visitante, el japonés sirvió en bandeja el gol a un Hofmann que, tras regatear a Leno en su salida, puso el 1-0 en el marcador.

Ginter y Hofmann fueron los mejores del Dortmund durante la primera parte (Foto: BVB).

Gol, dominio y tranquilidad

Un minuto después del tanto aurinegro, los de Roger Schmidt gozaron de su mejor ocasión del encuentro, pero Chicharito no supo definir bien en el uno contra uno con Bürki. A partir de entonces, el Borussia Dortmund se convirtió en amo y señor del encuentro. A pesar de no gozar de muchas oportunidades, los locales monopolizaron la posesión gracias a largas jugadas de combinación y a una buena presión que dificultaba la circulación de las aspirinas.

El Dortmund anuló al Leverkusen haciendo desaparecer a Calhanoglu

A la media hora de encuentro, Mkhitaryan volvió a disponer de una ocasión. Gran centro de Ginter a la frontal del ára, Aubameyang dejó pasar el balón para el armenio que conectó un disparo potente pero poco preciso, que se marchó muy desviado de la portería aspirinera. Por parte visitante no hubo ninguna ocasión clara, solo alguna llegada con cuentagotas y disparos lejanos de Kampl o Bellarabi que no inquietaron a Bürki. Gracias al buen trabajo defensivo, el Dortmund llegó al descanso habiendo anulado a Calhanoglu, por lo que el Leverkusen se vio privado de su mejor recurso para hacer llegar balones a los hombres de arriba.

El banquillo aspirinero dinamiza el partido

Nada más empezar la segunda mitad el Borussia Dortmund gozó de una buena oportunidad tras un centro de Ginter que Aubameyang intentó rematar en el punto de penalti. El gabonés sintió el contacto y cayó en el área, provocando las quejas de sus compañeros y de los aficionados reclamando una posible falta en el intento de remate que el árbitro no señaló como pena máxima.

Con la entrada de Brandt y Mehmedi el Leverkusen ganó profundidad y llegó más al área borusser

Tras el descanso, Roger Schmidt sentó a Kiessling y Kramer para dar entrada a Mehmedi y Brandt. El Leverkusen ganó profundidad gracias a la incorporación de estos dos jugadores, más rápidos y verticales que los jugadores a los que sustituyeron. Además, Calhanoglu no quedó tan escondido en el centro del campo, por lo que gozó de más terreno para correr y asociarse con sus compañeros, facilitando la llegada y el merodeo constante de jugadores aspirineros en la frontal del área borusser. Con más velocidad en el juego, el partido entró en una fase de locura en que locales y visitantes se alternaron las oportunidades durante poco menos de cinco minutos. Ni Aubameyang ni Chicharito supieron definir bien en el uno contra uno ante Leno y Bürki respectivamente.

Calhanoglu gozó de más libertad y dio más velocidad al juego aspirinero (Foto: BVB).

Sentencia, control y dominio local

Merodeando la hora de juego, el Borussia Dortmund trenzó una buena jugada por la banda derecha gracias a la presión y recuperación de Hofmann. El alemán se asoció con Gündogan y Mkhitaryan para que el armenio cediera el balón a Kagawa en el pico del área pequeña. Con un toque sutil, el japonés culminó su gran partido al batir a Leno para poner el 2-0 en el marcador.

Kagawa culminó su gran partido con el gol que supuso el 2-0 (Foto: BVB).

A pesar de ir perdiendo, los de Roger Schmidt no bajaron los brazos y quisieron aprovechar la profundidad que el equipo ganó en la segunda mitad. Calhanoglu pudo recortar distancias con un gran disparo de falta que fue contestado con una gran parada de Roman Bürki. El conjunto aspirinero se atrevió con una presión algo más adelantada en algunas fases del encuentro pero no acabó de dar sus frutos. Todas las jugadas de ataque visitantes volvían a acabar con un disparo lejano que no suponía ningún peligro para el guardameta local.

Con el 3-0 el Leverkusen bajó los brazos y el Dortmund volvió a dominar

El Dortmund no se dejó sorprender por el intento de mejora de los visitantes y volvió a dominar la posesión y el control del juego, plantando una defensa muy bien organizada bajo el liderazgo de Sokratis. En el minuto 72 llegó la sentencia y la rendición final del Leverkusen en forma de penalti claro cometido sobre Ginter. Aubameyang ejecutó a la perfección el lanzamiento para empatar con Thomas Müller como máximo goleador del torneo, certificando el ataque borusser como el mejor de la Bundesliga. Con el 3-0 en el marcador el Leverkusen bajó los brazos y el Dortmund monopolizó la posesión, jugando gran parte del tiempo en campo contrario y gozando de buenas oportunidades para hacer más grande la herida visitante.