Victoria del Ingolstadt en un partido con pocas ocasiones y en el que la igualdad fue la seña de identidad. El partido no tuvo un dominador claro y fueron los locales los que, a falta de diez minutos para el final consiguieron romper la igualdad. El Eintracht Frankfurt jugó bien en el centro del campo, pero la falta de puntería y la mala suerte hicieron que se fueran de vacío. Tanto Ingolstadt como Eintracht Frankfurt empataron la jornada pasada. Los recién ascendidos empataron a uno con el Colonia, mientas que las águilas también empataron a uno contra el Hertha de Berlín. Solo dos puntos les separaba en la clasificación (iba por delante el Ingolstadt).

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Primera parte igualada

El conjunto local tuvo un fuerte inicio, buscando un gol tempranero que descolocara al Eintracht Frankfurt, pero la defensa visitante estaba muy segura atrás. Ambas defensas estaban blocando los disparos de los jugadores rivales, por lo que los porteros no tuvieron un trabajo excesivo en los primeros compases de juego. El partido estaba muy igualado, el Ingolstadt estaba jugando con una ritmo alto, buscando el hueco. La primera gran ocasión de gol la tuvo el Eintracht Frankfurt a los veintidós minutos, un pase al hueco para Castaignos lo dejó solo frente al portero local, que salió de su área para arrebatarle el balón, pero Özcan no despejó y el balón cayó en los pies de un jugador visitante, que buscó un gol desde lejos y sin portero, pero la intervención del portero local parando el disparo con el pecho evitó el peligro. Finalmente, el árbitro señaló posición antirreglamentaria del delantero visitante.

El Eintracht Frankfurt empezaba a crear ocasiones de peligro, pero el gol seguía sin caer para ninguno de los dos equipos. Con el paso de los minutos el partido se fue igualando porque no había un dominador claro sobre el césped. A la media hora de juego, Hasebe vió la primera y única tarjeta amarilla que se iba a sacar en los primeros cuarenta y cinco minutos. Tanto Ingolstadt como Eintracht Frankfurt se intercambiaban las ocasiones, pero ninguno de los dos equipos consiguió materializar en el primer tiempo. Poco se vió en los últimos minutos de la primera parte, pocas llegadas y cuando conseguían una oportunidad, no la materializaban. Finalmente se llego con empate a cero al descanso. Ninguno de los dos equipos estaba demostrando ser capaz de dominar el juego y las ocasiones.

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Los goles llegaron a falta de diez minutos para el final

Tras el descanso fueron los locales los que gozaron de la primera ocasión. Se trataba de una falta que fue rematada por Hubner, pero su remate salió rozando el palo. Un minuto después, otra vez el Ingolstadt, tuvo la ocasión de adelantarse en el marcador, una cabalgada por la banda de un jugador local acaba en un pase de la muerte de Max Christiansen para Hinterseer, pero el jugador la desaporvecha. Tras esta ocasión, el partido entró en una dinámica de juego igualada, donde ninguno de los dos equipos desequilibraba la balanza.

Cumplida la hora de juego, el Eintracht Frankfurt jugaba en el centro del campo y además tenía la posesión del esférico, lo que provocó que tuvieran más llegadas al área rival. Pero sus llegadas no acabaron con la igualdad del marcador. Los visitantes lo intentaron desde el córner, pero no lograron sacar nada interesante de la estrategia. A falta de quince minutos para el final del partido lo intentó Alexander Meier, probando fortuna con una volea desde el borde del área, pero un defensa local despejó su disparo a saque de esquina. El partido parecía encarrilado al empate a cero, ninguno de los dos equipos conseguía doblegar al rival y las llegadas de locales y visitantes no eran suficientes para que la igualdad desapareciera. Pero todo esto se borró de un plumazo en el minuto setenta y nueve: a falta de once minutos para el final del partido Gross recibió un pase a veinte metros de la portería visitante, con mucha fuerza disparó y con fortuna su disparo acabó en el fondo de la portería tras dar en el poste derecho.

El gol había matado al Eintracht Frankfurt que apenas disponía de tiempo para marcar un gol. El Ingolstadt iba a volver a saborear la alegría del gol solo cinco minutos después. Un error de un defensa visitante acabó con Lex regateando al portero del Eintracht Frankfurt y marcando a placer el segundo y definitivo gol de su equipo. Sin esperanzas de sacar algo de su visita al Audi-Sportpark los jugadores visitantes continuaron el partido hasta que el árbitro dió por terminado el encuentro. Los tres puntos se quedaron en casa. Al Ingolstadt le bastaron cinco minutos para amarrar los tres puntos.

Tras este partido, el Ingolstadt visitará al Stuttgart. El Eintracht Frankfurt, por su parte, recibirá al Borussia Mönchengladbach.

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