Dublín se vestía de gala para recibir uno de los mejores choques de la Fase de Clasificación, donde los tréboles se jugaban el ser o no ser ante la campeona del mundo. Con tres victorias en los últimos tres choques, Irlanda debía puntuar al menos y esperar resultados del Escocia – Polonia para seguir con opciones. Por su parte, a los germanos les valía con un solo punto para sellar su pase de manera definitiva a la Euro.

Monólogo infructuoso

El encuentro, tras unos primeros instantes de idas y venidas, no tardó en tomar un claro color visitante. Los germanos sabían de su superioridad y antes de cumplirse el cinco, empezaron a monopolizar el juego y el control del partido. Con posesiones muy largas, la Mannschaft comenzó a encadenar pases, tratando de mover a la ordenada zaga irlandesa. Kroos y Gündogan recibían y la movían con suma facilidad en campo rival, y las apariciones de Reus por los costados daban cierto vértigo el juego.

Con posesiones muy largas, Alemania comenzó a encadenar pases con suma facilidadPara mayor desnivel, los irlandeses se cerraron enormemente en defensa, tratando de evitar los balones filtrados de los creativos germanos. Un ajuste que dejó despobladas las bandas, dominadas por Ginter y Hector durante toda la primera mitad, para mayor control germano. Gündogan tendría la primera del partido, y poco después Özil anotaría en fuera de juego para los suyos. Pese al tremendo dominio y buen juego, Alemania no lograba dar con la tecla así que, llegada la treintena, decidió tomarse un pequeño descanso.

Reus fue de los más activos durante todo el encuentro | Imagen: DFB

Empezó en ese momento el tramo menos brillante del choque, con una Alemania excesivamente relajada ante las facilidades de su rival, y una Irlanda totalmente incapaz de generar nada con el balón. Walters en el 34 tendría la primera y única ocasión de los suyos tras una notable jugada, y antes del descanso, en un último arreón germano, un remate de Özil se marcharía lamiendo la cepa del poste. Poco más antes de llegar al descanso de un choque que, en este tramo final, se cobraría dos víctimas en las figuras de Götze y el meta Given, quienes fueron sustituidos por Schürrle y Randolph por sendas lesiones.

Ley de vida

El segundo periodo empezó de un modo similar a como había transcurrido el primero. Alemania tenía la pelota y mandaba, tratando de buscar huecos en la defensa que le abriera el camino del gol. Sin embargo, la fe de los germanos ya no era la de los primeros compases, lo que les sumió en un estado de conformismo progresivo. El dominio fue a menos, al igual que la mordiente en los ataques, hacho que regaló a Irlanda la posibilidad de crecer. Los de Martin O´Neill recibieron el mensaje y, tras adelantar sus líneas, igualaron las tornas del partido.

El empate le valía a los teutones, que poco a poco fueron dando más signos de dejadezSchürrle, tras un magnífico contragolpe entre Neuer y Reus, tendría la mejor de los germanos, pero su remate se marchó alto. El empate le valía a los teutones, que poco a poco fueron dando más signos de dejadez. Una dejadez que tocaría a su final cuando, en el 70, Randolph sacó largo desde su portería, Long le comió la tostada a los centrales y fulminó a Neuer con una gran definición. La placida noche germana se tornaba en pesadilla para los de Löw, que al instante subieron su intensidad. Sin embargo, delante estaba el equipo menos goleado del grupo, algo que los británicos dejarían ver los minutos venideros.

Los centros desde los costados apenas lograron dañar a una defensa crecida, y los disparos lejanos, de Kroos y Boateng, se toparon con un seguro Randolph. El gol germano no llegó e Irlanda se llevó el gato al agua finalmente. En uno de los choques más cómodos de esta fase de clasificación, la Mannschaft dio su brazo a torcer ante una pobre pero efectiva Irlanda. La falta de puntería, pero sobre todo de constancia en su juego, fue una losa demasiado grande para una selección germana que necesitará sumar un punto ante Georgia. Por su lado, los británicos reavivan sus opciones de clasificación, y se jugarán el pase con Polonia en la última jornada.