Vibrante partido el que nos han hecho sentir tanto Borussia Dortmund como Liverpool en el Signal Iduna Park. Con un ambiente espectacular de fútbol los dos equipos dieron por bueno el empate a uno final después de unos noventa minutos muy intensos donde ambos mostraron sus cartas encima del tablero. El Liverpool se adelantó en la primera mitad justo cuando los de Tuchel mejor se encontraban. Hummels logró empatar de cabeza nada más comenzar la segunda mitad. La última media hora fue un quiero y no puedo de los locales que se conformaron con no encajar a intentar marcar el gol del a remontada.
Presión incómoda red
Bajo la batuta de Weigl, el Borussia Dortmund dominaba el encuentro, bajo una presión asfixiante en los primeros minutos del LiverpoolLos primeros minutos del partido se desarrollaron con una alta presión por parte del equipo de Jürgen Klopp que provocaba que los jugadores del Borussia Dortmund no tuvieran la facilidad que acostumbran a sacar la pelota desde atrás. Sin embargo, poco a poco los de Tuchel crecieron en su fútbol y se fueron acercando con peligro a la meta de Mignolet. En el minuto 16 llegó la primera acción de peligro. Weigl le mandó un formidable balón a Schmelzer a la espalda de la defensa red, llegó hasta línea de fondo y su centro fue rematado por Mkhitaryan pero el disparo lo taponó Sakho evitando el primer gol del encuentro.
Minutos después llegó una de las acciones más desafortunadas del envite. Lovren y Weidenfeller chocaron en un pugna por el balón y dejaron al portero del Borussia gravemente dolorido en su boca. Tras unos minutos de parón el partido volvió a reanudarse y de nuevo los locales volverían a tener bastantes acciones de peligro pero desafortunadamente para su hinchada la definición iba a ser nula ante el Liverpool.
Tanto de Origi: punto de inflexión
En una de las pocas acciones peligrosas del Liverpool logró un gol que vale su peso en oro en la eliminatoriaCuando mejor se encontraba el Borussia Dortmund en el terreno de juego llegó el tanto visitante. En una de las pocas oportunidades peligrosas que dispuso el equipo inglés llegaría el primer tanto. Origi recogería un balón en largo y tras regatear a varios defensas chutó a portería subiendo el primer gol al electrónico. El gol encajado sentó como un jarro de agua fría a las abejas que pedirían a gritos la llegada del tiempo de descanso para poder pensar en lo sucedido en la primera mitad. Justo antes del pitido del final del primer acto, Origi tuvo un mano a mano que esta vez supo parar Weidenfeller.
Hummels al rescate y vuelta al guión del inicio
Sahin salió para dar otro aire desde el inicio del segundo acto al Borussia Dortmund en lugar de Durm. A los 48 minutos los locales sacaron un saque de esquina en corto, Mkhitaryan puso un centro al corazón del área y Hummels llegó desde atrás para rematar con la testa y poner la igualada en el marcador. Todo indicaba que el Borussia Dortmund iba a ser una "máquina de matar" pero ocurrió justo lo contrario porque el Liverpool reaccionó notablemente al gol encajado y pudieron llegar varios goles de forma consecutiva.
Hummels anotó el gol del empate. Weidenfeller evitó que el Liverpool volviera a ponerse por delante y la última media hora fue de respeto absolutoCoutinho en dos ocasiones y Clyne en otra, pusieron a prueba los buenos reflejos que Weidenfeller sigue teniendo pese a su edad. Tras unos minutos excelentes del equipo de Klopp, el Dortmund consiguió volver a asentarse en el encuentro a base de ralentizar el juego con posesiones largas en campo propio y dejando pasar los minutos. Volviamos de esta forma al mismo guión con el que empezamos el partido aunque las ocasiones iban a reducirse a medida que avanzaban los minutos.
Los dos técnicos llevaron este encuentro de ida más a la táctica que al buen fútbol porque ambos desconectaron por completo a la estrella rival. Hablamos de Coutinho y Aubameyang que no entraron apenas en el partido en ningún momento. Esto hizo que Tuchel retirara del terreno de juego a la estrella de Gabón para dar entrada al joven Pulisic y buscar mediante otra forma llegar a la portería de Mignolet. Sin embargo, daba la sensación a medida que avanzaba la segunda mitad que tanto Dortmund como Liverpool daban por bueno el empate y preferían no encajar ningún gol más a buscar el segundo.
Finalmente empate a uno en el Signal Iduna Park por lo que todo se decidirá en territorio inglés. Quedan noventa minutos de emoción, donde seguramente volverá a verse un encuentro equilibrado entre dos equipos similares en su idea de jugar al fútbol. El Borussia Dortmund queda obligado a marcar en Anfield si quiere mantener el sueño de llegar hasta Basilea.