Un conjunto necesitado de puntos para pelear por permanecer en la división frente a un equipo con boleto de Champions en la mano y el segundo puesto asegurado. De inicio este dato parecía marcar la diferencia, pero quienes la marcaron fueron los locales dejando todo en la cancha buscando conseguir el decimoquinto lugar en la tabla momentáneamente. El Eintracht Frankfurt quería empezar a olvidarse del descenso, necesitaban dejar todo en el campo y mostrar fortaleza defensiva sobre un rival que cuenta con una de las mejores delanteras del torneo, el poderoso Borussia Dortmund.
Con sed de victoria
El encontrarse en el penúltimo lugar de la tabla al inicio de un partido hace que la necesidad de conseguir puntos crezca, asimismo, la intensidad con la que se debe jugar dicho encuentro debe de mostrarse dentro del terreno de juego. Parece ser que el técnico Niko Kovac dejó muy en claro a sus jugadores que en este encuentro se podía sacar, con esfuerzo, un gran resultado.
Corrió la pelota en el Commerzbank Arena y de inmediato el Frankfurt empezó a presionar al conjunto visitante, lo que provocó que poco tiempo después se hicieran con la pelota, sobre todo por las bandas, donde los laterales aprovechaban para generar peligro cerca del área del Dortmund. Una serie de centros y jugadas elaboradas en ataque estuvieron a punto de marcar la diferencia, pero que el arquero suizo, Roman Bürki, supo resolver sin ningún problema.
En un tiro de esquina que se jugó en corto a favor del Frankfurt, cayó el gol, tras un centro al área de Hasebe, Aigner con la cabeza desvió la pelota para ponerla en el ángulo inferior del arco del Dortmund, con esto se consiguió el gol que tanto buscaron los locales en los primeros minutos del encuentro.
Después de que se abrió el marcador, el dueño de la posesión del esférico durante el resto del primer tiempo fue el Borussia Dortmund. Quienes con un par de intentos de Aubameyang y una gran cantidad de centros por parte de Durm y Schmelzer lograban crear peligro en el arco defendido por Hradecky. Así culminó la primera mitad, con un conjunto visitante buscando el empate pero la falta de contundencia no se los permitió. Incluso en los últimos minutos del primer tiempo, se le anuló de manera errónea un gol al Dortmund, tras un remate válido de Hummels el árbitro lateral marcó un fuera de lugar que no existía e invalidó lo que hubiera sido el empate.
Todos atrás, la estrategia del local
Durante el complemento del partido solo hubo un equipo atacando en la cancha, el conjunto borusser dominaba el balón y con esto la posesión absoluta, sin embargo, la falta de imaginación en la creación de jugadas sería el principal problema para los dirigidos por Thomas Tuchel, quien con la salida de Durm del campo convirtió su defensa a línea de tres agrupando mayor cantidad de jugadores en ataque, aun así no consiguió al momento lo que buscaba.
El equipo del Frankfurt, con el ingreso de Chandler se agrupó, en su propia área, creando un muro que impedía al Dortmund hacer daño. Hubo una gran cantidad de llegadas las cuales terminaron en manos de Hradecky o en el despeje de los defensores. Una serie de intentos del Dortmund fueron las únicas ocasiones de peligro en el segundo tiempo.
Una actuación floja del silbante alemán, Daniel Siebert, la falta de contundencia e imaginación del conjunto de Tuchel y la solidez defensiva que mostraron los dirigidos por Kovac, fueron los ingredientes que establecieron la victoria para el necesitado Eintracht Frankfurt.
Al final, el marcador favoreció al local que con el resultado da un paso enorme en busca de su permanencia, y la derrota para el Dortmund significó solamente perder el invicto que tenía el equipo durante lo que va del 2016.