Tras la dimisión de Bernd Wahler y la confirmación de que Kramny no será el entrenador del Stuttgart la próxima temporada, el club sigue inmerso en un proceso de cambio de cara a sentar las bases para construir una estructura de garantías que le permita luchar por volver a la primera división tras su desastrosa campaña en la que perdió la categoría.

Robin Dutt dice adiós

El que fuera director deportivo desde enero de 2015 en la entidad sueva ha decidido, tras un intenso debate con el consejo de administración, poner fin a su relación con el club con efecto inmediato.

Schäfer: "Dutt tomó la responsabilidad de la dirección deportiva del club durante una fase muy complicada".

Martin Schäfer, presidente de la junta administradora del Stuttgart explicaba los motivos de esta decisión: "Al final de un intenso intercambio de posturas, todos estuvimos de acuerdo en que la finalización de nuestra cooperación con Robin Dutt era la decisión correcta. Tomó la responsabilidad de la dirección deportiva del club durante una fase muy complicada y trabajó con gran compromiso. Sería injusto culparlo solamente a él de los recientes acontecimientos pero en última instancia, hemos decidido prescindir de sus servicios con el fin de tomar las medidas necesarias para el progreso del equipo".

Robin Dutt. | Fuente: vfb.de
Robin Dutt. | Fuente: vfb.de

De esta forma Dutt finaliza su relación con el Stuttgart que espera encontrar en un futuro cercano a un sustituto que lidere la formación del nuevo equipo de cara a la próxima temporada.

Temporada nueva, míster nuevo

Jos Luhukay ha sido el elegido para sustituir a Kramny que no colmó las expectativas del un equipo que pos historia y plantilla jamás debería haber descendido a la segunda división. El contrato del nuevo técnico holandés será, por el momento al menos, de dos años.

Jochen Röttgermann: "Luhukay logró el ascenso a Bundesliga como entrenador de tres clubes diferentes".

Así hablaba de él Jochen Röttgermann, jefe de marketing del club suevo: "Jos Luhukay es un entrenador con mucha experiencia que ya ha demostrado sus múltiples cualidades en sus anteriores clubes. Está familiarizado con el fútbol en Alemania y logró el ascenso a Bundesliga como entrenador de tres clubes diferentes. Tiene muy claro su objetivo aquí para los próximos meses y ha señalado enfáticamente que está dispuesto a trabajar para el club en todo lo que haga falta".

Luhukay por su parte toma el reto de devolver al equipo a la máxima división cargado de ilusión y dispuesto a dejarse la piel por lograrlo. Aún siendo consciente del delicado momento que atraviesa el equipo es optimista: "el Stuttgart es un gran club con grandes posibilidades. Incluso estando en segunda división solo hay que mirar su infraestructura, el Mercedes-Benz Arena y el gran número de hinchas. Tenemos todos los requisitos para volver al primer nivel”.

Con todo el verano por delante, el neerlandés tiene claro "estamos trabajado en la planificación de la plantilla. Estoy trabajando junto a los responsables del club para conseguir un potente grupo de jugadores cuyo trabajo comenzará el 22 de junio, por lo que hasta entonces, hay un montón de trabajo por hacer. Estoy deseando que llegue el día". Motivación y ganas de hacer bien las cosas, pilares fundamentales para la construcción de un nuevo proyecto que ya comienza a rodar con un entrenador que conoce muy bien el objetivo por el que se trabaja, el ascenso a Bundesliga.