Goleada y ensayo para la Champions

Se presentaba un partido muy desequilibrado en el Parc des Princes entre Paris Saint-Germain y RC Lens. Los locales, luchando por el título e invictos esta campaña a domicilio eran claros favoritos ante un Lens que precisa de un milagro para salir de los puestos de descenso. El partido estaría sentenciado antes si no fuera por la poca efectividad del PSG.

Solo un equipo en el terreno de juego

Comenzó el enuentro muy fuerte el Paris Saint-Germain tratando de finiquitarlo por la vía rápida. Ibrahimovic intentó uno de sus espectaculares remates acrobáticos (2') y el cuero no se fue muy por encima del marco defendido por Riou. Nada más empezar, primer aviso del PSG.

Solo había un equipo en el campo. Los de Blanc dominaban todas las facetas del juego con un Verratti exelso en la medular. Precisamente desde sus botas nació la jugada que pudo poner el 1-0 en el marcador. Tras una combinación en el flanco derecho, Lavezzi puso el pase de la muerte a Bahebeck. El joven canterano tenía que empujarla, pero hizo lo más difícil enviando la pelota fuera (7'). El asedio continuaba.

El público del Parc des Princes, conocido en el país galo por su exigencia, no dudó en silbar al prometedor jugador frances de ascendencia camerunesa, cuando en la siguiente acción erró un pase claro a Ibrahimovic.

Sin tiempo para parpadear, el sueco se sacó de la manga un zapatazo de los suyos para hacer temblar el larguero, y, por ende, los corazones de los de Nord-Pas-de-Calais (14').

La presión a todo campo practidada por los locales asfixiaba a los de Kombouaré, que vieron cómo su guardameta Riou, conseguía detener el temporal con una antológica estirada tras un remate de cabeza de David Luiz en una falta lateral (15'). Daba la impresión de que el PSG estaba jugando con más de 11 soldados en el campo.

Por si fuera poco lo vivido hasta el momento, los parisinos no dudaron en herir a los lensois también en los contragolpes. En el primero de ellos, Zlatan se quedó mano a mano ante Riou (16'), pero el superclase nórdico pecó de ambición al querer levantar el esférico sutilmente por encima del portero. Nuevos lamentos en las gradas de la capital.

A todo esto, cabe recordar que el RC Lens también estaba presente en el terreno de juego. Pasado el primer cuarto de hora, los de Kombouaré mostraron los primeros síntomas de querer salir de su embudo, y se acercaron tímidamente a la portería de Sirigu. El cancerbero italiano, podría haberse traído consigo un periódico para leer mientras sus compañeros atacaban, atacaban y volvían a atacar.

La frustración se apoderó del PSG por momentos. En parte porque el capitán Ibrahimovic se empeñaba en llevar a cabo jugadas individuales, y eso perjudicaba al conjunto. Aun así, el frontón contra los visitantes continuaba. David Luiz regaló al aficionado una bella chilena que casi se convierte en uno de los goles del año en Europa (32'). El punto de mira seguía desviado.

La estadística era demoledora. El PSG llevaba 10 tiros en 30 minutos por uno del Lens. Era francamente un milagro que no hubiese habido ningún tanto todavía.

Y por poco, repito por poco, el primero lo consigue el Racing Club Lens. La primera acción triangulada de todo el partido finalizó con un tiro desde la frontal del área de Chavarría, que se fue desviado (39').

El fútbol es impredecible y por fin, el Paris Saint-Germain iba a obtener su premio la manera más inverosímil. David Luiz esta vez le quitó la falta directa a Ibrahimovic, y su disparo desde más de 30 metros tocó en un defensa y dejó a Riou sin ninguna opción. 1-0 con fortuna, la misma que se le había negado a los locales durante el resto de primer tiempo.

Golear y pensar en Champions League

Cerrar el partido lo antes posible era el propósito del PSG. Verratti lo sabía, y al igual que en el primer acto, comenzó a tirar pases al hueco para sus atacantes. Uno de ellos fue un caramelo para Lavezzi. El 'pocho' lo hizo perfecto al principio regateando al portero, pero tardó mucho en tirar a puerta vacía, y ahí Baal estuvo más listo y le robó la cartera (52').

Cuando el crono marcaba el minuto 59, al PSG se le dio una oportunidad para marcar y pensar ya en el duelo de Champions ante el Chelsea. Van der Wiel, muy activo en la banda derecha, penetró en el área y amagó el centro. Chavarría, no habituado a tareas defensivas se comió con patatas esa finta, y el penalti fue claro. Ibra al disparo, Riou en portería. El portero adivinó la intención del delantero, pero la colocación del sueco fue exquisita, y voilà: 2-0 (60').

Con esta diferencia Laurent Blanc dio comienzo a las rotaciones. Pastore entró por Verratti, quien fue tremendamente ovacionado por el público. No recibió la misma despedida Bahebeck en su tercer partido como titular en Ligue 1. El extremo estuvo desafortunado y se fue corriendo para dar entrada a Cavani. Modo Champions League ON...o ¿no?

Nada más producirse este doble cambio, el Lens dijo: "Aquí estoy yo y aun tengo algo que decir". Coulibaly, recién entrado por Guillaume, abrió el cuero a banda para que Baal centrase raso al corazón del área. Allí Touzghar le ganó la partida a David Luiz para rozar la bola y hacer inefectiva la estirada de Sirigu. 2-1 (69'), recortaba diferencias un Lens que todavía no se lo creía. 

Los datos abalaban a los parisinos. Tras ponerse 2-0 en siete ocasiones esta temporada, el PSG obtuvo siete victorias, un empate y uma derrota. Sin embargo, errar acciones tan claras como el mano a mano de Cavani con Riou (76'), no ayudaba a mantener tranquilas las emociones del respetable. Además, Coulibaly fue un completo tormento para David Luiz y Camara desde su entrada.

No fue Coulibaly, pero sí un remplazante del PSG el que iba a terminar con las opciones del Lens. Matuidi empujó el balón a la red después de un magnífico centro desde la derecha del 'flaco' Pastore (81'). Ahora sí, el posible empate de los visitantes era una utopía. 

Se desinfló un Lens que estando a nueve puntos de la salvación, tiene ya a estas alturas muy difícil mantenerse en la Ligue 1. La falta de confianza hacía prever más goles parisinos, y así fue. Zlatan sacó su varita mágica y le puso un balón bombeado a Pastore a la espalda de los zagueros. Pastore no la dejó botar y fulminó por bajo a Riou (83'). La clase y la técnica que los millones de Nasser Al-Khelaïfi habían comprado, se mezclaron para hacer una obra maestra.

El Paris Saint-Germain pudo conseguir la manita con un tiro al larguero de Van der Wiel, pero el resultado final fue 4-1. Con esta victoria el PSG se sitúa líder provisional de la Ligue 1 con 56 puntos, dos por encima del Olympique de Lyon, pero con un partido más. Por su parte, el RC Lens sigue en la penúltima posición a nueve puntos de la salvación. Sin embargo, si el Lorient empate o gana, la distancia puede aumentar. 

Puntuaciones VAVEL