Los dos equipos llegaban al encuentro con mucha motivación. El Milan venía de ganar al Udinese realizando el mejor partido de la temporada y como invicto fuera de San Siro, y el Genoa está haciendo una temporada memorable y venía de perder en la copa de Italia y las ganas de mejorar la imagen eran importantes. El conjunto que eliminó de la copa al Genoa fue el Empoli, un recién ascendido y un auténtico varapalo para los rossoblu.

El partido era de altas expectativas, ya que los dos equipos están en las posiciones altas de la tabla y son candidatos a pelear la tercera plaza al Nápoles. El encuentro comenzó de manera muy accidentada y trabada. Apenas se jugó a algo en los primeros diez minutos, ya que las faltas e interrupciones eran constantes.

El Genoa planteó un partido muy serio usando las dos bandas en ataque pero principalmente la izquierda con un gran Perotti que tuvo que hacer trabajar a Bonera más de lo esperado. Izanghi sacó un mediocampo distinto al usado normalmente con De Jong y Montolivo, aparentemente los dos mejores en esa posición. Pero no participaron como era lo esperado ya que el Genoa neutralizó el medio campo milanista.

El Genoa estuvo muy bien plantado y el Milan muy perdido

Un poco más adelantado jugó Bonaventura, el más participativo del conjunto visitante. La principal baza de ataque del Milan, Ménez, se desesperaba porque las ocasiones brillaban por su ausencia y sus acompañantes en ataque, Honda y El Shaarawy, estaban muy desaparecidos.

Las mejores ocasiones del partido las tenía el equipo local y de todas las formas posibles: córners, jugadas por bajo, alto, pero no lograban finalizar las mismas. La mejor oportunidad que tuvo el Milan en el primer tiempo fue por un error en defensa del Genoa, Ménez corrió hacia la portería pero Perín despejó el peligro. El portero local hizo un partido muy serio y cometiendo muy pocos errores.

Sobre la media hora de partido, llegó el primer gol del encuentro. Ya había avisado anteriormente el Genoa del peligro en las jugadas a balón parado y sobre todo en los córners. Pero el Milan, en defensa, sufre mucho cuando le aprietan más de lo esperado y en un córner pagó esa debilidad. Un gran balón puesto por Perotti lo remató con cierta facilidad Antonelli poniendo la pelota lejos del alcance de Diego López. Merecidamente, el Genoa se adelantaba en el marcador.

Perotti fue el mejor del partido

Con la llegada del gol, el Milan se puso las pilas y parece que entró en el partido. Se dio prisa el conjunto visitante, queriendo marcar rápido para empatar, pero no pudo y los equipos se marcharon a los vestuarios con el Genoa por delante en el marcador.

A la vuelta de los vestuarios, el Milan intentó meter más presión e intensidad al partido, pero esos minutos de reacción o de sorpresa le duró más bien poco. Conforme iba sucediéndose la segunda parte, más cómodo estaba sobre el campo el Genoa. El conjunto local no creaba tantas ocasiones como en el primer tiempo, pero el peligro seguía existiendo. El dueño del balón en la segunda parte fue el Milan. Esto no incomodaba al Genoa; todo lo contrario, esperaba cerca de su área cortando las jugadas de ataque de los milanistas y luego salía a la contra para poder ampliar el marcador. Al igual que en el primer tiempo, el ataque de los locales se centraba en la banda izquierda con un Perotti que fue el mejor del partido.

El Genoa se coloca en tercera posición en la Serie A

Ambos entrenadores introdujeron cambios en esta segunda mitad pero la tónica del partido no cambió en absoluto. Por más que lo intentaba, el Milan no lograba pasar la línea que formaban los centrales del Genoa, sólo hacía bascular la pelota de forma muy horizontal en la zona de tres cuartos.

Finalmente, el marcador no se movió en la segunda parte y el Geona consiguió una victoria vital. Los aficionados, jugadores y cuerpo técnico celebraron la victoria con efusividad porque eran conscientes de lo importante que son esos tres puntos. Con esta victoria, el Genoa se coloca en la tercera posición de la tabla superando al Nápoles. También ha conseguido alejar un poco al Milan de esos puestos, ya que el conjunto de Inzaghi termina la jornada en séptima posición y perjudicado moralmente, ya que esta era una oportunidad única para acercarse a la tercera plaza.