La Lazio despide el año con una sensación difícil de entender; consigue el punto que le permite pasar la Navidad en la tercera posición con 27 puntos, pero sabe que podrían haber sido 29 puntos si hubiera sabido aprovechar la ventaja de un gran primer tiempo gracias al doble te de uno de los mejores partidos de Felipe Anderson desde que llegó al club. El Inter resucitó en el segundo tiempo tras un penoso primer periodo, y estuvo a punto de conseguir la victoria por su ímpetu. Kovacic acortó distancias con un fuerte disparo y Palacio puso el empate a diez minutos del final. El Inter, sin salir de la depresión, sigue en un discreto y engañoso decimo primer puesto con 21 puntos, a seis del tercer puesto.

La Lazio sigue la estrella que marca Felipe Anderson

Pioli sorprendió con su once, cómo no, poniendo en punta de ataque a Miroslav Klose en lugar de Filip Djordjevic. Biglia era baja, por lo que Ledesma ocupó su lugar. Mancini, por contra, dispuso de un extraño 4-1-4-1, reiterando que ciertos de sus hombres carecían de formación para ciertos de los roles que se les pedía, como Kuzmanovic, por delante de la linea defensiva. Dicho lo cual, no dio tiempo a practicamente nada cuando la Lazio se adelantó en el marcador con dos minutos de juego. Centro de Radu a la boca del área, donde Felipe Anderson se anticipa a Ranocchia en diagonal, batiendo a Handanovic con un potente disparo.

La Lazio confió demasiado en Felipe Anderson, que ha tenido un diciembre espectacular (4 goles y 2 asistencias). El Inter concedía así su sexto gol en Serie A en los primeros 15 minutos de partido. Sólo el Cagliari ha recibido más goles. La Lazio, a partir de ahí, dominó de principio a fin un primer tiempo que solo tuvo un color; el blanco. Un Inter sin ídeas y con una defensa demasiado adelantada y, por momentos, falta de efectivos en los peligrosos contragolpes del equipo de Pioli. Pese a ello, Kovacic lo intentó ante un segurísimo De Vrij y Guarín no inquietó a Marchetti en diversas ocasiones. En el minuto 37, Felipe Anderson volvía a ampliar la ventaja de la Lazio con un gran contragolpe en solitario. Su raso disparó dejó a Handanovic clavado y propiciaba así su primer doblete en Serie A. Hace un mes se hablaba de un Felipe Anderson tímido, triste e inadecuado para el fútbol europeo. Diciembre ha sido su punto de inflexión frente a las críticas; gol en la Coppa ante el Varesse y ante el Parma en Serie A, dos asistencias ante el Atalanta y, hoy, doblete en el Meazza. Y sólo tiene 21 años. Mancini, tras el gol, hacía gestos de desesperación negando con la cabeza y sólo aguantó siete minutos más para realizar su primer cambio, dando entrada a Medel por un Dodó que no se encontraba a sí mismo. El primer tiempo acabó con una merecida ventaja biancoceleste.

Resurrección del Inter ante una Lazio rancia y conservadora

El hechizo biancoceleste sólo duró 45 minutos. La Lazio desapareció en el segundo tiempo. Con la entrada de Medel, el Inter sumó en sentido y planificación táctica, mientras que a Guarín le faltaba un poco más de precisión. Con 10 minutos de juego, Piolí realizó su primer cambio sustituyendo a Miroslav Klose por Filip Djordjevic. Ni el alemán ni el serbio estuvieron acertados en todo el encuentro. Kovacic y Palacio resucitaron en el segundo tiempo a un gran Inter. La Lazio se encerró y lo pagó. Las oportunidades de Icardi y Kuzmanovic obligarón a la Lazio a encerrarse en su área con un Marchetti muy seguro bajo palos. Pioli se percató de la situación y tocó una tecla, pero no la adecuada. Puso contención al centro del campo dando entrada a Onazi por Lulic. Justo un minuto después, el Inter acortó distancias, cuando Kovacic enganchó un disparo tremendo tras un despeje de la defensa laziale. Con el Inter volcado y la Lazio encerrada, la sensación era que el 2-2 estaba más cerca por cada minuto que pasaba, y así fue. Palacio, que hasta el momento estaba siendo de lo peor en el campo, era el héroe tras recoger un cabezazo servido por D'Ambrosio. Bonazzoli inició la jugada, un chaval de 18 años que fue una inyección decisiva para los hombres de Mancini.

Palacio puso el 2-2 en el marcador a diez minutos del final. Fuente: La Gazzetta dello Sport

Tras el empate decisivo, el Inter siguió buscando la portería de Marchetti, que tuvo que sufrir para que su portería no encajase más goles. Los Nerazzurris lo intentaron hasta el último minuto con una Lazio sufriendo atrás, pero segura de sí misma por momentos. Los biancocelesti pasarán las Navidades en puestos de Champions League con la sensación de haber podido disfrutarlas aventajando en dos puntos a Napoli y Sampdoria. Los Nerazzurris tienen en cuenta con mucho orgullo el punto conseguido y no ven tan lejos Europa. El tercer puesto, incluso, lo tienen a seis puntos. Algo impensable que se puede considerar un lujo teniendo en cuenta sus últimos partidos.